Qué es la “miel eréctil”: el afrodisíaco cada vez más presente en Europa y contra el que ha alertado la Agencia Española del Medicamento

En España lleva prohibida varios meses, pero el contrabando con potenciadores sexuales está creciendo en diferentes países de Europa

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Fotografía que muestra una caja
Fotografía que muestra una caja del producto Power Howly en una tienda ambulante de la calle 25 de marzo, la meca del comercio popular en Sao Paulo, de Brasil. (EFE/ Sebastiao Moreira)

Los potenciadores sexuales se han convertido, en los últimos meses, en un motivo de preocupación en las aduanas europeas. Esta semana, el Ministerio del Interior informaba de la detención de una mujer de 63 años de República Dominicana que llevaba consigo cerca de 20.000 pastillas afrodisíacas, superando así el máximo permitido al viajar. Esas pastillas, que cuentan con un principio activo de “sildenafil citrato”, utiliado para tratar la disfunción eréctil.

Sin embargo, el negocio de este tipo de medicación ilegal afronta ahora el nuevo reto de lo que se conoce como “miél eréctil”, “miel sexual” o “miel del amor”. Este es el nombre que reciben diferentes productos que, bajo el atractivo de la forma de una barrita energética con buen sabor y componentes naturales, en realidad también contienen “sildenafilo”, algo de lo que muchos consumidores podrían ser conscientes.

Fue en verano del pasado 2024 cuando la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS) anunciaba la retirada de estos productos, tales como Miel D’afrique, Royal Honey Plus, Royal Honey VIP o Jaguar Power, pero lo ciero es que estos han seguido presentes en algunos locales y han empezado a ser interceptados, junto con otras marcas, en las aduanas de otras zonas de Europa.

Se elevan las alertas internacionales

Una de las naciones más preocupadas por este asunto es Francia, el país vecino, que ya ha denunciado que las intercepciones de “miel eréctil” en la aduana han aumentado con la llegada de embarcaciones provenientes de países como Malasia, Turquía, Túnez o Tailandia, desde donde se va repartiendo todo. Escriben desde la cadena de radio France Bleu de que estos productos pueden encerrar un “peligro potencial” para sus consumidores, dado su bajo coste -se venden por unidades- y a que se venden como “complementos alimenticios con finalidad afrodisíaca”.

De este modo, en 2014 Francia incautó hasta 13 toneladas de “miel eréctil” solo en un barco de Marsella, una cantidad notable, especialmente si se tienen en cuenta la proveniencia de otras incautaciones: también en la parte este del país, así como en la región de Auvernia-Ródano-Alpes. Además, también en Estados Unidos se ha alzado la voz sobre este asunto en los últimos meses, a raíz de ciertos debates en Tiktok en las que se debería tomar o no.

Riesgos para la salud

De este modo, la “miel eréctil” sigue llegando a millones de personas, las cuales quizá desconocen, como recuerda la AEMPS, que estos productos poseen también una determinada enzima contraindicada “en pacientes con infarto agudo de miocardio, angina inestable, angina de esfuerzo, insuficiencia cardíaca, arritmias incontroladas, hipotensión, hipertensión arterial no controlada, historia de accidente isquémico cerebral (ictus isquémico)”, enumeran.

“En pacientes con insuficiencia hepática grave y en personas con antecedentes de neuropatía óptica isquémica anterior no artrítica o con trastornos hereditarios degenerativos de la retina tales como retinitis pigmentosa”. Pero a esta larga lista de riesgos para la salud que pueden provocar en determinadas personas, también hay que precisar que este tipo de mieles interaccionan con otros medicamentos, algo que sería de una gravedad considerable.

Cuántas calorías tiene la miel.
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