El reality show de Telecinco está empezando a cobrar cada vez más forma y cada gala sorprende a sus concursantes con nuevas sorpresas. La tercera emisión del programa presentado por Sandra Barneda no ha dejado indiferentes a sus seguidores, ya que una de sus concursantes caía en la tentación. Las hogueras, en las que la presentadora catalana muestra a los participantes cómo ha sido el comportamiento de su pareja cada semana, han estado marcadas por muchos emociones.
La noche del lunes comenzaba con un resumen de la gala pasada, que ya dejaba entrever como algunos de los concursantes se ponen a prueba e incluso, llegan a tal nivel que no consiguen resistir la tentación. En un momento de la gala, Barneda llegaba a Villa Playa, el lugar donde se alojan las chicas, a quienes sorprendía con una caja misteriosa.
Pese a que no es novedad que Sandra irrumpa por sorpresa en el alojamiento, sí que ha sido la primera que les ha sorprendido con un cambio de dinámica. Una caja misteriosa contenía un objeto personal de una de las parejas, lo que a lo largo de la semana desencaminaría en un cambio radical de actitud entre estos dos concursantes. Se trata nada más y nada menos que del peluche de Montoya que contenía grabada la cara de Ana, una muestra de que el sevillano está disgustado con la actitud de su novia.
Empiezan las hogueras
Comienza la semana y con ella también las novedades del formato televisivo. Sandra anunciaba que comienzan las hogueras de la edición y anunciaba: “Podréis descubrir quién es verdaderamente la tentación de vuestras chicas y vuestros chicos”. Y desde luego que esa frase solo fue el inicio, puesto que las imágenes que le mostrarían a los concursantes les causaría de todo menos gracia.
Las alarmas situadas en la zona elevada de las villas junto a la frase: “Hay imágenes para ti”, se han convertido en los grandes enemigos de los protagonistas. Las chicas eran las primeras en enfrentarse a los videos sobre el comportamiento de sus parejas, quienes parece que no solo están teniendo actitudes cercanas a sus tentadoras, sino también sentimientos más profundos.
Mientras que Alba se encontraba indignada ante la actitud de Gerard y decía: “Quiero una hoguera de confrontación”, Bayan espera que su novio no supere los límites marcados, algo que también le ocurre a Andrea, quien cree que ella y Joel están intercambiando papeles. Y por último está Anita, quien tras haberse besado con su tentador, Manuel considera que su pareja “está más suelto que una atracción de feria”.
Una reacción inesperada
Llegaba el momento de los chicos y estos se sentaban algo tensos en la hoguera para ver lo que sus respectivas parejas habían hecho durante la semana; sin embargo, unas imágenes emitidas por la organización provocarían la reacción desmedida e inesperada de uno de sus concursantes. Aunque Montoya al inicio dijese: “No me apetece ni llorar ni berrear”, parece que eso cambiaría tras ver a Anita caer en la tentación.
“Me voy a mi casa y ya está” decía después de ver que su novia y Manuel habían pasado la noche juntos. Entre lloros y descamisado, sus compañeros intentaban calmarle. “Que traigan a otro muchacho, de verdad, que yo no puedo, ¿qué hago ahora Sandra?”, le preguntaba a la presentadora, que se encontraba altamente sorprendida ante lo ocurrido minutos antes. Gerard confesaba: “A veces, no soy feliz con Alba” y sus dos compañeros restantes se sorprendían al ver las actitudes de sus parejas.