Un ingeniero becario gana más de 8 millones en la lotería, pagará la hipoteca de sus padres y seguirá trabajando: “Algunos piensan que estoy loco, pero necesito un propósito en mi vida”

Cuando una persona juega a la lotería con uno o varios décimos, es normal imaginarse ganador y cumplir sueños o viajar alrededor del mundo, además de ayudar a familiares y amigos a liquidar ciertas deudas contraídas con las entidades bancarias, como una hipoteca.

Aunque es necesario recalcar que la lotería es un juego de azar, donde las probabilidades de resultar ganador son ínfimas, cualquier persona puede poseer el afortunado boleto y, a partir de ese momento, su vida cambiará radicalmente. Esta última aseveración no es aplicable al caso de James Clarkson, un ingeniero británico en prácticas que ha ganado más de 8,8 millones de euros en la Lotería Nacional, quien ha confirmado que continuará trabajando.

Cuando James Clarkson, joven de 20 años, residente en Carlisle -capital del condado de Cumbria, en Inglaterra-, revisó su boleto y comprobó que los números coincidían con el que había resultado ganador de la recompensa económica, pensó que estaba soñando.

No fue hasta unas horas después, en casa de sus abuelos y celebrando con champán y una cena de rosbif, cuando se dio cuenta de la hazaña que acababa de lograr.

En declaraciones a medios británicos, el joven ingeniero de gas en prácticas contó que ya ha reservado unas vacaciones para él y su familia en Cabo Verde, archipiélago volcánico frente a la costa noroeste de África. Además, detalló que con los más de 8 millones de euros que ha obtenido pagará la hipoteca de sus padres y planea comprarse un Audi, ya que “si condujeras una furgoneta fría todo el día, yendo de un trabajo a otro, lo entenderías”, relató entre risas.

Clarkson reflexionó sobre lo afortunado que ha sido con la retribución y reconoció que muchos de sus compañeros de trabajo no podrían pagar ni siquiera el seguro de un coche de esas características.

A pesar de la enorme cantidad de dinero que ha ganado y con la que podría vivir el resto de su vida, James Clarkson ha decidido continuar trabajando y formándose profesionalmente. Muestra de ello fue cuando, al día siguiente de la celebración familiar, apareció en su lugar de trabajo y se dispuso a desatascar desagües.

“Sé que la gente puede pensar que estoy loco por seguir trabajando, pero quiero hacerlo y, por supuesto, habrá algunas buenas vacaciones de por medio”, explicó Clarkson. Además, señaló que necesita “tener un propósito en la vida. Igualmente, de todos modos, mi padre no me dejaría no trabajar”.

El día que tuvo lugar el sorteo de Lotería Nacional, James se encontraba en casa de su novia, quien, en un primer momento, no creyó que su pareja hubiese ganado la lotería. “Ella me miró con cara de sueño y me dijo: ‘No, no has ganado’, se dio la vuelta y volvió a dormirse”, contó el joven agraciado.

Unas horas después, regresó a casa de sus padres, con quienes llamó al número de teléfono de la Lotería Nacional y comprobó que su número era el premiado. “Creo que me eché a reír. Pensé: ‘¡Esto es una locura!‘“, respondió el ingeniero británico.