El príncipe Andrés se ha enfrentado a un nuevo desplante familiar. Tras quedar excluido de la reunión navideña de los Windsor en Sandringham debido a sus incesantes polémicas, ahora el duque de York ha recibido un revés por parte de la princesa Ana, quien hasta ahora había sido su mayor apoyo en la familia real.
Según ha desvelado la prensa británica, la única hija de la reina Isabel II ha organizado una cena en el Castillo de Windsor en honor a la prestigiosa escuela escocesa Gordonstoun, de la que el príncipe Andrés fue alumno junto a sus hermanos, el rey Carlos III y el príncipe Eduardo, duque de Edimburgo.
Pese a sus vínculos con la escuela y a que su residencia de Royal Lodge se encuentra a escasos kilómetros de distancia del Castillo de Windsor, en la misma propiedad real, el duque de York no recibió invitación para este encuentro exclusivo.
La cena fue organizada por la princesa Ana, quien actúa como directora honoraria de Gordonstoun, una institución que ha sido parte importante de la educación de varias generaciones de la realeza británica. Según un portavoz de la escuela, se trató de “una cena íntima a la que asistió un pequeño número de invitados”. Aunque Ana nunca asistió al colegio debido a que este no era mixto hasta 1972, mantiene fuertes lazos con la institución, donde sus hijos, Peter Phillips y Zara Tindall, cursaron sus estudios.
Una fuente cercana al príncipe Andrés ha asegurado al Daily Mail que, de haber sido invitado, el duque “habría estado encantado de asistir”. Sin embargo, su ausencia fue notable, especialmente considerando su conexión histórica con la escuela. El príncipe siguió los pasos de su padre, Felipe de Edimburgo, que fue uno de los primeros alumnos de Gordonstoun, y sus hermanos mayores, al matricularse en el prestigioso colegio. Una fotografía icónica de ese periodo muestra a Andrés, entonces de 13 años, llegando a la escuela acompañado de su padre.
Gordonstoun ha sido un referente educativo para personalidades influyentes. Además de la realeza, su lista de exalumnos incluye al cineasta Duncan Jones, hijo de David Bowie, y a Jason Connery, hijo del actor Sean Connery. Actualmente, la matrícula anual en la escuela asciende a 61.440 libras, casi 73.000 euros.
Polémicas constantes
Este desaire se suma a una serie de dificultades que ha enfrentado el príncipe Andrés en los últimos años. Su retiro de los deberes reales en 2019, tras una polémica entrevista con Emily Maitlis en el programa Newsnight, marcó un punto de inflexión en su vida pública. En aquella ocasión, Andrés fue cuestionado sobre su vínculo con Jeffrey Epstein, lo que desencadenó un amplio escrutinio mediático.
Además, el duque de York ha vuelto a estar en el centro de la controversia recientemente debido a su relación con Yang Tengbo, un empresario chino acusado de espionaje. Tengbo, quien colaboró estrechamente con Andrés en proyectos relacionados con inversiones en China, tiene prohibida la entrada al Reino Unido bajo sospechas de operar como agente encubierto del Partido Comunista Chino. La situación trascendió hasta Gordonstoun, ya que Tengbo había sido pieza clave en el desarrollo del campus en China, una iniciativa de la que la escuela se desvinculó completamente una vez que surgieron las acusaciones.