Sin camas, sin sanitarios y sin espacio: los Planes de Invierno se quedan cortos en 12 comunidades autónomas

Habitaciones triples, pasillos llenos de camas, pacientes en salas de espera durante más de 24 horas... Desde hace semanas, trabajadores sanitarios de toda España comparten en redes sociales imágenes de saturación de los servicios de Urgencias. El colapso, atribuido al aumento de infecciones por virus respiratorios, se nota ya en 12 comunidades autónomas, según ha reportado el sindicato de enfermería SATSE, donde los hospitales adolecen de plantillas insuficientes y falta de camas.

Si el 2024 finalizó con una bajada en las infecciones respiratorias agudas, volvieron a repuntar al inicio de 2025, registrándose 639,8 casos por cada 100.000 habitantes, con la bronquitis (272,4 casos) y la gripe (62,6) liderando los contagios. A ellos se ha sumado este año el norovirus, que ha extendido los casos de gastroenteritis agudas por el territorio.

Pese a que las tasas de contagio son mucho menores que las registradas en los últimos dos años, los hospitales han vuelto a mostrar episodios de saturación y colapso en todo el territorio nacional: Madrid, la Comunidad Valenciana, Cataluña, Andalucía, Baleares, Canarias, Murcia, Navarra, Extremadura, Castilla-La Mancha, Euskadi y Cantabria son las regiones en las que el sindicato de enfermeras ha podido recoger incidencias.

La Comunidad de Madrid se muestra en el epicentro de la saturación de las urgencias: hospitales de toda la región han mostrado en las últimas semanas el aumento de pacientes ante una plantilla mermada por bajas de los compañeros.

Especialmente preocupante ha sido el escenario del Hospital Universitario La Paz, donde las matronas pusieron un parte ante el juez de guardia para evidenciar la falta constante de profesionales sanitarios desde hace meses. Mientras, en el Hospital 12 de Octubre reportan esperas de más de 24 horas para ser atendidos.

Pero no son los únicos: este martes 14 de enero y según ha podido constatar SATSE, el Hospital Gregorio Marañón tenía a las 8:00 horas el espacio de Urgencias prácticamente al completo, con 80 pacientes esperando ingreso. En el Infanta Leonor son 42, en el Ramón y Cajal, 57; en el Clinico, 33...Mientras, tal y como denuncian los sindicatos, los refuerzos del plan de invierno no alcanza a los servicios de urgencias.

Ante el caos que denuncian los trabajadores, la respuesta del Ejecutivo regional ha sido clara: “No existe ningún colapso, no existe ninguna falta de camas en la Comunidad de Madrid, sino lo que existe es una adaptación de las camas en función de la demanda que existe cada día y en cada hora en la región. La Comunidad de Madrid tiene una capacidad suficiente para atender la demanda de un pico de gripe, como ha sucedido en cualquier año anterior", explicó el pasado miércoles Elena Andradas, directora general de Salud Pública.

Con 305,2 casos por cada 100.000 habitantes, la Consejería andaluza de Salud y Consumo asegura que “no hay grandes incidencias” en los centros de la comunidad autónoma. La mayor parte del territorio se encuentra en la fase 0 del Plan de Alta Frecuentación elaborado por la Junta de Andalucía, sin embargo, algunas provincias ya superan los niveles normales.

Por centros hospitalarios, hay al menos 11 en fase 1,7 centros en fase 2 y tan solo dos centros en fase 3, uno en Huelva y otro en Jaén. Se trata del nivel de alerta más alto dentro del Plan de Alta Frecuentación y quiere decir que los pacientes de urgencias han aumentado más de un 25% durante tres días consecutivos, o que los ingresos han crecido más de un 30%.

Pero no son las únicas que la sienten: el Hospital Virgen de las Nieves, en Granada, nota la falta de espacios y de sanitarios, con pacientes que llevan más de 48 horas de espera para ingreso; y el Hospital Clínico San Cecilio “ha alcanzado un punto crítico”, según ha denuniado SATSE. En Málaga, el Hospital Universitario Virgen de la Victoria llegó a tener todas las camas ocupadas el pasado día 8, con hasta 70 pacientes en el área de Cuidados Críticos pendientes de cama.

La saturación de la sanidad pública se repite cada año según aumenta la presión asistencial, especialmente en invierno y verano. Para prevenir esta situación cíclica, el Ministerio de Sanidad propuso en 2024 la creación de un plan nacional contra la gripe, con medidas homogéneas en todas las comunidades. El documento fue elaborado entre los técnicos ministeriales y autonómicos, pero finalmente la Comisión de Salud Pública votó en contra de su aprobación.

Ante la negativa de las comunidades del PP, Sanidad optó por publicar el citado documento en forma de recomendaciones, entre ellas, el uso gradual de mascarilla según avance la epidemia o la baja de trabajadores de centros residenciales que estén en contacto con personas vulnerables. Mientras, las diferentes regiones han comenzado a tomar medidas frente al aumento de infecciones por virus respiratorios.

Algunas, como Aragón, Cataluña o la Comunidad Valenciana, ya recomiendan el uso de mascarilla en sus centros sanitarios. Otras, como Baleares, Euskadi o Navarra, han optado por aumentar el número de camas o reforzar la plantilla.