Una familia vende su casa para dar la vuelta a Europa en un bus acondicionado y el vehículo se estropea tras cuatro horas: llevan meses bloqueados en un camping

En agosto de 2023, Cécile Perrichon, Mathieu Pacaud y sus dos hijos dejaron atrás su hogar en Saint-Père-en-Retz, en la región de Loira-Atlántico, en Francia, con el objetivo de cumplir un sueño: recorrer Europa en un autobús acondicionado. Vendieron su casa, invirtieron más de 56.000 euros en el vehículo y planificaron cada detalle, incluida la educación a distancia de sus hijos, aprobada por el Ministerio de Educación tras tres solicitudes. Sin embargo, lo que parecía ser una aventura inolvidable acabó convirtiéndose en una pesadilla, en una situación que los tiene bloqueados desde hace cinco meses en un camping en Ille-et-Vilaine, al suroeste de Rennes.

La familia, cuenta Le Parisien, comenzó su travesía el 8 de agosto con grandes expectativas. “Salimos al mediodía, pero a las cuatro de la tarde el autobús empezó a dar problemas”, relató Cécile al medio Ouest-France. Según el diagnóstico inicial del mecánico que los auxilió, el embrague estaba dañado y el estado general del vehículo no era apto para el viaje. “Nos recomendaron anular la compra, pero ya habíamos gastado todos nuestros ahorros”, lamentó.

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El autobús fue remolcado hasta un área de estacionamiento para autocaravanas en Guichen Pont-Réan, un pequeño pueblo en Bretaña. Allí, Cécile, Mathieu, sus dos hijos, dos perros, tres gatos y un hámster han vivido durante meses, atrapados en una situación que no logran resolver.

El problema no solo es mecánico, sino también legal. La familia ha iniciado un procedimiento judicial contra el vendedor del autobús, al que acusan de mala fe. “Está haciendo todo lo posible para retrasar las audiencias”, explica Mathieu. Mientras tanto, los costes legales y el tiempo de espera han consumido gran parte de los recursos de la familia.

Sin posibilidad de recuperar su inversión de forma inmediata, han recurrido a la solidaridad de terceros. Crearon una campaña de recaudación de fondos en línea con la esperanza de comprar un nuevo autobús y reanudar su viaje. Hasta ahora, han recibido el apoyo de algunos donantes, pero el objetivo aún parece lejano. “Solo queremos que nuestros hijos puedan vivir esta experiencia que habíamos planeado con tanta ilusión”, comenta Cécile.

La rutina de la familia se desarrolla ahora en condiciones muy diferentes a las que habían imaginado. El autobús permanece inmóvil y sirve como una vivienda improvisada. Las limitaciones del espacio y la incertidumbre han marcado el día a día de los cuatro integrantes, quienes también deben atender las necesidades de sus mascotas. Pese a todo, han tratado de mantener una vida lo más normal posible, asegurándose de que los niños continúen sus estudios a distancia.

“Es difícil mantener el ánimo, pero intentamos aferrarnos a la esperanza de que esto se resolverá pronto”, confiesa Cécile. Aunque han recibido muestras de apoyo de vecinos y otros viajeros en el camping, la incertidumbre sobre el futuro pesa sobre ellos.

La historia de esta familia ha despertado el interés de los medios locales en Francia. Aunque el sueño de recorrer Europa permanece en pausa, Cécile y Mathieu siguen luchando por encontrar una salida: “Queremos creer que podremos volver a intentarlo, pero no podemos hacerlo solos”.