La tecnología continúa avanzando y los radares no son una excepción. Sin duda, una ciudad que apuesta por estos continuos progresos en materia de seguridad vial es París. Ya en 2019, fueron los primeros en instalar el radar de torreta, un avanzado dispositivo de control de tráfico capaz de detectar un abanico notable de infracciones; desde excesos de velocidad o adelantamientos indebidos, hasta el uso del móvil al volante o saltarse semáforos en rojo. Pero ahora, todo vas más allá con el radar definitivo. Desde octubre de 2024, la policía municipal de la capital francesa está equipada con una decena de radares gemelos y tiene previsto equiparse con 20 más a lo largo de 2025.
Estos nuevos radares son más discretos, más precisos y permitirán controlar a los conductores que van “muy rápido”. Cuestan 6.000 euros cada uno, pero parece que al Ayuntamiento parisino les ha convencido los primeros meses de trabajo de los radares gemelos: han dado lugar a 6.000 multas.
“Podemos luchar contra las personas que van demasiado rápido, podemos imponer multas por exceso de velocidad, pero la idea, con operaciones masivas, es demostrar que cuando vamos demasiado rápido, podemos ser controlados y sancionados”, afirmaba Nicolas Nordman, teniente de alcalde de París al diario francés BFMTV.
Una velocidad de 30 km/h
Hasta ahora, los automovilistas de París estaban acostumbrados a los radares fijos. Pero ahora se suma un ejército de 30 radares gemelos que cambiarán los hábitos de los usuarios de la vía. Los controles aumentarán y las multas, también. Recordemos que, en la gran mayoría de todo París, la velocidad máxima permitida es de 30 km/h, lo suficiente como para molestar a más de una persona.
“Creo que está en el orden de las cosas y es una pena que nos persigan de esa manera. Los radares móviles podrían controlar lo que hacen las motos en el tráfico de un solo sentido, controlando los semáforos en rojo”, sugería una conductora habitual de la zona.
“Tendré que tener mucho cuidado. Ya tengo mucho cuidado, pero en la circunvalación son como máximo 50 km/h”, protestaba otro conductor. “Hay que ver si no es solo represión o simplemente quieren quitarle el dinero a la gente, pero está bastante bien”, admitía otra automovilista.
París ya cuenta con tres radares fijos, sin contar los instalados en la circunvalación, donde el límite de la velocidad bajo de los 70 km/h a los 50 km/h en 2021. Sin embargo, la tasa de mortalidad no se ha visto reducida: 3.500 muertes al año.
La zona de ZFE (Zona de Bajas Emisiones en París), la instalación de un radar específico para los coches más ruidosos y ahora, estos radares gemelos prometen ser un verdadero quebradero de cabeza que podría provocar la huida de la población, según ha comentado el medio de motor francés Autojournal.
Radares en fase experimental
Pero no es el único radar que se está poniendo a prueba gracias a los avances tecnológicos. En Inglaterra, ya se está probando un nuevo radar capaz de detectar si el conductor ha consumido alcohol o drogas, o si está utilizando el teléfono móvil.
El dispositivo se caracteriza por su portabilidad, gracias a su fácil instalación. Pero lo que verdaderamente destaca es la incorporación de la Inteligencia Artificial para identificar a los vehículos sospechosos y analizar el comportamiento de los conductores. Si se detectan signos de intoxicación, las imágenes serán evaluadas por el sistema, y transmitidas a la policía para que realicen el control.