Un montañista alemán, desaparecido desde 1967 tras un accidente en los Alpes austriacos, ha sido identificado gracias a pruebas de ADN, según un comunicado reciente de las autoridades policiales en Austria. El descubrimiento ha sido posible gracias a una de las consecuencias del calentamiento del planeta: el retroceso de los glaciares debido al cambio climático, que está revelando cuerpos de personas desaparecidas hace décadas. Según un reportaje de la Agencia AFP, las temperaturas récord en los últimos años han acelerado el derretimiento de estas masas de hielo, dejando al descubierto restos humanos y objetos antaño sepultados.
En este caso concreto, el hallazgo se produjo en agosto de 2024, cuando un pastor descubrió restos óseos de una pierna y un pie en un valle próximo a Sölden, en la región de Tirol. Ahora, tras realizar análisis de ADN, se ha revelado que los restos pertenecían a un alemán de 30 años que se había caído en una grieta mientras hacía montañismo hace 57 años. En aquel momento, las malas condiciones meteorológicas truncaron los esfuerzos de búsqueda. “El retroceso de los glaciares, en este caso el de Wasserfallferner, está sacando a la luz restos humanos”, afirmó Erwin Voegele, portavoz de la policía austríaca, en una declaración a AFP. Según el mismo portavoz, este tipo de hallazgos son “raros” y las identificaciones resultan especialmente desafiantes después de tanto tiempo.
El deshielo progresivo en los Alpes no solo afecta a Austria. En un caso similar reportado el año pasado, los restos de un alpinista alemán de 38 años, desaparecido desde 1986, fueron descubiertos en el glaciar Théodule, en Suiza, según destaca el medio citado. Mientras tanto, en la misma región del Tirol austríaco, se encontró el cadáver de otro montañista austríaco de 37 años en septiembre de 2024. Según Voegele, los glaciares actúan como una especie de cápsula del tiempo, conservando los restos en el hielo hasta que las altas temperaturas los exponen nuevamente.
El fenómeno del deshielo glacial también ha atraído la atención de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), que advierte ante una crisis climática sin precedente. La OMM señaló que el aumento inusual de las temperaturas globales en 2023 y 2024, impulsadas por el uso continuado de combustibles fósiles, está derritiendo los grandes glaciares del planeta a un ritmo histórico.
Retroceso de los glaciares
Además de los hallazgos relacionados con restos humanos, el retroceso de los glaciares también ha revelado equipos de escalada antiguos, ropa e incluso piezas históricas que estaban enterradas bajo el hielo. Pero el impacto más visible está directamente relacionado con la crisis climática y sus múltiples efectos adversos en el medio ambiente y las comunidades humanas.
Erwin Voegele ha señalado que los efectos del cambio climático en la región alpina no solo deshacen la nieve, sino que comprometen toda la dinámica ecológica del ecosistema montañoso. Según AFP, Austria, Suiza y otros países alpinos enfrentan una pérdida progresiva y alarmante de sus glaciares, con estudios recientes que pronostican la desaparición completa de algunos de ellos en las próximas décadas.