Emma Thompson reveló su verdadera motivación para participar de Harry Potter: “No quiero ser grosera con quienes les gusta la saga”

La actriz británica sorprendió al marcar distancia con el apego emocional que otros actores suelen expresar en franquicias exitosas

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La actriz británica marca distancia
La actriz británica marca distancia con el apego sentimental que otros actores expresan hacia la saga mágica (REUTERS/Dylan Martinez)

Emma Thompson, una de las actrices británicas más reconocidas y premiadas de las últimas décadas, generó debate durante el Festival de Locarno al compartir con honestidad sus impresiones sobre su paso por la saga cinematográfica de Harry Potter. En una sesión de preguntas y respuestas con el público, la intérprete fue tajante respecto a su nivel de implicación con la famosa franquicia basada en los libros de J.K. Rowling. Thompson confesó que su participación en la historia mágica no fue fruto de una afinidad o motivación artística especial, sino que estuvo motivada principalmente por el factor económico, tema que fue recogido por el medio Espinof.

Una franqueza poco frecuente en la industria

Al compartir su experiencia, Thompson afirmó: “No es realmente una parte importante de mi trabajo creativo. Lo siento mucho. No quiero ser grosera con quienes les gusta Harry Potter, pero, ¿sabes?, llegué, hice un poco con las gafas, mucho con el pelo, y luego me fui a casa con un sueldo bastante bueno. Estoy muy agradecida”, explicó según Espinof.

Sus palabras se alejan de la narrativa habitual de quienes participaron en la saga, muchos de los cuales destacan un fuerte impacto emocional y profesional. Para Thompson, la experiencia constituyó un episodio más en su carrera, sin un apego especial ni un valor sentimental.

Thompson considera su papel de
Thompson considera su papel de Sybill Trelawney como un episodio profesional sin trascendencia personal (Harry Potter y el Prisionero de Azkaban)

El personaje de Sybill Trelawney, profesora de adivinación famosa por su excentricidad, solo apareció en tres de las ocho películas de la saga. Aunque su caracterización dejó huella entre el público, Thompson nunca pretendió que su interpretación tuviera mayor trascendencia en su trayectoria. Su integración fue puntual y sin mayor implicación creativa ni personal.

Un rol secundario y reflexiones en Locarno

Durante su estancia en el Festival de Locarno, donde fue reconocida como invitada de honor, Thompson reflexionó sobre proyectos que han marcado su carrera de manera distinta. Relatando sobre ‘Love Actually’, expresó: “La verdad es que me asombra constantemente que esa película haya durado, no es que no me guste. Me gusta mucho, pero es rara (...) Tocó una fibra sensible porque, sobre todo las mujeres, cuando nos rompen el corazón, tenemos que ocultarlo para que no lo vean”, comentó según Espinof. Este tipo de declaraciones subraya la diferencia entre sus papeles: hay proyectos que logran trascender la pantalla y tocar su vida, mientras otros quedan en un plano estrictamente profesional.

La actriz destaca su implicación
La actriz destaca su implicación creativa en 'La niñera mágica', a diferencia de su experiencia en Harry Potter (Créditos: Universal Pictures)

Sin embargo, el contraste más notorio surgió cuando abordó su trabajo en la franquicia ‘La niñera mágica’ (‘Nanny McPhee’). En ella, además de protagonizar, participó activamente en la escritura y el desarrollo creativo. Thompson lo explicó con claridad: “Las películas de Harry Potter son parte de una gran franquicia a la que no siento un apego emocional ni necesariamente creativo. Es más como interpretar un papel, mientras que las de Nanny McPhee son algo que he escrito yo”. Este vínculo directo con el proceso creativo otorga a ‘La niñera mágica’ un significado especial, completamente distinto al que experimentó con Harry Potter.

Compromiso creativo: esencia de su carrera

Para Emma Thompson, el valor duradero de una obra depende de su implicación personal. Solo en aquellos trabajos donde pudo aportar creatividad propia y esfuerzo personal se genera un recuerdo significativo. Thompson reafirma que el sentido profundo de su trabajo reside en las historias que siente como propias, más allá del éxito mundial o la popularidad de una franquicia. Es esta convicción la que, según Espinof, define su vínculo con el cine, el arte y los proyectos a los que se entrega. El compromiso creativo, antes que la fama o el éxito comercial, es lo que impulsa su carrera y da sentido a su recorrido profesional.

La sinceridad de Thompson invita
La sinceridad de Thompson invita a repensar el verdadero significado de participar en grandes franquicias (REUTERS/Maja Smiejkowska)

La postura sincera de Emma Thompson invita a repensar la verdadera trascendencia de participar en grandes sagas frente al valor de crear algo genuino. Para la actriz, la clave está en el proceso y en su relación cercana con la obra, no en el reconocimiento masivo. El auténtico valor se construye en el compromiso y la pasión que se invierten en cada proyecto, diferenciando a quienes solo buscan el reconocimiento y a quienes, como ella, encuentran sentido en una verdadera entrega artística.