En la historia del cine, pocas películas han dejado una marca tan profunda como Forrest Gump. Estrenada en 1994 y basada en la novela de Winston Groom, la obra dirigida por Robert Zemeckis se convirtió en un fenómeno cultural que arrasó en los premios Oscar, llevándose seis estatuillas, incluyendo Mejor Película, Mejor Director y Mejor Actor para Tom Hanks. Sin embargo, a pesar del éxito abrumador, el propio Hanks ha admitido que tiene un problema con la película.
En una entrevista con The New York Times en 2022, el actor abordó las críticas que ha recibido el filme a lo largo de los años, especialmente en relación con su tono nostálgico y su visión idealizada de la historia estadounidense. Según Hanks, las acusaciones de que Forrest Gump es un “festín de nostalgia rosa” no son erróneas, pero lo que realmente le molesta es la percepción que se tiene del filme debido a su gigantesco éxito en taquilla.
El problema de Tom Hanks con el éxito descomunal de Forrest Gump
Desde su estreno, Forrest Gump generó reacciones polarizadas. Mientras algunos la consideraban una obra maestra conmovedora, otros la criticaban por su tono sentimental y su interpretación de la historia de Estados Unidos. La película fue un éxito comercial rotundo, convirtiéndose en la segunda más taquillera de 1994, solo por detrás de El Rey León.
Para Hanks, la controversia no se centra tanto en el contenido de la película, sino en la manera en que su impacto fue interpretado. “El problema con Forrest Gump es que hizo mil millones de dólares”, declaró en la entrevista. Si bien exageró la cifra, el punto del actor era claro: el éxito masivo generó una narrativa en la que él y Zemeckis pasaron de ser vistos como genios a ser considerados “genios diabólicos”. Según el actor, si la película hubiera tenido un desempeño más modesto, habría sido apreciada de una manera distinta.
La comparación con otras películas de su año de estreno refuerza esta percepción. En 1994, Forrest Gump se impuso en los Oscar ante dos filmes que, con el tiempo, han sido considerados igual o más influyentes: Pulp Fiction, de Quentin Tarantino, y The Shawshank Redemption, de Frank Darabont. Mientras que la primera revolucionó el cine con su narrativa fragmentada y su diálogo afilado, la segunda se convirtió en una de las historias más queridas del cine. Muchos críticos consideran que la Academia se equivocó al premiar Forrest Gump, argumentando que su visión de la historia estadounidense es demasiado simplista y políticamente cargada.
A pesar de esto, Hanks sigue defendiendo la película y su impacto emocional. En la entrevista, recordó con emoción una de las escenas más importantes: el momento en que el teniente Dan, interpretado por Gary Sinise, llega con su esposa asiática al hogar de Forrest y Jenny. “Podría llorar al recordarlo”, confesó el actor.
La visión política de la película y la representación de Jenny Curran
Uno de los aspectos más debatidos de Forrest Gump es la manera en que presenta dos visiones opuestas de la sociedad estadounidense. Por un lado, el protagonista, un hombre con discapacidad intelectual que sigue las reglas y sirve a su país, es recompensado con éxito y estabilidad. Por otro, Jenny Curran, el amor de su vida, representa la contracultura de los años 60 y 70, con su rebeldía, su lucha por la libertad y sus decisiones arriesgadas. Mientras Forrest prospera, Jenny enfrenta una vida de dificultades que culmina con su muerte prematura.
Este contraste ha llevado a algunos críticos a interpretar la película como un mensaje conservador y derechista. Según esta lectura, Forrest Gump sugiere que quienes desafían las normas sociales y políticas están condenados al fracaso, mientras que quienes obedecen el sistema son recompensados.
La figura de Jenny ha sido particularmente criticada por su caracterización. A lo largo del filme, su historia se presenta como una serie de errores y sufrimiento, desde su infancia abusiva hasta su relación con drogas y hombres violentos. Su muerte prematura, probablemente a causa del VIH/SIDA, ha sido vista por algunos como un castigo narrativo por su estilo de vida.
No obstante, otros defienden que la película no busca emitir un juicio moral, sino mostrar diferentes experiencias de vida dentro del mismo periodo histórico. Forrest y Jenny son personajes construidos para contrastarse, pero la interpretación final queda en manos del espectador.