Sharon Stone, una de las actrices más aclamadas de Hollywood, ha construido una carrera destacada en la industria del cine. Sin embargo, su patrimonio en 2025 no refleja la magnitud de su trayectoria, pues su fortuna ha sido afectada por diversas circunstancias a lo largo de los años, incluyendo desigualdades salarialesy una crisis de salud que tuvo graves consecuencias financieras.
Nacida en un pequeño pueblo de Pensilvania, Stone proviene de una familia humilde y descubrió recientemente que tiene ascendencia real francesa, pues está emparentada con nada menos que Carlomagno. Su incursión en el modelaje la llevó a Nueva York y, posteriormente, al cine. Tras papeles menores en los años 80, alcanzó la fama con Total Recall (El vengador del futuro en Hispanoamérica) en 1990, pero fue Basic Instinct (Bajos Instintos) de 1992 la película que la convirtió en una estrella mundial. A pesar del éxito, la actriz ha señalado que las mujeres en Hollywood enfrentan una industria dominada por hombres, donde las diferencias salariales son evidentes. Para esta producción, Stone recibió 500.000 dólares, mientras que su coprotagonista, Michael Douglas, obtuvo 14 millones.
A lo largo de su carrera, la actriz luchó por la equidad salarial, pero la misoginia en la industria le dificultó alcanzar compensaciones justas. Tras Casino (1995), donde obtuvo una nominación al Oscar, continuó participando en producciones destacadas, pero las brechas económicas seguían presentes. En The Quick and the Dead, cedió parte de su salario para que Leonardo DiCaprio pudiera unirse al elenco. Su rol en Basic Instinct 2 en 2006 le aseguró un ingreso mayor, con 13,6 millones de dólares, aunque su carrera no volvió a alcanzar el mismo nivel de éxito que en los 90.
El derrame cerebral que casi acaba con su carrera y su vida
No obstante, la mayor pérdida económica de Stone no se debió a la industria del cine, sino a un problema de salud. En 2001, en medio de su divorcio con Phil Bronstein, la actriz sufrió un derrame cerebral devastador. El episodio, que la dejó fuera de los sets por siete años, afectó su capacidad cognitiva y física. Mientras se recuperaba, su situación financiera cambió drásticamente: personas cercanas aprovecharon su ausencia para despojarla de su dinero. Según relató, tenía 18 millones de dólares ahorrados antes del derrame, pero al acceder nuevamente a sus cuentas bancarias, descubrió que todo había desaparecido. Sus bienes, desde el refrigerador hasta su teléfono, estaban a nombre de terceros.
Su proceso de recuperación fue largo y arduo. Experimentó pérdida de memoria, dificultades para leer y alteraciones en sus sentidos.
Así lo compartió la actriz en una íntima entrevista con The Hollywood Reporter:
“Tuve una experiencia de muerte y luego me trajeron de vuelta. Me desangré durante nueve días, por lo que mi cerebro quedó desplazado hacia la parte frontal de mi cara. No estaba colocado en mi cabeza donde estaba antes. Y mientras eso ocurría, todo cambiaba. Mi sentido del olfato, mi vista, mi tacto. No pude leer durante un par de años. Las cosas se estiraban y veía patrones de colores”.
Con el tiempo, logró reinsertarse en la industria, publicando en 2021 sus memorias The Beauty of Living Twice, por las cuales recibió un adelanto de al menos 2 millones de dólares. El libro debutó en la lista de los más vendidos del New York Times, consolidando su éxito literario.
Fue así que, después de luchar contra un mundo que no reconoció su trabajo durante años y sobre todo, contra una enfermedad de la que muchos se aprovecharon, Sharon Stone amasa hoy en día una fortuna que ronda los 25 millones de dólares, según la plataforma Celebrity Networth. Si bien, sigue siendo una cantidad considerable, está lejos de lo que pudo haber conseguido si las circunstancias, y sobre todo, la gente a su alrededor, no hubiera jugado en su contra.
Hoy, a pesar de las adversidades, Stone sigue siendo una figura influyente en Hollywood. Su historia no solo es testimonio de su talento y determinación, sino también de los desafíos que muchas mujeres enfrentan en la industria del entretenimiento.