Crece la brecha entre niños y niñas con respecto al estudio de matemáticas y ciencias

Un reciente informe de la University College London brinda cifras sobre una realidad en donde la igualdad de género sigue siendo un pendiente, incluso en países del primer mundo

Guardar
Un reciente estudio de la
Un reciente estudio de la University College London indica que los varones poseen un mejor rendimiento que las niñas en el aprendizaje de matemáticas y ciencias (Imagen Ilustrativa Infobae)

Toda persona que haya viajado en un tren en Inglaterra habrá escuchado al llegar a una estación el famoso “Mind the gap”; una alerta para tener cuidado al descender y no quedar atrapado en el espacio entre el vagón y el andén.

Un “gap” o brecha que hoy también se cuela en la educación de ese país ya que un reciente estudio publicado por la University College London (UCL) indica que los estudiantes varones poseen un mejor rendimiento que las niñas en el aprendizaje de matemáticas y ciencias.

Si bien se había planteado que las niñas habían ganado terreno en el estudio de las llamadas ciencias duras previo a la pandemia de COVID, el estudio de la UCL destaca que actualmente son los estudiantes varones quienes poseen un mejor rendimiento.

La brecha de rendimiento de
La brecha de rendimiento de matemáticas, que en 2020 era de 2 puntos, hoy se amplió a 26. (Imagen Ilustrativa Infobae)

¿Por qué el género?

La confianza, el sentimiento de pertenencia y el ausentismo son elementos claves que impactan a las niñas y que forman parte del estudio publicado para dar cuenta de una realidad de las escuelas de Inglaterra.

Desde la UCL indicaron que los niños de quinto y noveno año obtuvieron “puntuaciones significativamente más altas” que las niñas en ambas áreas en evaluaciones internacionales recientes y en comparación con las realizadas previas a la pandemia iniciada en 2019.

Variables cualitativas y cuantitativas que dan cuenta de una realidad que no se escapa en los análisis internacionales. Las niñas y mujeres todavía tienen un gran camino que recorrer en el aprendizaje STEAM (el acrónimo en inglés que deriva de Science, Technology, Engineering, Arts and Mathematics).

Este estudio que se realiza cada cuatro años demostró que si en el 2020 la brecha de rendimiento de matemáticas era de 2 puntos entre ambos géneros, hoy llega a 26 puntos para estudiantes varones con respecto a las estudiantes mujeres.

En cuanto a la ciencia, la brecha pasó de una diferencia en las que las niñas estaban hasta tres puntos por encima de los varones y hoy quedan por debajo de los 14 puntos. El estudio resalta que los estudiantes varones se sienten “más confiados” a la hora de internalizar conocimientos de matemáticas y ciencias.

Esta diferencia también empezó a observarse en países como Australia, Nueva Zelanda y los Estados Unidos.

La inteligencia artificial también contribuye
La inteligencia artificial también contribuye a fomentar ideas de género donde las mujeres no estarían “naturalmente” preparadas para ciertos saberes vinculados a la razón, sino predispuestas a lo intuitivo y lo emocional (Imagen Ilustrativa Infobae)

Sesgos a erradicar

La existencia de diversas organizaciones en el mundo de mujeres que cooperan y se capacitan en STEAM no es un capricho.

Históricamente las mujeres no solo han sido relegadas del conocimiento científico, incluso tampoco han sido reconocidas de igual forma que sus pares masculinos. Y la historia no deja de repetirse.

Según datos de la UNESCO, la tasa de finalización de la educación secundaria presenta resultados más favorables para las mujeres, pero esta finalización queda impactada por las tareas de cuidado y trabajo doméstico que crean una brecha desigual en la continuidad de estudios y desarrollo profesional.

Además del techo de cristal que enfrentan las mujeres, en especial en carreras “masculinizadas” vinculadas a las ciencias, la tecnología y las matemáticas; la inteligencia artificial también contribuye a fomentar ideas de género donde las mujeres no estarían “naturalmente” preparadas para ciertos saberes vinculados a la razón sino predispuestas a lo intuitivo y lo emocional.

Descalificativos de género que tienen un impacto social en este presente y el futuro próximo.