La educación enfrenta uno de los mayores desafíos de su historia: adaptarse a un mundo donde la inteligencia artificial ha desestabilizado las formas tradicionales de enseñar y aprender, así como la manera en que se construye el conocimiento. Este contexto exige una reflexión profunda sobre el presente y el futuro de la enseñanza y el aprendizaje.
Por undécimo año consecutivo, el Instituto para el Futuro de la Educación del Tecnológico de Monterrey organiza el IFE Conference, un evento que desde su creación ha buscado liderar la conversación global sobre la agenda educativa y ofrecer soluciones concretas a los retos del sector. A lo largo de tres días —desde ayer y hasta mañana—, el campus de Monterrey reúne a académicos, expertos, rectores universitarios, funcionarios de Gobierno, formuladores de políticas públicas, referentes de organizaciones de la sociedad civil, emprendedores e investigadores. Este año participan casi 5.000 asistentes de 27 países y 261 instituciones.
El lema de esta edición es “Impulsando el futuro de la educación con innovación y tecnologías”. Pero ¿a qué se refiere el Tec con “innovación”? José “Pepe” Escamilla de los Santos, director asociado del IFE, dijo que “innovar es tener ideas creativas que produzcan resultados de valor”. No basta con incluir tecnología en una solución educativa para considerarla innovadora. Si no genera un impacto positivo relevante y sustancial, no hay tal innovación.
La agenda del IFE Conference cubre distintas áreas de interés, desde la inteligencia artificial hasta el desarrollo de las EdTechs —las compañías dedicadas a la tecnología educativa—, pasando por la educación continua, el futuro del trabajo y las humanidades digitales. En total, son más de veinte recorridos dentro de las 250 actividades programadas. Además, en el marco del congreso se entrega el TecPrize, que otorga 60.000 dólares al proyecto que mejor atienda las necesidades educativas más apremiantes de la región.
Entre los conferencistas internacionales se destacan Lisa Marsh Ryerson, presidenta de Southern New Hampshire University; Tony Chan, exrector de la King Abdullah University of Science & Technology; y Matt Sigelman, presidente de Burning Glass Institute. También participan expertos como Sanna Järvelä, profesora de la Universidad de Oulu; Michael Stevenson, consultor senior de la OCDE en educación y sistemas de alto rendimiento; Mercedes Miguel, ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires; y Michael Golden, vicedecano de Asociaciones y Programas de Innovación en la Universidad de Pensilvania Graduate School of Education.
Innovar con inteligencia artificial
El acto inaugural del 11° IFE Conference se realizó en el estadio Arena Borregos, donde unas 4.000 personas escucharon las palabras de bienvenida de Juan Pablo Murra, rector de la institución. Con un llamado al compromiso colectivo —“tenemos más necesidades que recursos”—, Murra enumeró los principales retos de la educación: cerrar las brechas y asegurar la equidad, ampliar la cobertura para llegar a toda la población, asegurar la calidad y pertinencia de los aprendizajes, robustecer el uso ético de la inteligencia artificial. En el fondo, todos ellos remiten a una misma pregunta: cuál es hoy el rol de la educación.
Una clave para comprender el espíritu innovador del Tec está en la forma en que incorpora la inteligencia artificial al modelo educativo. Según explicó Murra, lo hacen de forma consciente y con una intención estratégica.
Además de haber desarrollado TecGPT, un modelo de inteligencia artificial generativa pensado para que los estudiantes gestionen cuestiones administrativas, Murra destacó que el Tec cuenta con “casi 500 cursos hechos con IA”, que han permitido personalizar la enseñanza y optimizar los procesos de aprendizaje. Estas herramientas permiten un aprendizaje adaptativo que se ajusta a las necesidades de cada estudiante. Los alumnos tienen acceso a 200 actividades diseñadas para adecuarse a su ritmo: algunos requieren resolver solo 40 para demostrar sus conocimientos, mientras que para otros es necesario completar todo el proceso.
La IA también asiste a los docentes: el Tec ha diseñado la plataforma Skill Studio, donde los profesores documentan y comparten sus perfiles de IA para preparar sus clases, crear quizzes, presentar planificaciones, entre otras funciones. Skill Studio tiene actualmente más de mil perfiles compartidos.
Adaptarse para sobrevivir
En México hay alrededor de 5.5 millones de estudiantes universitarios, de los cuales dos millones están en el sector privado. Sin embargo, la oferta de educación superior es altamente fragmentaria: hay 3.500 universidades en todo el país.
A principios de año, Michael Fung, director ejecutivo del IFE, participó en una encuesta sobre los temas más urgentes de 2025. Según su opinión, una clave de este año será la lucha de las universidades para hacerle frente a la presión financiera. Un problema global que también define el presente mexicano. Ticmas tuvo la oportunidad de conversar con él sobre esta idea: “Ante la falta de financiamiento público”, explicó, “las universidades de segunda o tercera línea deberán encontrar la manera de diferenciarse y entregar mayor valor a sus estudiantes. Tendrán que transformar su modelo de negocio, porque de lo contrario se verán obligadas a fusionarse o cerrar”.
Juan Pablo Murra también habló de esta cuestión con Ticmas y explicó que el mecanismo del Tec para diferenciarse de las demás instituciones es a través de hacer más estrictos los criterios de admisión. Cada año reciben sólo 12.000 nuevos estudiantes.
Los desafíos de la educación superior son cada vez más complejos y las universidades están obligadas a evolucionar para continuar siendo relevantes. A través del IFE Conference, el Tec reafirma su compromiso con la transformación educativa y se posiciona como un punto de encuentro para debatir y construir soluciones dentro del sector.