
Tras el acuerdo paritario firmado a fines de enero, las empleadas domésticas cobraron un ajuste en sus salarios, que se sostendrá con los sueldos de marzo. Esta mejora, que se oficializó a través del Boletín Oficial, llegó luego de más de cuatro meses de espera y afecta tanto a los salarios mínimos como a los aportes y contribuciones que deben realizar los empleadores.
De acuerdo con la Resolución 1/2025, el salario mínimo por hora para la quinta categoría, que incluye tareas generales, se establece en $2.863, mientras que el salario mensual para las trabajadoras que se retiran al finalizar su jornada asciende a $351.233. Estos valores, que forman parte de un esquema de aumentos acumulativos, también incluyen ajustes retroactivos que impactan en los pagos de los meses previos.
Detalles de los aumentos acumulativos
El esquema de incrementos salariales se consolidó en una única resolución que detalla los porcentajes aplicados en diferentes meses. El aumento total acumulado es del 6%, dividido en dos tramos: un 2,8% aplicado en octubre y un 3,2% en septiembre. Además, se sumaron ajustes retroactivos del 1,3% desde diciembre y del 1,2% desde enero.
Para calcular los nuevos salarios, los empleadores deben considerar que los aumentos son acumulativos. Por ejemplo, los valores de diciembre se calcularon sobre los montos vigentes en octubre, mientras que los de enero se basaron en los de diciembre, y así sucesivamente hasta llegar a los valores de marzo. Este método implica que los empleadores que no hayan actualizado los pagos correspondientes deberán realizar ajustes retroactivos.
Aportes, contribuciones y adicionales
Además de los salarios, los empleadores deben tener en cuenta los incrementos en los aportes y contribuciones, que experimentaron un aumento del 64,52% desde febrero. Según la Resolución 5645/2025, los valores varían según la cantidad de horas trabajadas por semana:
- Menos de 12 horas semanales: de $5.547,71 a $6.816,05, lo que representa un aumento del 22,86%.
- Entre 12 y menos de 16 horas: de $8.467,56 a $10.735,77, con un incremento del 26,88%.
- 16 o más horas: de $17.437,92 a $28.688,55, lo que implica un aumento del 64,52%.
Estos montos incluyen los aportes para jubilación, obra social y la cuota de la ART (Aseguradora de Riesgos del Trabajo). Los pagos deben realizarse por mes devengado, es decir, los aportes correspondientes a enero debieron abonarse en febrero antes del día 10.

Asimismo, los salarios de las empleadas domésticas incluyen adicionales como el plus por antigüedad, que suma un 1% por cada año trabajado en la relación laboral, y el adicional por zonas desfavorables, que aplica un 30% extra sobre los salarios mínimos para trabajadoras en regiones como La Pampa, Río Negro, Chubut, Neuquén, Santa Cruz, Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur.
Nuevos valores por categoría en marzo de 2025
El incremento salarial oficializado para las empleadas domésticas en febrero de 2025 se calcula sobre los salarios de enero de ese mismo año. Según la Resolución 1/2025, el aumento es del 1,2%, lo que significa que los valores actuales para febrero continuarán vigentes durante marzo de 2025. Por lo tanto, las empleadas domésticas en marzo de 2025 cobrarán los mismos salarios establecidos para febrero, con los siguientes valores aproximados.
Los salarios mínimos para las empleadas domésticas varían según la categoría y si la trabajadora cuenta con retiro o no. Los valores establecidos para marzo son los siguientes:
Con retiro:
- Quinta categoría (tareas generales): $2.863 por hora y $351.233 por mes.
- Cuarta categoría: $3.089 por hora y $390.567 por mes.
- Tercera categoría: $3.089 por hora y $390.567 por mes.
- Segunda categoría: $3.270 por hora y $400.310 por mes.
- Primera categoría: $3.454 por hora y $430.878 por mes.
Sin retiro:
- Quinta categoría: $3.089 por hora y $390.567 por mes.
- Cuarta categoría: $3.454 por hora y $435.246 por mes.
- Tercera categoría: $3.089 por hora y $390.567 por mes.
- Segunda categoría: $3.585 por hora y $445.613 por mes.
- Primera categoría: $3.783 por hora y $479.950 por mes.
El aumento en los salarios y aportes representa un desafío económico para los empleadores, quienes deberán ajustar sus presupuestos para cumplir con las nuevas normativas. Por otro lado, las trabajadoras domésticas verán una mejora en sus ingresos, lo que podría contribuir a una mayor estabilidad económica en el sector.
Estos ajustes buscan actualizar los salarios de acuerdo con la inflación y las necesidades del mercado laboral. Con estos cambios, el Gobierno argentino busca garantizar condiciones laborales más justas para las empleadas domésticas, un sector históricamente relegado en términos de derechos laborales y salariales. Sin embargo, el cumplimiento de estas normativas dependerá de la capacidad de los empleadores para adaptarse a los nuevos requerimientos.