
A partir de marzo se aplicará un aumento en las tarifas de luz que se emitirán en el AMBA, luego de que el Gobierno aprobara los cuadros tarifarios que presentaron las empresas encargadas de distribuir el servicio en la zona. De la misma manera, se redujo el subsidio al que accederán los usuarios de clase media y de bajos ingresos.
La medida fue oficializada esta madrugada, luego de que el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) publicara en el Boletín Oficial las resoluciones 160/2025, correspondiente a los precios que manejará Edenor, y 162/2025, en donde se plasmó el tarifario que fue enviado por Edesur.
Los incrementos que entraron en vigencia a partir del 1° de marzo, según indicó el interventor del ENRE, Osvaldo Rolando, fueron derivados del Proceso de Revisión Quinquenal de Tarifas (RWT) impulsado por la secretaría de Energía, María Tettamanti, el cual tendrá el objetivo de plasmar los parámetros de calidad de servicio de los próximos años, penalidades por incumplimientos, planes de inversión y los ingresos que recibirán las compañías para financiarlos.
De esta manera, las empresas distribuidoras establecieron que los costos que se cobrarán a los usuarios que se encuentren dentro del nivel 1 de altos ingresos sufrirán una suba correspondiente al 1,7% respecto a lo abonado en febrero. Asimismo, se fijó que el Precio Estacional de la Electricidad (PEST) subirá un 2,5%, mientras que el Valor Agregado de Distribución (VAD) no presentará cambios.

En la zona abastecida por Edenor, los hogares de altos ingresos afrontarán un precio base de $1,037.840, sumado a un cargo variable de $99.730, los usuarios de nivel 2, es decir, de bajos ingresos tendrán un cargo variable de $39.839 por cada kWh consumido. Para el nivel 3 de ingresos medios, el cargo variable será de $53.231.
En el caso de los usuarios de Edesur, se determinó que el nivel 1 de altos ingresos abone un costo mínimo de $1,027.560, en conjunto a un variable de $99.755. De la misma forma, los hogares de ingresos medios enfrentarán un cargo variable de $53.344 y los de ingresos bajos será de $39.978.
A la vez que se establecieron los costos de la energía suministrada en malas condiciones (CESMC) y de la energía no suministrada (CENS) para el período marzo-agosto de 2025, según se ordenó en la Resolución N° 3/2025, se determinó que las facturas de los servicios eléctricos deberán destacar si se aplicó un subsidio provisto por el Estado Nacional y el Costo del Mercado Eléctrico Mayorista (MEM), el cual deberá ser calculado según el consumo mensual y los valores establecidos a principios de este año.
Por otro lado, Edenor tendría la intención de aplicar un incremento del 8% en la factura final que corresponderá al mes de abril, al cual se sumaría otro 2% adicional por el costo del transporte eléctrico, de acuerdo con la solicitud realizada por Transener, la empresa encargada del transporte eléctrico y con participación estatal.

Además, la empresa solicitó la implementación de una fórmula de ajuste mensual basada en la inflación, los salarios y los precios mayoristas. En cuanto al Valor Agregado de Distribución (VAD), la compañía busca una suba del 20% para cubrir costos operativos. De aprobarse, el impacto en los usuarios residenciales implicaría que el 80% de los clientes pague en promedio $29.544, lo que representa un aumento de $9.624 respecto de los valores actuales.
Desde Edesur, la compañía no precisó cifras, pero propuso un nuevo régimen tarifario para pequeños consumidores, con simplificación de escalas y eliminación de saltos entre categorías. Para suministros trifásicos, planteó la contratación de potencia como alternativa. En el caso de medianas y grandes demandas, los valores actuales se mantendrían, aunque con un aumento en los recargos por exceso de potencia.
Las compañías justificaron los ajustes argumentando que el costo de la energía en Argentina sigue siendo bajo en comparación con otros países de la región. De acuerdo con cálculos de Edenor, con la actualización tarifaria, el 80% de los clientes pagaría alrededor de USD 27, por debajo de los USD 44 de Brasil, los USD 59 de Chile y Perú, y los USD 73 de Uruguay.