Los inversores de riesgo están cautos. Saben que las subas y alzas de cada día no marcan tendencias y que todos sus cálculos pueden fracasar ante cualquier cambio de humor de Donald Trump, un factor imprevisible. Los operadores darían la vida por saber lo que piensa el presidente norteamericano porque con “inside information” podrían hacer fortunas en los mercados de riesgo.
Es tan complejo razonar en medio de estas marchas y contramarchas que nadie pudo sospechar que el ETF (índice de China) ayer subiría 2,4% mientras era castigada por los aranceles norteamericanos. Pero la respuesta a ese gravamen fue sofisticada. Los chinos eligieron una serie de productos para gravar y auditorías sobre empresas norteamericanas que operan en su país. El mercado ve esta pulseada como una próxima negociación para evitar una guerra comercial profunda que desgaste a ambas partes.
A Trump lo amenaza un recrudecimiento de la inflación y una persistencia de tasas altas en Estados Unidos que perjudica abiertamente a los deudores hipotecarios, un segmento de votantes de peso. El encarecimiento de la vivienda es una de las grandes preocupaciones de los norteamericanos.
El yuan fue una muestra de la fortaleza que tiene China ante esta ofensiva. Se mantuvo en 7,18 por dólar, un nivel que tenía en agosto de 2023.
México sigue temiendo represalias a pesar de la suspensión de los gravámenes por un mes. No son pocos los artículos y comentarios en los medios que se preguntan ¿Y si los imponen en marzo? Los canadienses están preocupados y enojados porque saben que, aunque no les apliquen los aranceles, Estados Unidos se llevará ventajas comerciales en negociaciones futuras.
Brasil mira desde afuera. El real sigue revaluándose y cotiza a 5,75 por dólar. La Bolsa de San Pablo bajó apenas 0,65%.
En la Argentina, los inversores operan como en un campo minado. Los bonos soberanos no reaccionan y las acciones suben tímidamente, en particular las de los bancos, uno de los sectores más castigados por esta incertidumbre.
Los dólares financieros abrieron al alza y el contado con liquidación (CCL) comenzó en $1.191 y cerró cerca del máximo del día en $1.198,74 (+0,3%) a pesar de la moderada intervención del Banco Central para esterilizar pesos a través de bonos en dólares. El MEP sumó otro día de subas y terminó la rueda $9,08 (+0,8%) arriba a $1.188. El “blue” bajó $5 a $1.215. Es un mercado chico que solo tiene impacto psicológico. El dólar que rige los precios es el CCL.
En el Mercado Libre de Cambios (MLC) se operaron USD 405 millones y el Banco Central apenas pudo comprar USD 9 millones porque la demanda de importadores y empresas siguió firme, mientras el agro mezquina la liquidación de exportaciones. Las reservas perdieron USD 39 millones a 29.427 millones.
Según el informe de la consultora F2 de Andrés Reschini “el dato de apertura de empleos en Estados Unidos en diciembre fue menor a lo esperado y puede ser un indicio de un mercado laboral menos sólido de lo que se cree. Con este dato, los principales índices accionarios recuperaron terreno en Wall Street al tiempo que la escalada en el oro sigue reflejando la incertidumbre y la búsqueda de refugio”.
F2 agrega un dato: “Desde 2003, exceptuando los años bajo mandato de Néstor Kirchner, 2014 por la devaluación de enero y 2017/8 dado que el Central no intervino, no es claro que febrero sea un mes favorable para la acumulación de reservas vía MLC. El presidente adelantó que en enero de 2026 levantará el cepo cambiario y si el FMI aporta fondos puede ser antes. El mercado de futuros reaccionó y con un volumen que no sale de lo habitual; desde mayo en adelante todas las posiciones ajustaron al alza con acento en todo lo que vence después de lo que serían las elecciones de medio término”.
En tanto, los bonos soberanos estuvieron ofrecidos y perdieron hasta 0,40%. El riesgo país aumentó 8 unidades (+1,3%) a 640 puntos básicos.
Los bonos provinciales en dólares, según la mesa de dinero de ConoSur que es uno de los grandes operadores de este mercado, “tuvieron una rueda mixta. Los 27 y 28 de Córdoba, Salta y Chaco quedaron positivos al cierre. La curva de Córdoba vuelve a ubicarse en niveles de la semana pasada y cierra hoy en torno a un rendimiento de 10,1%. Buenos Aires 37, Mendoza 29 y Neuquén 30 (no garantizado) fueron la contracara y quedaron negativos”.
La falta de pesos en el mercado hizo que la parte larga de los bonos de tasa fija siga ofrecida y los duales rinden entre 2% y 2,10%. Las LECAP más pedidas son las cortas, en particular marzo y abril que rinden hasta 2,17%.
Los BONCER que ajustan por el costo de vida tuvieron compradores en los tramos cortos, pero fueron ofrecidos a mediano y largo plazo.
La Bolsa tuvo una rueda positiva que fue mayor a menor impulsadas por los papeles de empresas de energía que tienen pendientes aumentos de tarifas. La construcción fue otro sector destacado. De esta manera, el Merval de las acciones líderes subió 1,6% en pesos y 1,3% en dólares. Edenor (+4,9%), Cresud (+4,8%) y Loma Negra (+4,3%) lideraron las subas.
Los ADR -certificados de tenencia de acciones argentinas que cotizan en las Bolsas de Nueva York- tuvieron una rueda positiva donde lo mejor pasó por Edenor con 4,9%, Mercado Libre con 3% y Cresud con 2,9%.
Nicolás Cappella, trader del Grupo IEB señaló que “creemos que el mercado entró en un modo de ver para pagar y está esperando mejores números de inflación de alta frecuencia. Por de pronto el volumen de operación de los corporativos e institucionales bajó de manera notable”.
La buena noticia vino desde Chicago donde los futuros del maíz, el trigo y la soja subieron tras la suspensión de los aranceles a México y Canadá. En la suba de 1,5% de la soja influyó que China, uno de los grandes jugadores del mercado agropecuario, no reaccionó agresivamente a la imposición de aranceles.
Otro dato que aportó a la fortaleza de los precios de las materias primas fue la debilidad del dólar. El DXY, el índice que mide a la divisa de Estados Unidos frente a las 6 principales monedas del mundo, cedió 0,96%.
El VIX, llamado índice del miedo, tuvo un importante retroceso de 7,57% a 17,21 puntos. Este indicador refleja que el temor de los inversores está en baja, aunque se cubren comprando oro que volvió a batir su récord al subir a USD 2.875,12 por onza troy. Para hoy se espera otra rueda de cautela. El mercado va a demorar un tiempo en adecuarse al “modo Trump”.