Las acciones y los bonos de la Argentina operaron con tendencia negativa este lunes en línea con la trayectoria declinante de sus pares externos, ante la incertidumbre que produjo el impacto a la aplicación de aranceles en Estados Unidos. La Bolsa argentina perdió más de 3%, por encima de las caídas de las bolsas de San Pablo (-0,3%) y México (-1,6%).
La puesta en marcha de aranceles anunciada por el presidente estadounidense Donald Trump a Canadá, México y China reavivó los temores a que se esté gestando una guerra comercial mundial que frenaría el crecimiento económico. Sin embargo, por la tarde hubo una distensión -que repercutió en un freno en la caída de las cotizaciones-luego de que el presidente estadounidense, Donald Trump, y su par de México, Claudia Sheinbaum, acordaron en diálogo telefónico una pausa de un mes en la aplicación de los aranceles anunciados a cambio de que México refuerce la seguridad en la frontera común.
En el mercado local, el índice accionario líder S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires perdió 3,1%, a a 2.484.135 puntos. Tras un inicio negativo del 4 por ciento. El panel líder pasó así a anotar una caída de 1,9% en pesos y de 2,5% en dólares en el recorrido de 2025. Además, el Merval recortó un 13,4% desde su récord intradiario de 2.867.775 puntos del 7 de enero.
Entre las acciones y ADR de compañías argentinas negociadas en dólares en Wall Street se impusieron las pérdidas, aunque más atenuadas respecto de la apertura. Pampa Energía lideró las bajas con un 4,9% negativo. Grupo Financiero Galicia restó 3,4% a USD 65,18 e YPF cayó 2,6% a 38,48 dólares.
“El mercado esperaba una suba de los aranceles por parte de los Estados Unidos con la asunción de Donald Trump. Lo que no preveía es que esta suba fuese de manera tan abrupta. Y esto generó una fuerte baja en los activos financieros por el temor a que derive en una batalla comercial”, afirmó Walter Morales, CEO y estratega de Wise Capital.
“Ante la escalada comercial, China ha prometido tomar represalias, aunque por el momento no ha anunciado medidas específicas. Pekín ha decidido impugnar los aranceles de Trump ante la Organización Mundial del Comercio y ha indicado que tomará ‘contramedidas’ no especificadas en respuesta”, comentó Felipe Mendoza, analista de mercados financieros de ATFX Latam.
Los bonos soberanos en dólares finalizaron con una caída de 0,8% en promedio, con un riesgo país de JP Morgan que ascendió siete unidades para la Argentina, en los 632 puntos básicos. En la plaza de bonos, “la relación riesgo-retorno sigue teniendo sentido, especialmente si el Gobierno avanza en la liberación del cepo”, confiaron desde la consultora Carta Financiera.
Por otra parte, el Gobierno negocia con el FMI (Fondo Monetario Internacional) un nuevo programa crediticio para reprogramar su deuda, el cual podría brindarle fondos frescos al país para salir de las actuales restricciones cambiarias. Con el inicio de febrero el gobierno de Javier Milei debe afrontar un vencimiento de intereses con el FMI por unos 660 millones de dólares.
En el plan cambiario, el Banco Central inició este lunes el nuevo sendero devaluatorio, con un “crawling peg” fijado en el 1% mensual, después de 13 meses en el que se estacionó en el 2 por ciento.
Por cuarto día consecutivo el dólar “blue” finalizó negociado a $1.220 para la venta, luego de una leve suba inicial de cinco pesos por la mañana. Con un dólar mayorista que ganó 75 centavos, a $1.054,25, la brecha cambiaria quedó reducida a 15,7 por ciento.
Algo más demandados estuvieron los dólares bursátiles, con ganancia próxima a los nueve pesos (+0,8%). Mediante bonos el “contado con liquidación” quedó a $1.179,86, mientras que el dólar MEP finalizó a 1.178,06 pesos.
“El crawling peg al 1% seguramente traerá menores expectativas de inflación, y por eso la baja de tasas puede que no implique una caída en la tasa real (respecto de la inflación). El costo de empujar la nominalidad hacia abajo es seguir apreciando el tipo de cambio en un contexto global más complicado por las políticas de Trump”, dijo el economista Roberto Geretto, analista de Adcap Grupo Financiero.
“El Gobierno decidió ajustar la tasa de interés para priorizar la estabilidad cambiaria y asegurar el carry trade, evitando desalentar los flujos que sostienen el superávit de la cuenta financiera y las compras de divisas”, estimó un informe del agente de compensación y liquidación Cohen.
La semana pasada, el BCRA redujo su tasa de política monetaria a 29% nominal anual desde el 32% previo ante perspectivas de una trayectoria declinante de la inflación.
Por otra parte, el Banco Central compró este lunes USD 17 millones en el mercado mayorista, en una rueda con USD 428,7 millones en el segmento de contado. Las reservas internacionales crecieron importantes USD 1.149 millones (+4,1%), a USD 29.456 millones, tras cuatro bajas consecutivas.
La mejora en este stock se debió a la contabilidad de los USD 136 millones absorbidos por compras oficiales el viernes y el regreso masivo de divisas que pertenecen a la cartera propia de los bancos, un movimiento técnico que había provocado la caída de reservas en las dos últimas ruedas de enero.