Cuáles fueron las causas que desanimaron a los inversores y provocaron la caída en los mercados argentinos

La mala jornada de Wall Street y la aparición de DeepSeek no tienen vinculación con lo ocurrido en la Argentina, que tiene causas más ligadas a lo local

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 Télam 162
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No hay que buscar en DeepSeek, la startup de China que con su anuncio del modelo de inteligencia artificial con menor costo y funciones más amplias que los actuales, la causa del derrumbe de las acciones argentinas.

Por caso, Brasil enfrentó la crisis con una suba de la Bolsa de San Pablo de casi 2% y está 6% arriba en dólares en los últimos 12 días. El real, a su vez, llegó al precio más bajo de 5,93 por dólar, desde que Donald Trump ganó las elecciones.

El yuan se revaluó a 7,25 por dólar y volvió a los valores del 9 de diciembre pasado, lo que también es una buena noticia para la Argentina.

El derrumbe de las acciones y la caída de los bonos locales no fueron consecuencia del anuncio de un nuevo modelo de inteligencia artificial. Si bien la noticia demolió a Wall Street y al Nasdaq de las tecnológicas, no hizo estragos en Europa.

Los inversores argentinos están sensibles, porque lo que sucedió ayer se suma a otras preocupaciones que vienen golpeando a bonos y acciones. La situación puede resumirse en estas 7 causas:

-El derrumbe de Wall Street que alejó a inversores del exterior de los mercados argentinos que, hasta hace 15 días, eran la revelación en el mundo.

-El renacimiento de Brasil que atrae el dinero extranjero que antes llegaba a estas costas.

-El problema que tiene la Argentina para acumular reservas.

-La sequía que le va a restar dólares que son necesarios.

-La incertidumbre que genera no saber si el acuerdo con el FMI incluirá dinero fresco para poder hacer frente a los futuros vencimientos.

-El fallo adverso de la Corte Suprema de Estados Unidos que permite a los acreedores que no entraron al canje de bonos puedan hacerse de USD 310 millones depositados en garantía.

-La política: el Gobierno tiene problemas para que le apoyen leyes clave en el Congreso y para hacer acuerdos con fuerzas aliadas.

Por eso no extrañó el derrumbe general de la Bolsa. El Merval de las acciones líderes perdió 4,9% en pesos y 6% en dólares. Las acciones de los bancos, que cayeron hasta 8%, fueron las más castigadas. Entre el panel líder y el general, solo hubo una suba: la de 2% de Introductora de Buenos Aires.

Por supuesto, a los ADR -certificados de tenencias de acciones argentinas que cotizan en las Bolsas de Nueva York- no les fue mejor. Allá los bancos cayeron hasta más de 6%.

Los bonos de la deuda soportaron bajas que fueron más fuertes en los de más largo plazo que cayeron hasta 1,84%. Los bonos cortos perdieron menos de 1%. El riesgo país aumentó 11 unidades (+1,7%) a 642 puntos básicos.

Ni siquiera la caída del rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos a 4,53% pudo cambiar el rumbo bajista de los bonos locales. Los títulos norteamericanos y el oro (+0,11%) fueron el refugio de los inversores.

En los países emergentes, el ETF que los representa bajó 1,8%, mientras Brasil subió 1,2% y China, 0,9%.

Para los analistas internacionales, después del cierre de los mercados y con la mente más fría, el mundo vivió una sobrerreacción porque creen que la aplicación china obligará a mejorar la Inteligencia Artificial del resto del mundo y abaratar sus costos si quieren seguir compitiendo.

Los dólares financieros reaccionaron al alza y el Banco Central no intervino. Fue así, que el MEP aumentó $6,47 (+0,6%) a $1.162,22 y el contado con liquidación (CCL) $15,92 (+1,3%) a $1.178,77. El “blue” jugó su propio partido y no fue refugio. Subió apenas $5, a $1.230.

En el Mercado Libre de Cambios (MLC) el Banco Central pudo comprar USD 36 millones, pero las reservas bajaron USD 84 millones a 29.884 millones.

En Chicago, a los granos argentinos no les fue bien. Según la Bolsa de Rosario “los futuros agrícolas continuaron con su sendero bajista. El trigo cerró la jornada con pérdidas de más del 1,5%, afectado por la reducción en los derechos de exportación en la Argentina, lo que ha generado preocupaciones sobre la mayor competitividad de nuestro país en los mercados globales. Este mismo fundamento pesó sobre el maíz y la soja, llevando a ambos cultivos a caer alrededor de un 1%. El mercado, además, recibió presión adicional cuando los operadores permanecieron atentos a las posibles decisiones de la administración Trump sobre nuevos aranceles que podrían influir en la dinámica comercial de los mercados agrícolas globales”.

Lo sucedido obligó a cambios en las carteras de los inversores, en una semana clave donde Estados Unidos debe definir su tasa de interés de referencia.

Para la consultora F2 “la caída del 1,5% y del 3% en el S&P 500 y Nasdaq, respectivamente más la baja en la cotización del crudo sumado a las dudas sobre el crecimiento de la economía china sigue presionando las expectativas de inflación de Estados Unidos y ayudó a que los rendimientos de bonos del Tesoro americano vuelvan a caer mientras el mercado aguarda las presentaciones de balances trimestrales y la decisión de tasas de la Reserva Federal de esta semana. Este escenario no le sienta mal a emergentes ni a Brasil, en particular cuya moneda volvió a fortalecerse”.

Sobre las compras del Banco Central en el MLC indicó que “se debió a una demanda más débil en lugar de un incremento en la liquidación de los exportadores luego del anuncio de la reducción de las retenciones para el agro. Al mismo tiempo, se conoció que la Corte Suprema de EEUU rechazó la apelación de Argentina por bonos en default desde 2001 y los acreedores podrán tomar posesión de USD 310 millones depositados en garantía. De modo que hoy no hubo buenas noticias y el humor del mercado no estuvo en sintonía con el de Brasil u otros emergentes”.

Los bonos en pesos a tasa fija no tuvieron grandes cambios porque aguarda la licitación del Tesoro de mañana donde hay que cubrir vencimientos por $14 billones, que se reducen a $8,4 billones descontando lo que está en manos de entes estatales.

Los bonos que se licitarán son:

-LECAP con vencimiento el 14 de marzo de 2025 (reapertura).

-LECAP con vencimiento el 28 de abril de 2025 (reapertura).

-BONCAP con vencimiento el 15 de enero de 2027 (nuevo).

-BONCER con vencimiento el 31 de marzo de 2027 (reapertura).

Se espera la reacción de los inversores porque las acciones volvieron al piso técnico que los analistas temían. Enero solo tiene perdedores en el mercado accionario y los bonos no volvieron a ser lo que eran desde el 15 de enero.

Tal vez pueda incidir el informe de ayer de Moody’s, la calificadora de riesgo que señaló que “Moody’s Ratings (Moody’s) ha tomado hoy la calificación de acciones sobre cuatro bancos argentinos, entre ellos Banco de Galicia, Banco Hipotecario, Banco Macro y Banco Santander Argentina. El Crédito Básico de los cuatro bancos, las evaluaciones y los análisis de capital bancario ajustados mejoraron. Por eso elevó sus calificaciones.

El informe agrega que “estas acciones de calificación fueron impulsadas por la mejora de la Argentina donde la calificación soberana pasó de a “Caa3″ desde “Ca”, y cambió la perspectiva de calificación a “positiva” desde “estable”.

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