La desinflación y el cambio de paradigma que significó para la economía argentina la decisión del gobierno de Javier Milei de eliminar el déficit fiscal crónico, y con ello el financiamiento al Tesoro por parte del Banco Central de la República Argentina (BCRA) -a través de adelantos transitorios, y en forma indirecta de la emisión de Letras (Lebac - Leliq, Pases) colocadas casi compulsivas en el sistema bancario, generó un rápidamente un aumento de la “bancarización” de la economía, en términos de cuentas abiertas por particulares.
Así surge de las estadísticas trimestrales del Banco Central, con cierre a septiembre 2024, en comparación con el total de cuentas en el último cuarto de 2023. Estas registraron poco más de 118 millones de titulares del sector privado no financiero (personas, empresas y entidades).
El total aumentó en 6,9 millones en apenas nueve meses, lo que equivale a un crecimiento de 6,2% en el período, en contraste con el aumento vegetativo de la población, estimado en 335.400 (0,72%), según la proyección de que surgió del Censo Nacional en 2022.
Se abrieron más de 18.000 cuentas en pesos y casi 6.000 cuentas en dólares por día
De ahí surge que se abrieron más de 18.000 cuentas en pesos y casi 6.000 cuentas en dólares por día, en línea con la reactivación sostenida de la actividad económica y el rol más activo de las entidades bancarias tras el retiro del Gobierno nacional como principal tomador de los fondos que deposita la población en su conjunto. Esto podría indicar una reducción de la informalidad laboral.
El segmento más expansivo fue el de caja de ahorro en pesos, con 6,6 millones de nuevas cuentas (8,1%), alcanzando 88,5 millones de titulares, cerca de dos cuentas por habitante.
Le siguió el segmento de caja de ahorro en dólares, que, en los nueve meses previos al régimen de blanqueo, aumentó en 2,1 millones de cuentas (13,6%), ascendiendo a 17,6 millones, aproximadamente una por cada tres habitantes.
En octubre, la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) anunció que por el Régimen de Regularización de Activos y del Régimen de Regularización de Obligaciones (blanqueo) se declararon USD 19.023 millones en 300.967 Cuentas Especiales de Regularización del Ahorro (CERA) o agentes de liquidación y compensación (ALyC), provenientes de fondos obtenidos en el exterior o en el país no declarados ante las autoridades fiscales.
También aumentó el número de clientes con colocaciones a plazo fijo en dólares, pero apenas 19.800, aunque significativamente en términos relativos (14,4%), totalizando 157.161 cuentas.
Por el contrario, entre enero y septiembre 2024 inclusive, en el conjunto del sistema bancario se registraron disminuciones en la cantidad de cuentas corrientes en pesos de 0,4%; a la vista en dólares 1,1%, y las colocaciones a plazo fijo en pesos 30,3 por ciento.
Como resultado de estos movimientos, en septiembre de 2024 la proporción de cuentas bancarias respecto del total de la población alcanzó un récord: 2,52 cuentas por habitante, frente a 2,39 en diciembre del año anterior.
Todo el aumento se registró en el segmento de las operaciones transaccionales, principalmente caja de ahorro, más en pesos que en moneda extranjera-, mientras que disminuyó las de colocaciones a plazo fijo en pesos y no acusó cambios en dólares.
Si bien semejante aumento agregado refleja un crecimiento de la confianza del público en el sistema bancario, los niveles de “bancarización”, medidos por el peso de los depósitos en el PBI, siguen siendo bajos.
Según el Informe Monetario Mensual del BCRA correspondiente al promedio mensual de saldos en cuenta revelaron que el total de depósitos en pesos del sector privado no financiero bajó en el último año del 11,2% al 10,2% del PBI.
Se desagregó en caída de 6,4% a 4,9% del PBI en la franja de los depósitos a la vista, y crecimiento de 4,8% a 5,3% en el segmento de las colocaciones a plazo fijo.
También repuntó del equivalente de 2,5% a 3,1% del PBI el saldo promedio de depósitos en pesos del sector público en su conjunto (neto de la utilización de fondos unificados).
En lo que respecta a los depósitos en dólares del sector privado subieron de 3,3% a 4,6% del PBI, desagregado en un repunte de 2,6% a 4% en las imposiciones a la vista y disminución de 0,7% a 0,6% del PBI a plazo fijo y otros. Los correspondientes a saldos en moneda extranjera en cuentas oficial bajó de 0,6% a 0,4% del PBI.
Si se toman los saldos en pesos en cada una de los seis tipo de cuentas bancarias y se lo ajusta por la inflación, se observa que en todos los casos a fin de septiembre 2024 eran inferiores a los de diciembre 2023, según la serie del BCRA.
En particular, sobresalen las disminuciones de los depósitos en dólares equivalentes en pesos al tipo de cambio oficial: 91% en el caso de los registrados en cuentas corrientes y 71,1% a plazo fijo. Las tenencias en caja de ahorro cayeron 5,6 por ciento.
En el segmento de pesos propiamente dichos, las variaciones negativas más destacadas se localizaron en las cuentas a plazo fijo 34%; seguida por las de ahorro 18,1% y en cuenta corriente apenas 2,6 por ciento.
Las expectativas para el corriente año dan cuenta que en una economía con aumento de la actividad productiva y comercial a un ritmo medio del 5% real, y consolidación del crédito bancario, las cuentas bancarias continuarán en la senda ascendente, y ese proceso será acompañado por los saldos reales en pesos y dólares.