El duelo de descendidos por la 36ª fecha de la Premier League tuvo una escena inédita. Cuando se disputaba la primera etapa en el King Power Stadium del juego entre Leicester y Southampton, el futbolista del combinado local Jordan Ayew golpeó sin intención en el rostro al árbitro David Webb y lo dejó tendido en el suelo.
Sin embargo, lo más insólito no fue lo que sucedió con el juez de 49 años, sino la reacción del capitán de los Foxes, el legendario Jamie Vardy: tomó el silbato de Webb mientras estaba tirado en el piso y empezó a hacerlo sonar para que detener las acciones, en una imagen que rápidamente se transformó en viral.
El golpe fortuito se desarrolló cuando faltaban 10 segundos para alcanzar el minuto 21 de la primera etapa y el juez quedó tendido en el césped, visiblemente conmovido, mientras los médicos lo atendían. Casi dos minutos después, Webb logró pararse para ser retirado del estadio de los límites de la cancha y se dirigió al vestuario para continuar con la supervisión de los especialistas.
Los futbolistas permanecieron en el campo, realizando movimientos precompetitivos durante un extenso parate a la espera de una definición sobre la salud de la máxima autoridad del encuentro. Las actividades se reiniciaron once minutos más tarde con la irrupción del cuarto árbitro Sam Barrott en lugar de Webb, quien “falló una prueba de conmoción cerebral”, según especificó el diario británico Express. “Se dice que Webb está bien y está bajo observación”, informaron en la transmisión según replicó el periódico The Sun. El detalle es que era el debut de David Webb como árbitro principal en la Premier League.

Leicester, que ya se imponía 1-0 hasta antes del incidente por el tanto del propio Vardy a los 17 minutos, estiró la ventaja a los 44 minutos por intermedio de Ayew. Barrott decidió adicionar 12 minutos de descuento para subsanar todo el tiempo que estuvo parado el juego a raíz de la lesión de Webb.
Los Zorros, que supieron ganar la Premier League con Vardy como una de sus figuras estelares, figuran en la anteúltima colocación con 21 unidades y quedaron condenados a descender de categoría. Los dirigidos por Ruud van Nistelrooy se despedirán de la élite del fútbol inglés con tres compromisos: Nottingham Forest (V), Ipswich Town (L) y Bournemouth (V). Con este triunfo cortaron una racha de 12 juegos sin victorias.
Los Santos, por su parte, atraviesan una temporada para el olvido, ya que solamente ganaron dos partidos en lo que va del torneo y perdieron la categoría con varias fechas de antelación. Los entrenados por Simon Rusk se despedirán de la Premier League visitando a Manchester City, recibiendo a Everton y siendo local contra Arsenal.

Por otra parte, en su ambicioso camino hacia la Premier League, el Wrexham AFC ha comenzado a planificar refuerzos de peso para afrontar el desafío del Championship. Entre los nombres que surgieron como posibles incorporaciones figura Jamie Vardy, el delantero de 38 años que fue campeón de la Premier League con el Leicester City y que quedará libre a partir de junio. El interés por Vardy, que este sábado anotó el gol 199 con la camiseta de Leicester, se enmarca en una política de fichajes centrada en jugadores sin contrato, una estrategia que el entrenador Phil Parkinson destacó como clave para mantener la cultura del club basada en la ausencia de superestrellas y egos.
Según informó The Sun, el nombre de Vardy aparece junto al de otras figuras experimentadas como Kevin De Bruyne, Jonny Evans y Callum Wilson, todos ellos con pasado reciente en clubes importantes de Inglaterra. Si bien los altos salarios que demandarían estos futbolistas parecen un obstáculo, el crecimiento económico del Wrexham —impulsado por el respaldo de sus propietarios, los actores Ryan Reynolds y Rob McElhenney, y por el éxito comercial de la serie Welcome to Wrexham— permite proyectar incorporaciones ambiciosas para consolidarse en la segunda categoría del fútbol inglés.