Lejos de lo que están acostumbrados los fanáticos de la Premier League, el clásico de Manchester se devaluó considerablemente y en el último partido correspondiente a la semana 32 del campeonato británico, el derby de la ciudad concluyó con un empate sin goles, ni emociones.
El duelo disputados en el mítico Old Trafford comenzó con los intentos de Phil Foden que amenazaron al arco defendido por André Onana. La respuesta del combinado de Ruben Amorim se basó en la sociedad conformada por Alejandro Garnacho y Diogo Dalot. Los cambios de frente del argentino y los centros del lateral lusitano parecían desarticular a la última línea de Los Ciudadanos, pero el joven atacante que se creció en España no estuvo fino a la hora de la definición.
La producción del delantero no fue la deseada y en Inglaterra es cada vez más fuerte la posibilidad de pronta salida en busca de un nuevo destino. Incluso en los últimos días puso a la venta su residencia en Bowdon, Gran Manchester.
Cabe recordar que el medio británico The Sun, la propiedad de Garnacho, adquirida en abril del año pasado por 3.804 millones de libras (aproximadamente 4,4 millones de euros), ha sido publicada en el mercado por 3,85 millones de la moneda inglesa (unos 4,45 millones de euros), apenas 45.000 libras más que el precio de compra. Allí, por el momento, el futbolista convive junto a su pareja, Eva, y su hijo Enzo, de aproximadamente un año.
Garnacho solamente convirtió cuatro goles en los 30 partidos oficiales que disputó en la presente temporada de la Premier League. A su vez, perdió su lugar en el once titular desde la llegada de Amorim en el banco de suplentes tras de tener un desempeño irregular. Sin embargo, en el último encuentro en el clásico de Manchester el argentino volvió a la titularidad, pero no cumplió con las expectativas generadas.
El espectáculo en el Teatro de los Sueños fue tan pobre, que recién en el complemento los de Pep Guardiola volvieron a tener otra chance para abrir el marcador. Fue a través de un tiro libre ejecutado por Omar Marmoush, que fue desactivado a la perfección por el arquero de la selección de Camerún.
La calidad de Bruno Fernandes, la experiencia de Casemiro y la notable pegada de Manuel Ugarte no fueron suficientes para quebrar la paridad y romperle el invicto a Ederson Moraes.
Además, de las reacciones del arquero brasileño, otro de los responsables del 0 a 0 fue Rico Lewis, el joven que entró para reemplazar a Ilkay Gündoğan y se convirtió en una de las figuras más destacadas de la jornada.
Nadie fue capaz de deshacer el empate. El escaso aporte de Doku y Grealish fueron otros argumentos que explicaron el aburrido compromiso inglés. En los Reds, Garnacho tampoco pudo capitalizar alguno de los prometedores contragolpes. Sin dudas, se trató de un choque que reflejó la realidad de los dos grandes de Mánchester. Y el cero los calificó a ambos.
Formaciones:
Manchester United: Onana; Dalot, Yoro, Maguire (Lindelof, m.58), Mazraoui, Dorgu; Casemiro, Ugarte (Mount, m.71), Bruno Fernandes; Garnacho y Hojlund (Zirkzee, m.71).
Manchester City: Ederson; Nunes, Ruben Dias, Gvardiol, O’Reilly (Lewis, m.74); Kovacic, Gundogan (Grealish, m.74); Bernardo Silva, De Bruyne, Marmoush; y Foden (Doku, m.58).
Árbitro: J.Brooks.
Estadio: Old Trafford (73.738 espectadores).