
El enfrentamiento entre las selecciones de Argentina y Uruguay es, desde siempre, uno de los duelos más emblemáticos y longevos del fútbol mundial. En este contexto, la Selección comandada por Lionel Scaloni visitará una vez más el estadio Centenario de Montevideo, para enfrentarse con la Celeste por la fecha 13 de las Eliminatorias Sudamericanas, en un duelo que se convertirá en el número 196 del historial entre ambos, con 91 victorias de la Albiceleste, 57 triunfos de los uruguayos y 47 empates.
El Centenario es el estadio más representativo de Uruguay. En julio cumplirá 95 años de existencia, y fue testigo del primer Mundial de 1930, donde estuvo presente un tal Carlos Gardel, visitando ambos vestuarios. Allí, se jugó la primera final mundialista con victoria del local por 4-2 sobre Argentina. En ese recinto, ambas selecciones se enfrentaron en 38 ocasiones, en donde los locales se impusieron con 13 triunfos contra 10 de los visitantes y 14 empates. “Yo he atajado ahí. Son de los pocos estadios que van quedando por historia, ya que lo han ido refaccionado y ha perdido un poco la mística. Pero mete miedo el Centenario como también el Maracaná de Rio de Janeiro, donde una vez he jugado y me he asustado un poco”, recuerda Rodolfo Rodríguez.
La Pantera Rodríguez tuvo sus inicios en el club Cerro a los 15 años jugando en la mitad de la cancha, pero la realidad golpeó a su puerta y sólo jugó dos partidos. El técnico no lo ponía, así que pensó que no era lo suyo y dejó el fútbol. Pero la suerte no estaba echada: el cuerpo técnico del club volvió a convocarlo, pero esta vez para que juegue como arquero. Entonces en 1974 llegó al primer equipo de Cerro, donde debutó en primera frente a Rentistas. Pasó dos temporadas allí y en 1976 fue contratado por Nacional, institución que defendió hasta 1983 y en la cual sigue siendo un emblema indiscutible. Una temporada después, fue vendido al Santos de Brasil y permaneció en el equipo de Pelé hasta 1987, convirtiéndose en uno de los grandes ídolos. El año anterior, 1986, fue convocado para jugar el Mundial de México con su selección, pero una lesión en la previa lo marginó de la competencia. Luego, se fue al Sporting de Lisboa de Portugal. En 1990, retornó a Brasil para jugar en Portuguesa, y en 1992 firmó con el Bahía, donde dos años después colgó los guantes.
La Pantera Rodríguez es uno de los futbolistas con más presencias en la selección de su país, con 79 encuentros y 69 goles recibidos desde 1976 hasta 1986. Rodríguez se consagró con numerosos títulos, incluyendo la Copa América 83, siendo subcampeón en la Copa América 79 y ganó la Copa de Oro de Campeones 1980, como también las Copas Libertadores e Intercontinental con Nacional (1980).

“El empate no le vendría mal. Yo pienso que el empate contra Argentina, si tenés en cuenta que se ganó allá en La Bombonera, o sea, en el promedio sería 4 puntos de 6, no es mal negocio contra Argentina”, asegura el ex arquero en charla con Infobae en Montevideo.
- ¿Qué de su vida hoy, Rodolfo?
- Desde que me retiré, me dedico al agro en Durazno desde que paré hace 30 años. Estoy alejado del fútbol, pero lo acompaño nomás, y por supuesto estoy al tanto de mi selección. No trabajé más con el fútbol en ningún aspecto.
- ¿Cómo observa el partido de esta noche entre Argentina y Uruguay?
- Será un partido muy equilibrado, de esos que si cometes errores lo terminas pagando muy caro, y a mi entender se paga con los resultados. La selección argentina sentirá la ausencia de Lionel Messi, pero le va a dar agilidad al juego, un ritmo de partido que se me ocurre que va a ser bastante vertiginoso por parte de los dos, porque los dos tienen buenos jugadores jóvenes y dinámicos. Messi con la calidad que tiene, le da otro ritmo al fútbol, su cabeza es rapidísima, pero le quita quizás entre comillas un poco de dinamismo y marca en toda la cancha, ese dinamismo que tiene el equipo argentino en sus jugadores jóvenes.
- ¿Favorece a Uruguay la ausencia de Messi?
- Depende de Uruguay. No sé si lo favorece o no, porque jugando él, sería a otro ritmo. Pero en una jugada de un tiro libre supongo que sí lo favorece, porque Messi siempre hace algo distinto. Pero se jugará a otro ritmo, un juego más vertiginoso. Por supuesto que la calidad de Messi no se discute, él solo puede hacer la diferencia y Argentina va a extrañarlo, no tengo dudas.
- ¿Está conforme con Bielsa como entrenador de Uruguay?
- Está bien, sí, no tengo nada contra él, no soy un detractor de Marcelo. Cuando se contrató, ya sabíamos lo que se venía con Bielsa. Previamente, se hizo un análisis sobre su personalidad, su temperamento, su trabajo. Para mí, está dentro de lo que se podía esperar como un tipo serio, que trabaja, que es dedicado al fútbol, que vive para eso. No soy detractor de él, y se que hubo diferencias con sus jugadores el año pasado.
- ¿Cómo vio el comportamiento de Bielsa en esa situación?
- Él estuvo muy bien, porque se quedó callado, no dijo nada. Yo estuve muchos años en la selección, más de 11 años, y conozco toda la interna, cómo se maneja todo el asunto, pero hoy no estoy en el día a día. Él estuvo bien, no disparaba contra nadie, no se repitió en nada y luego ya sé volvió todo a su curso normal.

- ¿Es difícil para un entrenador manejar un plantel con tantos egos?
- Sí, en Uruguay, en Argentina, en Brasil en España. Es muy difícil ser entrenador en general y debe ser muy difícil manejar un vestuario con tantos egos. Debe tener mucha cintura, mucha muñeca para manejar un plantel con muchos egos.
- ¿Le gusta el equipo que va a parar hoy Bielsa? ¿Cree que tiene que salir a atacar a Argentina o lo tiene que esperar para salir de contragolpe?
- Es complicado dejar jugar a Argentina. Yo creo que Uruguay va a salir a jugar de entrada y tomar la iniciativa. Por eso decía que será un partido muy dinámico. Si Uruguay la deja jugar a Argentina, creo que la va a pasar mal. A no ser que la selección de Scaloni lo lleve a eso, pero en primera instancia creo que va a ser de ida y vuelta, con mucha dinámica y calidad. Repito, no creo que Uruguay deje de jugar a Argentina y que tampoco Argentina deje de jugar a Uruguay.
- ¿Qué significa para Uruguay jugar en el Estadio Centenario?
- Es un estadio con mucha historia. Yo he atajado ahí. Son de los pocos estadios que van quedando por historia, ya que, por actividad, por el momento, por todo, lo han ido refaccionado y ha perdido la mística. Mete miedo el Centenario como también el Maracaná de Rio de Janeiro, donde una vez he jugado y me he asustado un poco. Ahora no, es pobre, mantiene la mística, es de los pocos estadios que mantiene eso. El seleccionado que viene siente la historia, aunque ha cambiado un poco, tiene menos público, pero sigue siendo el Centenario.
- ¿Firma el empate para esta noche?
- El empate no le vendría mal. Yo pienso que el empate contra Argentina, si tenés en cuenta que se ganó allá en La Bombonera, o sea, en el promedio sería 4 puntos de 6, no es mal negocio contra Argentina
- ¿Qué recuerdos tiene de vestir la casaca Celeste?
- Después de estar once años en una selección pasé por todos los momentos ¿no? Hubo buenos momentos, difíciles, malos, recordados, buenísimos. Fue una experiencia espectacular, con el agradecimiento y el orgullo de haber vestido la camisa de la Celeste. Simplemente, no soy un hincha más, porque veo las cosas desde otra óptica lógicamente, pero con ojos de adentro ¿no? A veces lo veo distinto a un hincha normal que anda por la calle, ya tengo más experiencia, porque lo he vivido desde adentro y vi cosas que a veces uno no ve siendo hincha. Después de estar 22 años como profesional, uno ya se separa diferente del hincha de la calle.

- ¿Se identifica con este seleccionado uruguayo?
- Uno tiene un punto de vista diferente, pero me identifico con unos jugadores que hay hoy en día, sin duda. Acá se trabaja, se pone un poco la filosofía de juego, lo que quiere el entrenador, y está logrando resultados.
- ¿Cree que tanto Edinson Cavani como Luis Suárez merecieron otra despedida con la selección?
- Bueno, la despedida de Suárez fue espectacular, fue casi, casi como en la NBA. O sea, fue todo de Suárez. Y Cavani se retiró un poco, como es él, de perfil medio bajo, tranquilo, con el reconocimiento de la gente porque se lo merece. Todos sabemos en qué momento tenemos que dar un paso al costado, e intentar irnos con la puerta grande o chica. En el caso de los dos, se han ido por la puerta grande con el cariño de su gente. Sabemos que esto es muy dinámico ¿no? Y bueno, cuando comenzamos a jugar en la selección, hay momentos que no vamos a estar más. Y chau, viene otro y habrá que iniciar por otro, y deseando lo mejor a otro.
- ¿Ve a la selección de Uruguay compitiendo en el Mundial 2026?
- Sí, va a estar presente, ni hablar. Si hay tiempo para trabajar, podría competir durante la Copa del Mundo. Puede no sorprender, porque con la calidad de los jugadores no sorprende, pero llevar un buen esquema y todo puede andar para competir. Creo que hará un buen papel y eso sería fundamental para Uruguay. Vamos arriba Uruguay.