
El Manchester United ha revelado su intención de construir un nuevo estadio con capacidad para 100.000 espectadores, que será el epicentro de un amplio proyecto de regeneración en la zona de Old Trafford. Este ambicioso plan contempla no solo un estadio de última generación, sino también la revitalización económica y social del área, con la creación de miles de empleos, viviendas y nuevas atracciones.
Según el copropietario del club, Sir Jim Ratcliffe, la iniciativa representa un momento crucial en la historia de los Red Devils. “Hoy marca el comienzo de un viaje increíblemente emocionante hacia la entrega de lo que será el estadio de fútbol más grande del mundo, en el centro de un Old Trafford regenerado. Nuestro estadio actual nos ha servido de forma brillante durante los últimos 115 años, pero se ha quedado atrás con respecto a los mejores estadios del deporte mundial”, afirmó Ratcliffe en un comunicado difundido en la página oficial del club.
Los planes para el nuevo estadio, diseñado por la firma de arquitectos Foster and Partners, incluyen un innovador diseño de “sombrilla”, una amplia plaza pública y un complejo multifuncional que transformará la experiencia para los aficionados. “El estadio está contenido por una gran sombrilla, que recolecta energía y agua de lluvia y protege una nueva plaza pública que tiene el doble del tamaño de Trafalgar Square. El estadio, orientado al exterior, será el corazón de un nuevo barrio sostenible, totalmente transitable, con transporte público y dotado de naturaleza”, detalló Lord Norman Foster, arquitecto encargado del proyecto.
La creación del estadio está concebida como parte de un plan más amplio de regeneración gubernamental en Trafford Park, un área históricamente vinculada al crecimiento económico y social de Manchester.
Este proyecto tiene el potencial de aportar beneficios significativos tanto a nivel local como nacional, incluyendo un impacto económico estimado en 7.300 millones de euros anuales y la atracción de 1,8 millones de visitantes adicionales cada año. Además, se proyecta la construcción de más de 17.000 viviendas y la generación de 92.000 empleos.

Ratcliffe destacó la importancia de este desarrollo no solo para el Manchester United, sino también para las comunidades locales. “Igual de importante es la oportunidad de que un nuevo estadio sea el catalizador de la renovación social y económica de la zona de Old Trafford, creando puestos de trabajo e inversión, no solo durante la fase de construcción, sino de forma duradera cuando el distrito del estadio esté terminado. El gobierno ha identificado la inversión en infraestructuras como una prioridad estratégica, especialmente en el norte de Inglaterra, y estamos orgullosos de apoyar esa misión con este proyecto de trascendencia nacional, además de local”, apuntó.
La propuesta del Manchester United también contempla finalizar la construcción del estadio en un plazo estimado de cinco años, alineándose con la visión de Ratcliffe de tener el proyecto concluido antes de 2030.
En palabras del empresario, el objetivo es preservar el espíritu del legendario Old Trafford, conocido como el “Teatro de los Sueños”, mientras se crea un espacio innovador y moderno que cumpla con los más altos estándares internacionales. “Podremos preservar la esencia de Old Trafford, al mismo tiempo que se crea un estadio verdaderamente vanguardista que transforme la experiencia de los aficionados”, aseguró Ratcliffe.
El diseño incluirá también instalaciones complementarias, entre las que destacan un museo de tres pisos, restaurantes junto al canal y un marcador envolvente de última tecnología. Foster recalcó que esta clase de proyectos tienen una dimensión urbana y social significativa.
“Es una ciudad en miniatura de uso mixto del futuro, que impulsa una nueva ola de crecimiento y crea un destino global del que los habitantes de Manchester pueden estar orgullosos”, añadió.

Aunque el financiamiento del estadio ha sido garantizado por el propio club, que actualmente atraviesa dificultades económicas con una deuda de 1.000 millones de libras, el gobierno del Reino Unido brindará respaldo para la regeneración de todo el parque de Trafford. Las autoridades confían en que este proyecto, calificado como de interés estratégico, se convierta en un modelo de revitalización urbana y económica en el norte del país.
En términos de capacidad, el estadio proyectado superaría a Wembley, el actual recinto más grande del Reino Unido con espacio para 90.000 espectadores, y se consolidaría como el segundo estadio más grande de Europa, después del renovado Camp Nou en Barcelona. Este ambicioso emprendimiento posiciona al Manchester United no solo como un club referente en la Premier League, sino como un actor clave en el desarrollo urbano y económico de su entorno, con miras a un futuro sostenible y próspero.
Los aficionados y residentes de Manchester esperan que este proyecto no solo revitalice la herencia histórica del Old Trafford, sino que también marque una nueva etapa para el club y la ciudad, con impacto positivo en múltiples dimensiones.
