El jugador del Manchester City, Jack Grealish, volvió a ser el centro de atención, por otro episodio que sucedió fuera de los terrenos de juego. El futbolista fue visto en el exclusivo Chiltern Firehouse, un reconocido punto de encuentro de celebridades en Marylebone, Londres, tan solo un día después de su sustitución por una lesión en la derrota de su equipo por 3-2 ante el Real Madrid en la Liga de Campeones.
Según detalló el periódico inglés Daily Mail, el británico fue captado saliendo del local acompañado de una “misteriosa mujer rubia”. Aunque algunos testigos afirmaron que la pareja “parecía cómoda” dentro del lugar, el futbolista dejó en claro su postura, cuando al salir le gritó a la prensa que estaba en la salida del recinto: “¡Ella no está conmigo!”, dijo el atacante de los Ciudadanos.
Siempre según el diario inglés, minutos después, Grealish regresó al interior del establecimiento antes de salir nuevamente en solitario, ingresando rápidamente en un coche conducido por un chofer pasadas las 12 de la noche.
En la misma noche, rostros conocidos como el actor Mark Ruffalo, la actriz Morena Baccarin, la modelo Ellie Bamber y el exfutbolista Jamie Carragher también fueron vistos en el lugar, reafirmando la popularidad del Chiltern Firehouse entre personalidades del mundo del espectáculo y el deporte.
Esta aparición de Grealish se puso en tela de juicio ya que se produjo en un momento especial de su vida personal. Hace unos meses, el futbolista compartió con sus seguidores la llegada de su primera hija, Mila Rose Grealish, fruto de su relación con Sasha Attwood.
Mediante una publicación en redes sociales, el jugador mostró una tierna fotografía en blanco y negro de su pequeña al anunciar su nacimiento el 27 de septiembre de 2024. “Mila Rose Grealish, 27/09/24”, escribió. Attwood también expresó su felicidad, calificando el nacimiento como “el momento más especial de mi vida”.
Días más tarde, Grealish compartió otra imagen que mostraba un momento íntimo como padre; en la foto se le veía sosteniendo a su hija mientras parecía relajado y sonriente. Aunque el jugador reconoce que este año ha sido “el más difícil” de su vida, también ha destacado el significado transformador de la paternidad.
Recientemente, el futbolista afirmó que, “el año pasado, todo el año en sí, fue extraño porque nació mi pequeña hija, pero aparte de eso fue uno de los años más difíciles, probablemente el año más difícil de mi vida por muchas razones, dentro y fuera de la cancha”.
“Quiero empezar a jugar más a menudo y tener ese ritmo, como lo hacía hace un par de años cuando jugaba muchos partidos seguidos. A veces me resulta difícil entrar y salir de los partidos, no jugar realmente. Espero poder seguir entrenando bien y jugar algunos partidos más", sentenció tras el final del duelo por FA Cup contra el Leyton Orient.
Por otro lado, algunos medios han especulado que su reciente salida nocturna podría haber influido en su exclusión de la convocatoria del City en un partido contra el Newcastle, tan solo dos días después del incidente en Londres. Sin embargo, ni el club ni el jugador han dado declaraciones al respecto.
Cabe recordar que el próximo miércoles el conjunto inglés tendrá una difícil tarea si quiere clasificar a octavos de final de la Champions League. Para hacerlo deberá imponerse al Real Madrid en el Santiago Bernabéu por una diferencia de dos goles.
