![Faustino Oro iniciará su camino](https://www.infobae.com/resizer/v2/FPXE5I6LANBBZI4QISBYUTN2MY.jpg?auth=29e97a763d39dc6237f09d0712db4fdb234d608e543c780df1414beaaa14b470&smart=true&width=350&height=197&quality=85)
La vara está muy alta. En el mundo del ajedrez la conquista del título de gran maestro es un logro que exhiben unos pocos. En el frondoso historial de la actividad en Argentina sólo 35 ajedrecistas lo lograron, el más joven fue Alan Pichot (ahora bajo bandera española), en 2015, a los 16 años y 9 meses.
El récord mundial en precocidad está en poder de un niño norteamericano de padres indios, Abhimanyu Mishra, que en 2021 estableció la hazaña a los 12 años y 4 meses. Esa es la marca a vencer por Faustino Oro, de 11 años, que en 2024 le arrebató a ese ajedrecista la plusmarca con la conquista del título de maestro internacional -a los 10 años y 8 meses- y que ahora corre detrás del nuevo sueño: ser gran maestro. Si es con plusmarca, mejor, pero el primer paso es lograr una de las tres normas (performances) que exige la reglamentación para la homologación del título. En Túnez lo aguardará una prueba exigente dada la fuerza de juego de sus rivales por lo que su labor debería ser brillante, casi rozar la hazaña.
“Esta clase de torneos son muy difíciles para alcanzar la norma de gran maestro. Quizá muchos lo desean, pero cuando cada día tenés que enfrentarte con rivales tan duros y sin tiempo de recuperarte porque en la rueda siguiente te toca jugar con otro que es tanto o más fuerte que el anterior, la cosa se vuelve más complicada”, le dijo a Infobae, el siete veces campeón argentino, Diego Flores.
Es que, a partir de hoy (sábado), el prodigio argentino, será uno de los 10 participantes del Torneo Master de Djerba; la principal competencia que tendrá el 5° Festival de Ajedrez en esa isla africana, que se desarrollará paralelamente junto a tres abiertos internacionales, un torneo para jugadores amateurs, exhibiciones simultáneas y una prueba de ajedrez blitz (partidas a 3 minutos para cada competidor). Todo ello con una bolsa de premios de 16 mil euros.
Faustino Oro preclasificado décimo por la fuerza de su ranking, será rival de nueve grandes maestros, varios de ellos pertenecientes a la élite de este juego, y sin dudas, como sucediera algunas semanas atrás en Países Bajos, le apuntarán al niño como el gran adversario a vencer.
La competencia que se disputará por sistema round robin (todos contra todos) con un ritmo de juego de 90 minutos más 30 segundos adicionales por cada jugada y para cada ajedrecista, se extenderá hasta el 23 de este mes, y además de la presencia de la joven estrella argentina, la nómina de participantes la completan: Parham Maghsoodloo (mejor ajedrecista iraní y N°47 del mundo), David Navara (mejor ajedrecista checo y N°48), Volodar Murzin (ruso y campeón mundial 2024 en la especialidad blitz), Bassem Amin (mejor ajedrecista egipcio y N°73), Daniel Dardha (campeón belga y ganador del Master Djerba en 2024), Etienne Bacrot (ocho veces campeón de Francia), Vasili Ivanchuk (ucranio y leyenda de este juego), Jules Moussard (campeón francés 2024) y Marc´andria Maurizzi (francés y campeón mundial juvenil 2023).
Dada la fuerza de Elo (así se denomina el puntaje para el ranking de los ajedrecistas), Fausti o “el Messi del ajedrez” æcomo lo llama la prensa europea– necesitará sumar 4,5 puntos en las 9 partidas que se enfrentará con rivales que lo superan entre 130 y 230 puntos para lograr el objetivo de la 1ª norma. Una tarea extremadamente compleja, aunque parezca un buen atajo alcanzar un empate en cada una de sus partidas.
![Necesitará sumar 4,5 puntos en](https://www.infobae.com/resizer/v2/4U5VA3YORVE6RAASQG74BYPKMQ.jpg?auth=4b6eab568f8afa8600d4ac459ee3e072163259dd3f3f93160780e448869001da&smart=true&width=350&height=197&quality=85)
Acaso, desde su entorno, uno de los focos de atención en la actuación del pequeño Faustino estará puesto en su preparación. Es que del proyecto original que contó con la “bendición” del mecenas argentino, el empresario Daniel Rabinovich y que coordina el maestro uruguayo Andrés Rodríguez, en menos de un año ya se devoró a medio equipo de trabajo. Dos de los cuatro entrenadores seleccionados originalmente ya no están al lado del niño: los maestros internacionales, Jorge Rosito y Mario Villanueva, encargados de la preparación de sus aperturas.
Además las pruebas con otros expertos tampoco funcionaron. “Lamento mucho pero no puedo seguir. Tiene un talento enorme pero no tengo más para enseñarle”, así le comunicó el letón Alexei Shirov a sus padres, tras la breve enseñanza en el segundo semestre de 2024.
Otro gran maestro Rafael Leitao tampoco lo acompañara en la preparación para el torneo de Túnez. “Hice algunas sesiones de entrenamiento con Faustino, pero ya no trabajamos juntos. Fueron sólo algunas clases durante los meses de noviembre, diciembre y enero”, le contó a Infobae la estrella del ajedrez brasileño.
Por lo que parece al menos extraño que un proyecto, que cuenta con un importante sostén económico, a nueve meses de su puesta en marcha aún no haya conseguido un plan serio de continuidad de trabajo con un entrenador, acorde a las exigencias de la alta competencia y tan necesario para el futuro del joven prodigio. Así queda expuesta su débil preparación sorteando con zozobras la mayoría de las aperturas sin poder sacar ventaja a sus rivales y que sólo por “su asombrosa capacidad” consigue, a veces, sostener e incluso dar vuelta sus resultados. O los entrenadores son mal seleccionados o los arrebatos del humor anteponen la acción al pensamiento a la hora de la toma de decisiones.
“El Torneo de Túnez será más fuerte que el que jugó Fausti en Tata Steel, hay grandes jugadores y leyendas de este juego como Ivanchuk. Será una gran oportunidad para jugar con fuertes adversarios y seguir progresando. Es el camino que deberá recorrer para fortalecer su juego. El objetivo de la norma es muy difícil, aunque no digo que sea imposible”, le aseguró el maestro internacional argentino Leandro Perdomo a Infobae.
La creación del Festival de Ajedrez de Djerba es obra del empresario franco-tunecino Chokri Saidi, cuya visión apunta a combinar el ajedrez, la amistad, la cultura y turismo en la paradisíaca isla de Djerba, la más grande frente a la costa del norte de África, conocida también con la “Isla de los sueños” bañada por las aguas del Mediterráneo.
“Hemos creado un nuevo modelo para un festival de ajedrez mezclándolo con muchas actividades de ocio. En Djerba, vienes a jugar un torneo de ajedrez en un entorno agradable con tu familia. ¡Aquí hay actividades para todos!“, señaló Chokri Saidi a la prensa durante la presentación del festival.
Su idea fue la de combinar la pasión del ajedrez con el placer de las vacaciones. Djerba reúne los ingredientes necesarios para un cóctel que combina, grandes playas, palmeras, aguas cálidas del mediterráneo, los pueblos de menzels y sus típicas casitas blancas. Se trata de un sitio de gran atracción turística que ahora se volvió un centro de atención para los ajedrecistas.
El belga Daniel Dardha, ganador de la competencia en 2024, fue invitado para participar este año. Sobre su experiencia, contó: “Me gustó mucho el ambiente el año pasado; me divertí mucho y todo salió mejor que lo imaginado. Las condiciones fueron excelentes y este año creo que serán mejores”.
En tanto la agenda de actividades de Faustino Oro no tiene respiro; hoy, en Túnez hará su debut, como conductor de las piezas blancas, ante el francés y ex campeón mundial juvenil, Marc´andria Maurizzi. Todo un desafío.
Más tarde, algunos días después de finalizada su actuación en Djerba, el 15 de febrero, Faustino regresará a la Argentina, y a partir del 14 de marzo se presentará en Uruguay como una de las estrellas del Primer Festival de Ajedrez Punta del Este, junto a los maestros José Pepe Cuenca (España), Sion Galaviz (México), Andrés Rodríguez (Uruguay) y los argentinos Diego Flores y Sandro Mareco. Allí también tendrá una nueva oportunidad para la búsqueda de la norma de gran maestro. Su gran objetivo. El sueño del Pibe.