La Liga MX y el gobierno del estado Querétaro declinaron abrir el estadio La Corregidora para el partido de la jornada 8 entre Gallos Blancos y Mazatlán FC.

Y es que entre los planes para la reapertura del inmueble estaba hacer un ensayo previo a la fecha original, en la que se contemplaba un aforo del 20 por ciento. Sin embargo, de acuerdo con ESPN ese proyecto, por ahora, está declinado.

La confusión salió a partir de que el mandatario panista, Mauricio Kuri, cayó en una imprecisión a la hora de explicar las fechas para la reapertura, por lo que el partido del próximo domingo 19 de febrero será a puerta cerrada, como desde hace casi un año.

Hasta ahora, las autoridades y los responsables del club han trabajado en la instalación de cámaras y creación de operativos de seguridad para evitar que vuelva a repetirse una trifulca como la de los hinchas del Atlas de Guadalajara contra la Resistencia de Gallos, del 5 de marzo de 2022, donde se registraron decenas de heridos.

Esa trifulca, que dejó 26 hospitalizados, provocó una sanción de un año sin público para los Gallos Blancos, además de varios cambios administrativos. El castigo vence el próximo 8 de marzo, pero será hasta el 19 de ese mismo mes, cuando enfrenten a los Bravos de Juárez, que el equipo que dirige el argentino Mauro Gerk pueda volver a tener a sus aficionados en los partidos de local.

Cabe mencionar que para hacer posible esa reapertura se le pidió al club como requisito 200 cámaras instaladas dentro del inmueble, además de renovar los planes de seguridad y la instalación del FAN ID.

Los sistemas de seguridad y la instalación de cámaras serán probado antes por las autoridades locales, así como la Federación Mexicana de Futbol (FMF), para garantizar la paz.

En la Liga MX, estadios como el Nemesio Díez tienen un sistema de cámaras de seguridad similar al que se le pide al club Querétaro, ya que el inmueble en el que juega de local el CD Toluca está dotado con 187 cámaras.

En el 2022, se pudo saber que los Diablos Rojos invirtieron 100 millones de pesos en su sistema de seguridad de cámaras, el cual incluye reconocimiento facial y es operado en alianza con una empresa que se especializa en el ramo.

Desde el veto al estadio, el club ha perdido poco más de 115 millones de pesos. La gresca causó que, en un sólo día, Gallos Blancos perdieran más de 100 millones de pesos, en una reacción en cadena que dejó como consecuencias pérdidas de patrocinadores, reducción de ingresos, pago de multas, sanciones y gastos.

A penas en septiembre del 2022, la Fiscalía General del Estado de Querétaro encabezada por Alejandro Echeverría Cornejo informó que las indagaciones no habían terminado y dijo que hasta ese entonces son 57 personas sentenciadas y se habían logrado una reparación del daño a víctimas de alrededor de un millón 600 mil pesos