Cayó estructura criminal que comercializaban drogas dentro de campus de la UIS, en Bucaramanga

Según explicaron las autoridades, la agrupación criminal era conformada, en su mayoría, por estudiantes que ofrecían sus productos en diferentes puntos de la institución educativa

Guardar
Policía entregó detalles de la captura de los implicados- crédito @PoliciaBmanga/X

Un operativo policial permitió desarticular una red de microtráfico que operaba dentro del campus de la Universidad Industrial de Santander (UIS) en Bucaramanga, con la captura de 15 personas y la incautación de drogas, armas y dinero en efectivo.

La acción, resultado de una investigación de ocho meses, puso fin a las actividades de la estructura conocida como Los de la U, integrada principalmente por estudiantes y exestudiantes de la institución, y generó un fuerte impacto en la comunidad universitaria.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel

Durante la madrugada del martes 25 de noviembre de 2025, agentes de la Sijin de la Policía Metropolitana ejecutaron allanamientos en 11 viviendas cercanas a la UIS.

En el procedimiento, 14 personas fueron detenidas por orden judicial y una más en flagrancia. Entre los capturados se encuentran 10 estudiantes activos y cinco exalumnos de la universidad. Todos deberán responder por los delitos de concierto para delinquir y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.

En los operativos, las autoridades incautaron 54 kilogramos de marihuana, valorados en aproximadamente 32 millones de pesos; 1.500 gramos de cocaína, con un valor estimado superior a 30 millones; dos armas de fuego; siete cartuchos; seis teléfonos móviles; una prensa hidráulica utilizada para la extracción de derivados de cannabis; elementos para el empaque y dosificación de drogas, y 48 millones de pesos en efectivo.

Así cayeron Los de la U en Bucaramanga- crédito @PoliciaBmanga/X

La investigación reveló que Los de la U utilizaban métodos sofisticados para comercializar estupefacientes dentro del campus. La estructura se ubicaba en puntos estratégicos como los comedores estudiantiles, donde ofrecía marihuana exótica, destilados, derivados de cocaína, tusi, éxtasis y productos comestibles a base de marihuana, como brownies, chocolatinas y gomas.

Los productos se exhibían abiertamente en frascos, simulando una tienda, y los pagos se realizaban mediante códigos QR. Las dosis se vendían a precios que oscilaban entre $8.000 y $50.000.

Para evadir los controles de seguridad interna, los integrantes ingresaban la droga oculta en morrales y bolsos. Además, la estructura recurría a la intimidación, utilizando discursos que aludían a supuestas alianzas con Los del Sur y grupos armados ilegales como el ELN, con el objetivo de infundir temor y evitar denuncias por parte de estudiantes y personal universitario.

Los sindicados fueron capturados en
Los sindicados fueron capturados en flagrancia- crédito @PoliciaBmanga/X

Las autoridades estiman que la organización obtenía ganancias diarias cercanas a los $50 millones y alrededor de $1.000 millones mensuales. El presunto cabecilla, identificado como alias Pechi, habría liderado la operación durante al menos tres años dentro de la universidad.

La investigación se inició tras denuncias presentadas por estudiantes y personal administrativo, lo que permitió a los agentes encubiertos realizar compras controladas y recopilar pruebas mediante videos, drones y testimonios.

Las autoridades continúan indagando para determinar si existió permisividad interna y para identificar posibles vínculos con otras estructuras delincuenciales que operan en el área metropolitana.

El microtráfico es una constante
El microtráfico es una constante en distintas ciudades del país-crédito Shutterstock

El microtráfico, una problemática que persiste en Santander

Y es que el microtráfico en Bucaramanga se ha consolidado como un fenómeno estructural cuyo impacto va más allá de la venta de drogas: se relaciona directamente con violencia, sicariatos, inseguridad en barrios populares y deterioro de la convivencia.

Las autoridades locales han identificado que varias estructuras delincuenciales controlan la distribución al por menor de estupefacientes —especialmente marihuana, bazuco y cocaína en forma de base o derivados— en diversos puntos de la ciudad y municipios aledaños como Floridablanca, Girón, Piedecuesta.

En muchos de esos barrios confluyen también otros delitos: hurto, violencia interpersonal, lesiones y porte ilegal de armas, lo que evidencia cómo el microtráfico alimenta un círculo de criminalidad más amplio.

Pese a los operativos constantes, la distribución de drogas se mantiene con notable persistencia. Por ejemplo, en un reciente allanamiento en el barrio Villas de Girardot fueron capturados —en flagrancia— dos presuntos expendedores junto a 1.022 dosis de marihuana y 919 cigarrillos artesanales.

Otro operativo significativo en Piedecuesta, llevado a cabo por la Policía Metropolitana, permitió incautar más de 7 kg de cocaína y capturar a miembros de una estructura criminal conocida como Los del Sur.