Beber de cráneos, pintarse con cenizas y comer carne humana: así fue la experiencia de un colombiano con la secta aghori

Los integrantes de la comunidad ascética reciben huesos de humano cada vez que avanzan en su “aprendizaje” dentro de la secta

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Los miembros de esta secta
Los miembros de esta secta beben de cráneos humanos y pintan sus rostros con cenizas de muertos - crédito GonzaloSáenz/@PlanetaJuan/YouTube

En su visita por la India, el colombiano Juan Díaz ha recorrido zonas en las que se ha encontrado con costumbres que serían imposibles de replicar en su país natal, principalmente por las creencias religiosas.

Una de las que más llamó la atención del youtuber se registra en Varanasi, en donde los locales llevan los cuerpos de sus familiares fallecidos para que sean quemados y arrojados al río Ganges.

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Se cree que esta práctica es el último paso que debe completar un ser humano para terminar con su proceso de reencarnación, es por ello que se toma como una celebración para trascender en la vida.

De hecho, la cercanía de los creyentes con este tipo de acciones ha hecho que en la actualidad se sume la costumbre de nadar alrededor de los restos humanos, puesto que para ellos esto los aproxima al ser querido que murió.

Los aghoris son rechazados en
Los aghoris son rechazados en la India por las prácticas que realizan en torno a la religión - crédito @PlanetaJuan/YouTube

Precisamente, haciendo seguimiento sobre esta costumbre, el colombiano se enteró de que los creyentes deben cuidar los cuerpos después de que estos son dejados en el río, puesto que hay una secta que se lleva las cenizas o partes que quedan tras la cremación para ejecutar rituales que incluyen consumir carne humana.

Se trata de los aghoris, una secta ascética del hinduismo originaria de la India, principalmente relacionada con la adoración a Shiva. Se distinguen por prácticas rituales y creencias extremas, que buscan la liberación espiritual a través de la ruptura de tabúes sociales y religiosos.

Los aghoris suelen residir cerca de crematorios y utilizan cenizas de cadáveres para cubrir sus cuerpos, como símbolo de la transitoriedad de la vida material; algunas de sus prácticas incluyen la meditación en lugares asociados con la muerte y el consumo de sustancias consideradas impuras o prohibidas por otras ramas del hinduismo. Su objetivo principal es alcanzar moksha, la liberación del ciclo de reencarnaciones.

El grupo es pequeño y se caracteriza por su actitud transgresora respecto a las normas tradicionales del hinduismo y la sociedad india. Aunque son objeto de estigmatización, también existen mitos sobre sus supuestos poderes espirituales.

Los aghoris tienen huesos humanos
Los aghoris tienen huesos humanos en sus collares - crédito @PlanetaJuan/YouTube

Colombiano habló con dos integrantes de los aghoris

Debido a la curiosidad que le generó la historia de esta secta, Díaz buscó a un integrante para dialogar y conocer más sobre ellos, lo que lo llevó a visitar templos en los que adoran a Shiva, en donde le frotaron ceniza (de dudosa procedencia) en su rostro.

Tras recorrer varias zonas, en las que observó figuras de los aghoris que incluyen dioses dibujados con cabezas humanas en sus prendas de vestir, el creador de contenido logró encontrar a dos integrantes de la secta, que tenían collares con huesos humanos.

El colombiano charló con dos
El colombiano charló con dos aghoris en la India - crédito @PlanetaJuan/YouTube

Durante su charla con los aghori, Díaz preguntó por varios aspectos de sus creencias, incluyendo el consumo de carne humana en algunos rituales.

“Ir al crematorio y realizar los rituales, hacer la adoración y donde se quema el cuerpo. Hay que ir ahí, es la unión de un alma con otra. Se come carne y se hacen ofrendas de alcohol”, respondió el local al respecto.

De la misma forma, explicaron que uno de ellos tenía un hueso de pierna y el otro de un brazo, puesto que, en su creencia, cada vez que un “sabio” profundiza su aprendizaje es premiado con una parte cada vez más arriba, hasta llegar a tener el cráneo de un muerto, que representa el conocimiento total.

“Hay una cosa que sucede. Nadie ha visto la muerte, el cuerpo es una burbuja de agua, no sabemos cuando el señor nos llamará. Un santo existe para la liberación suprema, nosotros servimos a la sociedad. La carne humana parece ser humana, pero en realidad le pertenece a alguien más”.