El presidente del Senado advierte sobre riesgo de violencia política y pide al Gobierno bajar la polarización

El presidente del Senado de Colombia, Lidio García Turbay, expresó preocupación por el ambiente político del país, al que calificó como el más polarizado en décadas, y advirtió sobre el riesgo de que resurjan episodios de violencia política similares a los vividos en la década de 1990. }

En entrevista con El Colombiano, el senador liberal, cercano al expresidente César Gaviria, hizo un llamado a frenar la confrontación y buscar la unidad frente a los retos nacionales.

Uno de los temas que concentra la atención del Congreso es la disputa limítrofe con Perú por una isla surgida en el río Amazonas, en la zona de Santa Rosa de Loreto, territorio que Colombia considera suyo, pero que el vecino país reclama. García insistió en que la soberanía nacional es “innegociable” y defendió que cualquier solución debe buscarse por la vía diplomática, evitando declaraciones públicas que escalen las tensiones. Señaló que desde el Senado se dará un pronunciamiento formal sobre el tema y que se deben reunir “a los mejores defensores” para sustentar la posición del país en instancias jurídicas internacionales.

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El legislador, que integra la Comisión Segunda —encargada de asuntos de defensa y relaciones exteriores—, reconoció que la situación actual es producto de un descuido prolongado, no atribuible únicamente al gobierno de Gustavo Petro. Sin embargo, criticó la gestión oficial y cuestionó el uso de redes sociales y discursos públicos para tratar asuntos delicados.

“Quizá muchos no conocen el tema de Santa Rosa de Loreto, que es un territorio colombiano, pero que Perú reclama como suya. Desde el Congreso y no solamente yo como presidente, tenemos que hacer un llamado a la soberanía de los colombianos, que debe ser innegociable”, dijo.

Más allá de la controversia con Perú, García manifestó su inquietud por el clima político interno, marcado por lo que describe como enfrentamientos personales en el Congreso y un nivel de polarización que, en su opinión, se origina en la manera en que el presidente Petro comunica sus mensajes. Considera que el mandatario debería contribuir a generar tranquilidad, evitando “mensajes de división” y propiciando debates serenos y profundos.

El presidente del Senado aludió al caso reciente del senador Miguel Uribe Turbay, quien fue víctima de un ataque que, según investigaciones en curso, podría estar vinculado a un clima de hostigamiento político. García sostuvo que este hecho podría ser un indicio de una escalada de violencia contra figuras públicas y aseguró que hay alertas provenientes de organismos de inteligencia sobre posibles amenazas a otros líderes.

“Hay temor de que haya una situación como la que vivimos hace cerca de 30 años. Ojalá eso no suceda y que la confrontación sea política, pero lo que pasó con Miguel Uribe podría ser el punto de partida de lo que puede terminar pasando. Por eso hay que bajarle los ánimos y ponerle freno, porque no se puede estar echándole leña a la hoguera”, añadió.

Frente a las reformas impulsadas por el Ejecutivo en el último año de la actual legislatura, García reiteró que dará garantías para el debate de todas las iniciativas, incluidas la reforma a la salud y la tributaria, aunque advirtió que el Gobierno podría no contar con los votos necesarios.

Sobre la reforma a la salud, indicó que respalda cambios para mejorar el sistema, pero sin “borrón y cuenta nueva” y aprovechando los avances logrados. En el caso de la tributaria, consideró improbable su aprobación en un contexto electoral, debido a su impopularidad y al desgaste político que implicaría para quienes la apoyen.

“Yo quiero debate, que se discutan todas las reformas que se presenten y todos los proyectos importantes, pero que se debata. Lo que no sé es si tienen los votos. Eso es otra cosa, pero aquí va a haber debate y garantías”, expuso.

En cuanto al presupuesto nacional para 2026, afirmó que debe ser discutido ampliamente en el Congreso y no aprobado vía decreto, salvo que no se logre consenso.

García también se refirió a las declaraciones del jefe de despacho presidencial, Alfredo Saade, sobre una eventual reelección de Gustavo Petro, y a la posibilidad de convocar una constituyente. Aseguró que tales propuestas carecen de sustento legal y que los tiempos constitucionales no permitirían una reelección en el actual mandato.

“La verdad todo lo que están hablando es un tema que no tiene asidero jurídico. La ley no lo permite. Aquí no hay reelección. Esos son ánimos populistas de personas que desconocen la ley o que tienen una intención. Están peleando es por la hegemonía, quién es el más fuerte en el gabinete del presidente. Cuando vi el 20 de julio al pastor Saade gritar ‘reelección’ pensaba que se trataba de un tema populista”, dijo.

Consciente de que su papel al frente del Senado implica tensiones con el Ejecutivo, el congresista afirmó que hará respetar la independencia de poderes y no permitirá que se impongan órdenes externas al Legislativo. Dijo estar preparado para resistir presiones y críticas, y subrayó que sus decisiones se tomarán en beneficio del país y no de intereses partidistas.

El dirigente liberal, que ya presidió el Senado entre 2019 y 2020, afirmó que en esta ocasión enfrenta un panorama más conflictivo y que su prioridad será reducir los ánimos caldeados, promoviendo debates ideológicos y no confrontaciones personales. Enfatizó que, aunque hay temor por la seguridad de los líderes políticos, es posible prevenir una crisis si las autoridades actúan con firmeza y se logra que las elecciones próximas transcurran en calma.