Conductor fue arrojado a una quebrada en Medellín: le robaron su carro y le dispararon

Un conductor de aplicaciones digitales de transporte en Medellín y el área metropolitana del Valle de Aburrá fue víctima de un violento asalto que culminó con su lanzamiento, gravemente herido, a una quebrada en el municipio de Bello.

El incidente ocurrió el pasado lunes 5 de mayo de 2025, en horas de la noche, según los primeros reportes de la Policía Metropolitana de Medellín.

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De acuerdo con las autoridades, la víctima, que sufrió heridas de consideración, no pudo denunciar el robo de su vehículo hasta cinco días después del ataque, lo que retrasó la divulgación del caso.

En este caso, el conductor aceptó un servicio en Medellín con destino a Bello, al norte del área metropolitana. Cuatro hombres abordaron el vehículo, un Ford Fiesta negro con placas KJA870, y el trayecto comenzó sin contratiempos. Sin embargo, al llegar al sector del CAI Valadares, los pasajeros habrían atacado al conductor. Según la investigación, primero lo sometieron mediante forcejeos y luego utilizaron un arma de fuego, disparándole al menos en dos ocasiones.

Tras herir al conductor, los agresores lo obligaron a detener el vehículo. Posteriormente, lo bajaron del automóvil y lo arrojaron a una quebrada cercana al CAI Valadares antes de huir con el vehículo robado, según el reporte de las autoridades. La gravedad de las heridas sufridas por la víctima le impidió realizar la denuncia de manera inmediata, lo que hizo que el caso se conociera varios días después de ocurrido.

El caso ya está siendo investigado por la Fiscalía General de la Nación, según fuentes del municipio de Bello. Las autoridades trabajan para esclarecer los hechos y dar con el paradero de los responsables, quienes no solo perpetraron el robo del vehículo, también pusieron en grave riesgo la vida del conductor.

Las camionetas de alta gama se han convertido en el principal objetivo de los robos de vehículos en Bogotá, según un informe de la Andi de 2024. Modelos como la Toyota Fortuner y la Toyota TXL encabezan la lista de los más sustraídos, incluso cuando cuentan con blindaje, una característica que, lejos de disuadir a los delincuentes, incrementa su atractivo debido al mayor valor que adquieren en el mercado negro. Este fenómeno pone en evidencia la sofisticación de las redes criminales que operan en la ciudad.

De acuerdo con la información publicada por la Andi, otros modelos de camionetas también son altamente codiciados por los delincuentes. Entre ellos destacan la Mazda CX5, la Mazda CX30 y la Renault Alaskan, vehículos de gama media-alta que son preferidos por grupos armados ilegales. Estas camionetas no solo tienen un alto costo, sino que también presentan mayores dificultades para ser rastreadas tras el robo, lo que las convierte en un blanco ideal para el mercado ilícito. En total, el 26% de los robos de vehículos en el país se concentran en este tipo de automóviles, lo que subraya su popularidad entre los criminales.

En el segmento de los autos compactos, los modelos más vulnerables son el Kia Picanto y el Chevrolet Spark. Según el informe, estos vehículos son objetivos frecuentes debido a la alta demanda de sus repuestos en el mercado ilegal. Su facilidad para ser comercializados tras el robo los convierte en una opción recurrente para los delincuentes, quienes priorizan vehículos que puedan desmantelar rápidamente para la venta de piezas.

La Alcaldía de Medellín, que también ha analizado el fenómeno del robo de vehículos en Bogotá, señala que estos delitos no son aleatorios. Las estadísticas indican que la mayoría de los robos ocurren durante la noche, especialmente entre las 6:00 p. m. y las 12:00 de la medianoche. Los días con mayor incidencia son los miércoles, jueves, viernes y sábado, mientras que los domingos los robos suelen concentrarse en la madrugada, cuando la vigilancia es más débil.