Peso colombiano es uno de los principales afectados por suspensión que anunció el FMI al crédito flexible para el país

La decisión de la entidad está vinculada a una consulta en curso, junto con una revisión adicional necesaria para determinar el acceso a la línea

Guardar
El peso colombiano ha sido
El peso colombiano ha sido una de las monedas más revaluadas frente al dólar en lo que va de 2025 - crédito Luisa González/Reuters

Los activos financieros de Colombia registraron un impacto importante tras el anuncio del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre la suspensión temporal del acceso del país a la Línea de Crédito Flexible (LCF) que está por USD8.100 millones. La decisión se suma a las preocupaciones existentes sobre el creciente déficit fiscal de la nación sudamericana.

De acuerdo con un análisis de Bloomberg, el lunes, los bonos colombianos en dólares experimentaron una caída considerable. Los títulos con vencimiento en 2035 perdieron un centavo, con lo que alcanzaron, aproximadamente, 100 centavos por dólar. Asimismo, el peso colombiano se debilitó un 0,8%, con lo que lideró así las pérdidas en una canasta de monedas emergentes monitoreada por el medio.

Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.

La decisión del FMI está vinculada a una consulta en curso con el organismo multilateral, junto con una revisión adicional necesaria para determinar el acceso a la línea crediticia.

El Fondo Monetario Internacional (FMI)
El Fondo Monetario Internacional (FMI) tiene varias funciones clave para la estabilidad del sistema financiero global. Sus principales funciones incluyen la supervisión de la economía mundial, la prestación de asistencia financiera a países en dificultades y la promoción del fortalecimiento de capacidades a través de asistencia técnica y capacitación - crédito Agencia Andina

El retraso en la implementación de reformas fiscales parece ser un factor determinante en la decisión del Fondo. En una nota emitida por los economistas de JPMorgan, Diego Pereira y Juan Goldin, se afirmó que “los retrasos en la implementación de dichas reformas a la política fiscal probablemente obligaron al FMI a suspender el acceso a la línea de crédito”. Según los expertos, la situación representa “un nuevo capítulo en el prolongado período de presiones fiscales derivadas del mayor gasto estructural y la sobreestimación de ingresos”.

‘Los vampiros vienen’

En respuesta, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, se pronunció por medio de X y manifestó su descontento al decir que “los vampiros vienen, pero los vampiros desaparecen antes del sol”, acompañado por el apellido de Kristalina Georgieva, directora gerente del FMI.

De igual manera, el ministro de Hacienda, Germán Ávila, negó que la medida del FMI implique un cierre del acceso de Colombia a la Línea de Crédito Flexible. Afirmó que “aunque no la mayoría, algunos opinadores han afirmado que se ha cerrado el acceso de Colombia a la línea de crédito flexible. Eso no es cierto”. Según el ministro, la línea, establecida en 2009, fue renovada en 2024 por dos años y está sujeta a revisiones anuales, siendo esta evaluación la que actualmente está en curso.

Gustavo Petro, presidente de Colombia,
Gustavo Petro, presidente de Colombia, llamó vampiros a miembros del FMI - crédito @petrogustavo/X

El FMI, en un comunicado emitido previamente, elogió algunos aspectos del manejo económico colombiano, como “el control de la inflación y su convergencia hacia la meta de política”. El ministro Ávila señaló que, aunque persisten problemas fiscales, “hay espacio para ser optimistas sobre la mejora de los resultados fiscales”, aludiendo a un mayor recaudo tributario entre marzo y abril, así como a la exitosa emisión de deuda externa por USD3.800 millones, cuya demanda superó casi tres veces la oferta.

De igual manera, el funcionario aseguró que las entidades internacionales y los socios comerciales de Colombia mantienen una visión positiva sobre la fortaleza económica del país. “Nuestros socios comerciales y las entidades crediticias internacionales no comparten que el aplazamiento de la decisión del FMI derive necesariamente en desmejora de las percepciones del mercado sobre la fortaleza de la economía colombiana”, enfatizó.

Aumento del gasto

El momento fiscal de Colombia sigue siendo delicado. El Gobierno enfrenta presiones para racionalizar el gasto público a la par que busca mejorar los ingresos. Según Pereira y Goldin, economistas de JPMorgan, la situación tiene raíces en un aumento del gasto estructural bajo la administración actual, lo que ha complicado el panorama económico ante la necesidad de ajustes presupuestarios.

Kristalina Georgieva es la directora
Kristalina Georgieva es la directora gerente del FMI - crédito Elizabeth Frantz/Reuters

La línea de crédito flexible del FMI, diseñada para apoyar a países con políticas sólidas en momentos de incertidumbre, ha sido utilizada en repetidas ocasiones por Colombia desde su aprobación inicial en 2009.

Tras el anuncio de su renovación en 2024, el aplazamiento actual revela tensiones renovadas sobre la credibilidad fiscal y las políticas económicas del país ante organismos internacionales.

Los mercados financieros seguirán atentos a los próximos pasos del FMI y al manejo fiscal del gobierno colombiano en las próximas semanas, decisiones que podrían determinar tanto la percepción internacional como la estabilidad económica del país.

Gravedad de la situación fiscal de Colombia

El director ejecutivo de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, alertó que esta decisión refleja la gravedad de la situación fiscal: un déficit del 6,8% del PIB en 2024 —el tercero más alto en 120 años—, un incumplimiento de la regla fiscal el año pasado y una meta de déficit para 2025 sin credibilidad ante los mercados.

Luis Fernando Mejía, director ejecutivo
Luis Fernando Mejía, director ejecutivo de Fedesarrollo, dijo que la decisión del FMI es una nueva alerta para el Gobierno - crédito @LuisFerMejia/X

“La línea de crédito flexible es un instrumento de prevención y manejo de crisis que históricamente se ha otorgado a países con un manejo macroeconómico sólido, como Chile, Colombia, México y Perú. Es una especie de crédito preaprobado que puede usarse en momentos de choques externos (como en 2020)”, precisó.

El experto insistió en que la decisión del FMI es una nueva alerta para el Gobierno.

Según dijo, “ratifica la necesidad urgente de recortar el presupuesto de este año en un total de $40 billones para evitar un nuevo incumplimiento de la regla fiscal y retomar la senda de reducción del déficit y la deuda pública”.