Vicepresidente de Ecopetrol respondió a los señalamientos sobre su millonario patrimonio: “La UIAF no me ha solicitado nada”

Rafael Ernesto Guzmán Ayala, actual vicepresidente ejecutivo de Ecopetrol, se encuentra en el ojo del huracán por presuntas irregularidades en el incremento de su patrimonio que, al parecer, asciende a cerca de 20.000 millones de pesos.

Según información revelada por W Radio, la Unidad de Información y Análisis Financiero (Uiaf) habría solicitado al directivo que rinda testimonio sobre algunas denuncias anónimas que señalan la existencia de un esquema de corrupción conocido como “el cartel de La Achira”.

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Este caso ha despertado interés debido a la magnitud de los bienes asociados al directivo, que incluirían propiedades en Colombia, Miami, España e Italia, con un valor total estimado en más de 100.000 millones de pesos.

No obstante, el vicepresidente de la empresa de hidrocarburos salió al paso de las críticas y desmintió que la entidad judicial le estuviera indagando sobre su patrimonio, por lo que sostuvo que dicha información estaría vulnerando su derecho al buen nombre de él y su familia.

“Quiero que se aclaren los temas para seguir teniendo el buen nombre que siempre he tenido y el de mi familia. Estoy aquí para aclarar el patrimonio que tengo y el que no tengo (...) No he sido notificado de ninguna investigación por ningún órgano de control, incluso la Uiaf aseguró que no lo ha hecho, en cuanto a los bienes quiero dejar claridad de donde vienen y cuáles sí son”, explicó Guzmán Ayala al citado medio de comunicación.

Del mismo modo, el vicepresidente de Ecopetrol se refirió a las propiedades que lo vinculan en dicha investigación, entre los que se resaltan apartamentos en sectores exclusivos de Bogotá, así como viviendas y locales comerciales en Cartagena, Barranquilla, Tunja, entre otras que, según el directivo, negó rotundamente estas afirmaciones.

“Ni yo ni mi esposa tenemos locales en Cartagena, ni bodegas, ni casas en Tunja, ni apartamentos en España ni Italia, no tengo fincas en Boyacá ni en el Meta”, comentó.

Además, el expresidente de Hocol, filial de Ecopetrol, desmintió cualquier relación con una supuesta empresa en Inglaterra. “Dicen que tengo una empresa en Inglaterra llamada Equion, la propietaria ha sido Ecopetrol, no yo, solo serví en su junta directiva porque así me nombraron”, resaltó.

En cuanto a sus propiedades en territorio colombiano, el vicepresidente ejecutivo de la empresa de hidrocarburos recalcó: “se habla de varios lotes y fincas en Manzanares, mi esposa nació allí y mi suegro dejó una herencia que se tuvo que repartir en 12 (hijos) (...) Yo tengo un lote en Puerto Colombia, no una casa, como se dice, sino un lote en Puerto Colombia. Tengo una casa y un apartamento en Cartagena. Esas propiedades las compré entre el año 1998 al 2009, mucho antes de ingresar a Ecopetrol en el 2010. En ese año, ya en Ecopetrol, compré un apartamento en el barrio Rosales (Bogotá) con un préstamo que le otorga Ecopetrol a sus empleados”.

A su vez, insistió en que su patrimonio es el resultado de una carrera profesional consolidada en el sector de hidrocarburos, tanto en Colombia como en el extranjero. Además, hizo un llamado a la claridad y la transparencia, asegurando que está dispuesto a aclarar cualquier duda sobre el origen de sus bienes.

Por otra parte, Guzmán Ayala se refirió a las investigaciones sobre la firma de varios contratos de venta de gas en 2021, los cuales establecían precios significativamente inferiores a los del mercado para periodos de seis y siete años.

“El proceso de firma de contratos de Hocol viene desde la gerencia comercial, que muestra una estrategia a un comité que la aprueba, yo hice parte de este cuerpo de revisión (…) Se fija el precio de venta y para los contratos que se están hablando del 2021, en ese momento el precio promedio era de 4.5 dólares por millón de BTU. Los contratos se firmaron a largo plazo, fue de 6 dólares por millón de BTU. Es decir, por encima del precio, y se fija la longitud del periodo de venta de ese gas. Se firmaron en ese periodo tres contratos a plazo de cinco o seis años de 82 contratos que se firmaron en año”, comentó.

Frente al conocimiento del caso por parte de Ricardo Roa, presidente de la entidad, Guzmán precisó: “Nunca estuve reunido con ningún cliente hablando sobre contratos. Entonces, no hay forma de tener conexión mía con estos contratos (...) el presidente Roa ha estado al tanto de todo. Al no tener ninguna investigación, yo continúo con mi trabajo”.

Por último, Rafael Guzmán Ayala aseguró que se encuentra alistando su equipo jurídico para enfrentar su situación, al considerar que no hay evidencias que lo vinculen con el escándalo en cuestión. “Yo estoy contactando abogados, lo más importante para mí es aclarar la situación y mi buen nombre”, concluyó.