El general (r) William Rincón dio nuevas pruebas del asesinato de su hijo Juan Felipe Rincón

El caso de Juan Felipe Rincón, un joven de 21 años que fue asesinado en extrañas circunstancias el 24 de noviembre de 2024 en Bogotá, podría cambiar drásticamente tras la presentación de nuevas pruebas por parte de su padre, el general (r) William Rincón.

El inspector general en retiro de la Policía Nacional reveló detalles del expediente en poder de la Fiscalía General de la Nación, incluyendo documentos, conversaciones en redes sociales y entrevistas forenses que cuestionan la versión inicial de los hechos.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.

De acuerdo con el general Rincón, su hijo fue víctima de un elaborado esquema de manipulación y extorsión. En declaraciones para Caracol Radio aseguró que Juan Felipe fue perfilado por personas que crearon cuentas falsas en redes sociales para contactarlo.

Estas cuentas, según explicó, inicialmente se presentaron como pertenecientes a una mujer de 30 años, pero posteriormente modificaron la edad para generar confusión en el joven. Este contacto habría sido el inicio de una cadena de eventos que culminaron en su trágico fallecimiento.

El general retirado ofreció una cronología detallada de los eventos que rodearon la muerte de su hijo. Según lo reportado por Caracol Radio, el primer contacto ocurrió el 5 de noviembre del 2024 a través de una cuenta de Instagram identificada como @katerin.sotelotorres.

A partir de ese momento, se inició un intercambio de mensajes que se extendió hasta el 23 del mismo mes, fecha en la que Juan Felipe se reunió con una menor de edad. “Los indicios los da precisamente el perfil que fue creado por Katherin Sotelo y es la dueña de este usuario y es la que contacta a mi hijo. Ella es la que quiere hacer creer que había una niña detrás de esto”, dijo el general al medio radial.

Este encuentro, según las investigaciones preliminares, desencadenó los hechos que llevaron a su muerte. El joven fue atraído a un encuentro bajo el pretexto de un desayuno, pero en realidad se trataba de una cita planeada por Katherin Sotelo, madre de dos menores de edad, con quienes Juan Felipe había sostenido conversaciones en redes sociales.

De acuerdo con el general retirado, los responsables conocían que Juan Felipe era un joven con recursos económicos, hijo de un alto oficial de la Policía y con una destacada presencia en redes sociales, donde acumulaba más de 800.000 seguidores. En estas plataformas, el joven compartía aspectos de su vida cotidiana, lo que habría facilitado a los extorsionistas obtener información clave sobre él.

Juan Felipe había rechazado en al menos diez ocasiones encontrarse con Sara Valentina, una menor de 16 años que finalmente logró concertar una cita con él. La joven, quien se desplazó en motocicleta hasta el centro comercial Titán, “ahí es donde ella insiste en que tiene permiso y unas horas antes le ha dicho a mi hijo que era independiente. Mi hijo fue un poco ingenuo y no cae en cuenta de eso”, indicó el padre de Juan Felipe para Caracol Radio.

La menor también fue víctima de la red de extorsionistas y fue utilizada como parte de un plan para atraer a su hijo hacia una trampa.

El general señaló que Sara Valentina estaba bajo el cuidado del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) debido a “situaciones especiales” que no detalló, y que no debería haber estado en la calle. Pero la joven apareció involucrada en un esquema que buscaba llevar a Juan Felipe a un lugar específico: “y apareció en calle haciendo un trabajo para que llevara a mi hija hasta cierto lugar. Ella salió del centro de protección donde ella está bajo un cuidado, hizo la tarea con esas personas y luego regresa”.

Tras pasar la noche en el apartamento, el plan de los extorsionistas era llevar a Juan Felipe a un desayuno en el barrio Quiroga. Sin embargo, el joven decidió no ir solo y mencionó que lo acompañaría un amigo, quien resultó ser un escolta.

El relato del general Rincón para Caracol Radio afirmó que “el plan que se cae cuando mi hijo dice paremos que voy a ir con un amigo, él no había mencionado nunca al escolta, dijo voy a ir con un amigo, cuando llegan a la casa, ella misma llama, lo dice en la entrevista forense, lo reconoce en el vídeo de arrepentimiento y en la entrevista que ella misma envía voluntariamente al abogado. Llama a Alison para avisarle que es un carro de la Sijín, que es un Policía, que se nos va a caer el plan”.

A pesar de esta advertencia, Katherine Sotelo, otra de las involucradas, insistió en seguir adelante con el plan.

Cuando llegaron al barrio Quiroga, Juan Felipe fue rodeado por Alison Sotelo, Katherine Sotelo y otros familiares de las menores. Según los videos en poder de la Fiscalía, Sara Valentina narró que el joven fue golpeado repetidamente mientras intentaba escapar.

En medio del ataque, Andrés Camilo Sotelo Torres sacó un arma de fuego artesanal, con la que golpeó a Juan Felipe en la cabeza, causándole graves lesiones antes de dispararle. Según las palabras de la menor, el arma fue utilizada para causar la muerte del joven.

El general Rincón denunció irregularidades en la investigación, particularmente en relación con el arma de fuego utilizada en el crimen. Según explicó al medio radial, el arma artesanal que Andrés Camilo Sotelo Torres habría usado fue manipulada y entregada a las autoridades dos días después del asesinato. Recientemente, se determinó que esta arma no era operativa, lo que plantea dudas sobre si realmente fue el artefacto utilizado en el homicidio.

Además, el general señaló que el arma que quedó registrada en la investigación fue la del escolta que acompañaba a su hijo, mientras que el arma homicida fue entregada posteriormente por Katherine Sotelo al fiscal encargado del caso. Junto con el arma, también se entregó el celular de Juan Felipe, lo que, según el general, evidencia una manipulación de las pruebas clave en el caso.