Castigaron al hijo de Marcelo Cezán por realizar una millonaria compra sin permiso

Un problema en el hogar de Michelle Gutty y Marcelo Cezán se ha robado la atención de sus seguidores. La pareja compartió detalles sobre un gasto inesperado realizado por su hijo Fabricio, de ocho años.

El menor utilizó la tarjeta de crédito de su madre para realizar una compra de un millón de pesos en juegos en internet, sin autorización previa. Este hecho, que fue revelado por la actriz a través de sus redes sociales, se robó el interés de los usuarios.

Michelle Gutty compartió en sus historias de Instagram una fotografía junto a su hijo, en la que explicó lo sucedido. “Discusión con Fabricio acerca de una compra que hizo ayer con mi tarjeta de 1.000.000 de pesos en juegos, sin permiso”, escribió la actriz.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.

Michelle Gutty detalló que pese a tratarse de un error, Fabricio deberá enfrentar las consecuencias de sus actos. La actriz explicó que su hijo intentó negociar el castigo que recibiría, pero ella dejó claro que en su hogar las acciones tienen implicaciones. “Él tratando de negociar su castigo (porque todo lo que hacemos tiene consecuencias)”, añadió en su publicación.

Michelle Gutty junto a su esposo Marcelo Cezán tomaron una decisión respecto a la educación de su hijo Fabricio. La pareja optó por retirar al niño de un colegio tradicional para inscribirlo en un sistema de educación en línea que le permita equilibrar sus estudios académicos con actividades extracurriculares enfocadas en su desarrollo personal y artístico.

La decisión responde a la intención de los padres de ofrecerle a Fabricio un entorno educativo más flexible y adaptado a sus intereses y habilidades. Michelle Gutty explicó en su cuenta de TikTok que el cambio busca aprovechar al máximo las tardes del niño, dedicándolas a actividades como natación, taekwondo y música. Estas disciplinas, según detalló, no solo contribuyen a su formación integral, también le permiten explorar áreas que le apasionan y que podrían ser fundamentales para su futuro.

En una entrevista con la revista Vea, Michelle Gutty profundizó en las razones detrás de esta decisión. La actriz indicó que, junto a Marcelo Cezán, considera que los métodos educativos tradicionales no siempre se ajustan a las necesidades de las nuevas generaciones. Según explicó, los niños de hoy en día, debido a su exposición temprana a la tecnología y otros estímulos, tienen un desarrollo cognitivo diferente al de generaciones anteriores.

“Decidimos sacarlo de la convencionalidad del estudio porque sentimos que, de alguna manera, los niños, como son hoy en día con el tema de la tecnología y todo lo que está pasando, nacen con un chip, un poquito más adelantado que lo que éramos nosotros (...) ellos desde muy pequeñitos saben lo que quieren, lo que no, lo que les gusta, lo que no”, afirmó la actriz y cantante. En este sentido, la pareja decidió priorizar un modelo educativo que no se base únicamente en la imposición de reglas, sino que fomente la autonomía y el criterio propio de su hijo.

Gutty destacó que el objetivo principal de este cambio es garantizar que Fabricio cuente con las herramientas necesarias para desarrollarse no solo en el ámbito académico, también en lo artístico, deportivo, emocional y espiritual. La actriz destacó la importancia de criar a un ser humano íntegro, capaz de enfrentar los retos de la vida con confianza y habilidades diversas.

“Nos parece demasiado importante criar y tener un ser humano bueno para la vida y no simplemente bueno para las cosas académicas”, expresó. Además, explicó que, aunque Fabricio continuará estudiando materias esenciales como matemáticas, ciencias y lenguaje, el enfoque estará en dedicar más tiempo a las áreas que realmente le apasionan.

Otro aspecto clave de esta decisión es la libertad que los padres han decidido otorgarle a Fabricio para elegir las actividades que desea realizar. Michelle Gutty indicó que, como padres, buscan escuchar a su hijo y apoyarlo en sus intereses, en lugar de imponerle un camino predeterminado.

“Es importante no trabajar desde la imposición. Una cosa son las reglas y otra cosa la imposición. Nosotros queremos escucharlo, saber lo que él quiere, las cosas que le gustan y empezar a prepararlo en esas áreas”, explicó la cantante.