La senadora María José Pizarro, integrante del Pacto Histórico, destacó la importancia de establecer un diálogo con el recién nombrado ministro del Interior, Armando Benedetti.

Según informó La FM, Pizarro reconoció que como parte de la bancada de gobierno tiene la responsabilidad de interactuar con el nuevo titular de esta cartera, a pesar de las controversias que lo rodean.

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De acuerdo con el medio, la senadora enfatizó que su rol como dirigente del Pacto Histórico y como voz representativa en el Congreso de la República la obliga a mantener una comunicación fluida con Benedetti.

“Él es el ministro del Interior y yo soy senadora de la República soy dirigente del pacto histórico y soy una de las voces que tiene esta bancada en el Congreso de la República y por lo tanto es mi responsabilidad dialogar con el nuevo ministro”, afirmó en una entrevista para La Fm, destacando que el diálogo con el ministro no solo es necesario, sino también urgente y obligatorio en el marco de sus funciones legislativas y políticas.

La llegada de Armando Benedetti al Ministerio del Interior no ha estado exenta de polémicas. Pizarro hizo referencia a las acusaciones que pesan sobre el ministro, señalando que será él quien deba responder por estas, tanto en el ámbito personal como en su calidad de figura pública.

“A lo largo de la historia, las mujeres hemos tenido que interlocutar en distintos momentos con personas que han ejercido distintos tipos de violencia contra las mujeres. Él tendrá que responder frente a estas acusaciones, primero ante su familia y luego como exsenador de la República y líder de este país”, expresó la senadora.

A pesar de estas circunstancias, Pizarro dejó claro que su enfoque principal es cumplir con su responsabilidad como miembro de la bancada de gobierno.

En este sentido, destacó que las mujeres, a lo largo de la historia, han tenido que interactuar con personas que han ejercido distintos tipos de violencia, lo que parece ser una alusión a las controversias que rodean al nuevo ministro.

Sin embargo, insistió en que su prioridad es garantizar el diálogo necesario para avanzar en los objetivos del gobierno.

La senadora reiteró que el diálogo con el ministro es fundamental para garantizar el cumplimiento de los compromisos adquiridos por el gobierno. “ Tengo una responsabilidad aquí y como parte de la bancada de gobierno hay un diálogo que es necesario, que es urgente, que es obligatorio con el ministro del Interior y él es el ministro del Interior”, afirmó, dejando en claro que su enfoque está en las tareas legislativas y en la construcción de consensos necesarios para avanzar en las políticas públicas.

La designación de Armando Benedetti como ministro del Interior plantea un desafío para el gobierno y para la bancada del Pacto Histórico, que deberá equilibrar las tensiones internas con la necesidad de mantener una relación funcional con el nuevo titular de la cartera

El Ministerio del Interior de Colombia se prepara para un nuevo liderazgo con la llegada de Armando Benedetti como titular de la cartera. El empalme entre el ministro saliente encargado, Gustavo García Figueroa, y Benedetti comenzará este martes 25 de febrero, tras la ratificación oficial de su nombramiento por parte de la Presidencia de la República el lunes 24 de febrero.

La designación de Benedetti, quien anteriormente se desempeñó como embajador en Venezuela y en la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), fue confirmada luego de cumplir con los protocolos de vinculación de altos funcionarios, incluyendo la publicación de su hoja de vida en el portal oficial de aspirantes. Este nombramiento había sido adelantado durante el fin de semana por medios como La W Radio y Noticias Caracol, que también reportaron otros cambios en el equipo ministerial del mandatario.

El retorno de Armando Benedetti al Gobierno Nacional no ha estado exento de controversias. Según detalló Infobae, Benedetti regresó a Colombia en noviembre del año pasado, tras su paso como embajador en Venezuela, para asumir el rol de asesor del presidente Gustavo Petro.

Sin embargo, a principios de febrero, su nombramiento como jefe de gabinete desató una crisis interna en el Ejecutivo. Durante un consejo de ministros transmitido el 4 de febrero, esta decisión fue rechazada casi de manera unánime por los altos funcionarios, lo que derivó en la renuncia de varios de ellos y evidenció las tensiones dentro del gabinete presidencial.