Mamá de La Segura mostró preocupación por la caída que sufrió la influenciadora: qué dijo

La influencer Natalia Segura, ampliamente conocida en redes sociales como La Segura, vivió un angustiante momento tras sufrir una caída en el edificio donde vive.

El incidente ocurrió la noche del 9 de febrero, cuando regresaba a su hogar junto a su esposo, el chef uruguayo Ignacio Baladán. La situación generó alarma entre sus seguidores, quienes se interesaron por su estado de salud y el de su bebé, ya que la creadora de contenido se encuentra en estado de embarazo.

De acuerdo con lo contado por la influencer a través de sus historias de Instagram, el accidente ocurrió alrededor de las 10:00 de la noche. Al salir del ascensor, La Segura tropezó debido a que su pantalón se enredó, lo que provocó que cayera hacia adelante. Aunque el impacto fue inevitable, la caleña aseguró que logró maniobrar para evitar que el golpe afectara directamente a su abdomen, optando por girar y caer de lado.

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“Gracias a Dios mi bebé está bien”, expresó La Segura en su relato, destacando que, aunque el susto fue considerable, su prioridad fue proteger a su hijo en gestación. La influencer detalló que, tras el incidente, experimentó dolor en el lado izquierdo de su cuerpo, especialmente en las costillas y el abdomen, que quedaron enrojecidos por el impacto. Sin embargo, afirmó que su bebé se encontraba en buen estado, algo que confirmó al notar sus movimientos a las pocas horas del accidente.

La madre de Natalia Segura, Alexa Mena, se pronunció sobre el incidente, mostrando su preocupación y reflexionando sobre los desafíos que ha enfrentado su hija a lo largo de los años. Mena expresó que, aunque la noticia de la caída le generó un profundo impacto emocional, confía plenamente en que tanto su hija como su nieto están protegidos por Dios.

“Digamos que es una situación diferente ahora porque está embarazada, pero realmente llevamos muchos años. Yo llevo muchos años con mi Nati, sé que se cae, sé que le duele, sé que hay una situación. Al principio, solamente sentía preocupación, tristeza, de pronto muchos reclamos y reproches a Dios. Yo decía: ‘¿Por qué, Dios? Desde el primer momento en un hospital con esa situación, desde el primer llamado con la noticia de lo que le había pasado, les hablo de hace años, (...) en clínicas, etcétera, no lo veía de otra manera, sino a través del dolor", expresó.

En un mensaje compartido, Mena describió cómo sintió una “piedra en el pecho” al enterarse del accidente. “No puedo dejar de pronunciarme de pronto sobre la caída de Nati. No soy capaz de escuchar la historia completa, no soy capaz. Sentí como una piedra ahí, el frío que me pasó. Ustedes saben que el hielo quema, pero por dentro. O sea, así lo sentí. No es fácil para uno como mamá escuchar que se cae la niña y está embarazada”.

Sin embargo, destacó que ha aprendido a manejar estas situaciones con fe y gratitud. “Pero gracias a Dios, a mi padre, he tenido un proceso personal muy hermoso, en el cual él me ha enseñado que el dolor también es amor. He aprendido a soltar, a soltar el control de las cosas y por eso sé que mi Nati siempre va a estar bien, igual que mi nieto y todos mis hijos, mi familia, porque están en las manos de Dios. Lo veo con felicidad, con gracia, con muchísima gratitud y con mucha felicidad, porque hoy por hoy yo vivo el momento presente”, afirmó, destacando que su confianza en Dios le permite enfrentar estos episodios con tranquilidad.

También afirmó que, antes, hubiera corrido desesperadamente a visitar a su hija, pero indicó que su fe la mantiene en paz: “Yo, la de antes, estaría tirada en el piso. Creo que ya hubiera cogido un avión, o sea, hablándolo así figurativamente, hubiera cogido un avión, me hubiera ido... yo qué sé, me hubiera enloquecido, yo creo (...) Pero rápidamente se transforma en felicidad, en amor. Nuestros hijos están en las mejores manos, y todos nosotros. Así que confiemos, confiemos en eso y seamos felices”.