A noventa kilómetros de Bogotá, en cercanías al río Sumapaz, se mantiene intacta la Nariz del Diablo, una formación rocosa que se convirtió en atractivo turístico luego de que se resistiera a la construcción de la vía Bogotá - Girardot en la década de los 40.
Los mitos sobre su origen y por qué no se ha demolido existen desde entonces, pero el tiktoker Santiago Quintero Pfeifer compartió lo que logró encontrar sobre este atractivo natural por el que pasan 16 millones de vehículos al año.
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Según dijo en un video compartido a través de su perfil en la plataforma Tiktok “se trata de la emblemática figura que queda en la vía Bogotá - Girardot, cuyo origen se debe a las diversas ocasiones en las que los trabajadores de la vía intentaron dinamitar la montaña en 1942, pero, aun así, su forma permanece igual, hasta el día de hoy, todo esto, atribuido por los propios trabajadores, a fuerzas demoniacas que no les permitían avanzar más allá”.
Del pico de la montaña que sobresale con forma puntiaguda se dice que es el lugar exacto en el que años atrás se realizó un pacto con el diablo y que, por tanto, no puede ser intervenida por el hombre.
Y es “a estas fuerzas” que se “le atribuyen los accidentes que ocurren en la zona, en uno de los lugares más particulares que tiene Colombia. De hecho, varios de los locales afirman que la nariz del diablo es absolutamente intocable porque tiene una carga espiritual histórica”.
Se sabe que, la construcción de la vía con la que puede llegarse a Cali, El Espinal y Neiva, requirió hacer trabajaos de demolición en la montaña, pero, al llegar al punto en el que se encuentra “la nariz” los trabajadores tuvieron que detenerse.
En por lo menos tres ocasiones utilizaron explosivos para quitarla del camino, pero, ni siquiera, lograron agrietarla. Motivo por el que se abrieron paso por debajo, dándole la peculiar forma con la que aún hoy se le conoce.
Sin embargo, Paola Pineda, creadora de contenido especializada en temas paranormales, explicó en un video del 2023 que “no solo recibe su nombre por la forma de nariz gigante que atraviesa la vía de lado a lado, sino porque, detrás de ella, hay toda una historia de terror y muerte. Durante la construcción de la vía en los 40, los trabajadores del lugar relataron que no se encontró explicación alguna sobre por qué, al llegar a aquel punto, no pudieron avanzar más... unos por el terror que sintieron al estar allí y los demás por la gran roca que intentaron detonar en varios intentos”.
Los mitos sobre su poder sobrenatural y el efecto que causa en quienes se acercan llevaron, incluso, a algunos locales a afirmar que de noche la nariz se pone roja y el demonio se aparece para “castigar” a los viajeros.
Historias que se escuchan desde su construcción, en 1942, cuando “trabajadores y personas que vivían en el lugar aludieron que era el mismísimo diablo que no los quería dejar pasar y los ingenieros, algo incrédulos, pero buscando una solución, hicieron un camino por debajo, donde pasaron sin problema”.
El verdadero motivo por el que no ha sido demolida es que: 1. No representa un peligro para los viajeros y 2. Se intentó, pero, de una u otra manera, la vía se construyó sin necesidad de echarla abajo, aunque, los menos escépticos insisten en que no debería ignorarse que:
“Al poco tiempo, luego de abrir la vía, su fama se hizo aún mayor, pues, los accidentes se volvieron constantes y la mayoría de ellos ocurrían muy cerca de la piedra, lo que incrementó su fama al pasar los años”, además, “hay quienes dicen que en este punto ocurren cosas muy extrañas: accidentes, sustos, apariciones y demás”.