Video: sujeto entró a robar en una casa habitada, pero salió al no ver algún elemento de valor

En una escena que ha generado todo tipo de reacciones en redes sociales, un ladrón desistió de hurtar dentro de una vivienda de Medellín cuando se percató de que no había ningún elemento de valor; esto, mientras algunas personas permanecían dentro de la misma vivienda.

Los hechos se registraron en el barrio Enciso de la capital antioqueña. Según se observa en un video que se difundió en redes sociales, una pareja permanecía dentro de su alcoba, al parecer, viendo televisión, cuando un hombre entró en completo sigilo a la vivienda.

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Este hombre, que vestía con una camiseta gris y una gorra azul, ingreso al lugar y de inmediato comenzó a revisar si había alguien allí, así como algún elemento de valor.

Al notar, inicialmente, que no había nada llamativo en la zona aledaña a la puerta de esta casa, el hombre optó por ingresar de lleno a la vivienda. Mientras tanto, los que serían los residentes seguían disfrutando con total tranquilidad de la televisión, a tan solo unos metros de donde estaba el delincuente.

Así las cosas, el sujeto, que traía consigo una maleta rosada y que vestía además con una bermuda, se tomó la “libertad” de entrar hasta la cocina de la casa, lugar en el que permaneció durante poco más de 20 segundos. Allí revisó todos los muebles, pero, al parecer, ningún elemento le llamó la atención, razón por la que regresó a la sala.

Nuevamente, el criminal analizó detalladamente todo lo que había y no logró dar con nada llamativo, razón por la que se dispuso a salir de la vivienda. Sin embargo, cuando ya estaba en la puerta, este sujeto escuchó la voz de las dos personas que estaban en la habitación y se detuvo para confirmar la presencia de las mismas, antes de abandonar la vivienda finalmente.

La escena generó todo tipo de reacciones en redes sociales, donde los internautas bromearon con la tranquilidad con la que este sujeto ingresó a la casa: “Le falto abrir la nevera al hpta!”, “Ni el ladrón lo puede creer que no se han dado de cuenta jjajsj”, “Jajaja Por poco y se sienta a comer”.

En los últimos 20 años, Medellín experimentó cambios significativos en materia de seguridad. A principios de la década de los 2000, la ciudad era conocida por sus altos índices de violencia relacionados, principalmente, con el narcotráfico y la presencia de grupos criminales.

Esta situación la ubicaba entre las ciudades más peligrosas del mundo, con tasas de homicidios alarmantes que afectaban de manera muy grave la calidad de vida de los habitantes.

Con el paso del tiempo, se aplicaron diversas estrategias de seguridad y desarrollo social que contribuyeron a una notable mejora en esta área. Programas como el Plan Integral de Seguridad y Convivencia Ciudadana y el Plan de Desarrollo Medellín Futuro son fundamentales para promover el fortalecimiento de las fuerzas de seguridad y la inclusión social en los barrios más afectados.

Estas iniciativas, junto a los avances tecnológicos en vigilancia y coordinación con la comunidad, lograron disminuir de manera considerable los índices de criminalidad en la ciudad.

Por ejemplo, mientras que en 1991 se registraron 6.809 homicidios –según cifras del Dane– en medio de una época marcada por el narcotráfico, para 2015, se registraron 495 casos, lo que significó una disminución notable.

“Medellín, a inicios de los años noventa del siglo XX y durante toda esa década, fue la ciudad más violenta del mundo. Hubo años en que las tasas de homicidios se acercaron a los 400 por cada 100 mil habitantes”, explicaron desde la ONG mexicana Seguridad Pública y la Justicia Penal.