Este es el pueblo colombiano considerado un tesoro por los santandereanos: queda a hora y media de Bucaramanga

Santander es un departamento de Colombia reconocido por sus paisajes. Por esta razón, los amantes de la naturaleza, siempre que pueden visitar diferentes lugares, eligen la región con el fin de tener recorridos llenos de imágenes que pueden capturar en fotografías o guardar en su memoria.

Específicamente, hacia el sur de la capital santandereana, a tan solo hora y media, existe un municipio reconocido por diferentes características. La Mesa de los Santos es un pueblo imperdible para quienes deseen hacer un viaje cerca a Bucaramanga.

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Este municipio es un destino ideal para quienes aman la naturaleza. Limita con la zona metropolitana de Bucaramanga, pero también con otros pueblos como Zapatoca, San Juan de Girón y Piedecuesta. Según la página Mesa de los Santos, en la actualidad, el destino se encuentra olvidado por muchos nacionales.

Pese a que es un lugar en el que se suelen registrar movimientos telúricos a diario, es un pueblo tranquilo y un destino perfecto para los amantes de la aventura. Su condición geográfica es accidentada, razón por la que se puede disfrutar de miradores que revelan la majestuosidad de las montañas que rodean este punto de la región; de hecho, desde La Mesa de los Santos se puede observar sin problema alguno el cañón del Chicamocha, así como realizar caminatas en ruta escalada y se puede viajar en el teleférico más impresionante del país.

También es un lugar que cuenta con cascadas de gran altura y espacios dedicados al cultivo del café, por lo que sus visitantes no solo pueden conocer sobre la producción de este producto colombiano, sino que pueden disfrutar de bebidas de la mejor calidad.

Gracias al sistema de mesetas en el que se fundó este pueblo, se pueden apreciar cascadas que nacen de los grandes acantilados que rodean al pueblo. Una de las más reconocidas es el Salto del Duende, ya que es de las más altas registradas en esta parte del país: son 280 metros de caída de un acantilado de piedra caliza, que finaliza en un bosque frondoso que se extiende hacia el pueblo.

No obstante, la vista de estas cascadas pueden verse afectadas por las lluvias, puesto que la nubosidad no permite que se pueda tener registro de ellas y tan solo se puede reconocer el sonido del agua cayendo.

Pese a encontrarse a más de mil metros de altura al nivel del mar, La Mesa de los Santos tiene un clima fresco que permite a sus habitantes y visitantes disfrutar de su temperatura. La página anteriormente citada, indica que el día y la noche son un gran contraste a nivel climático: si bien en la mañana y tarde los habitantes estarán frescos, en horas oscuras el frío se apodera del lugar, por lo que se aconseja llevar buenos abrigos. La temperatura mínima general es de 12 grados centígrados.

El mariposario Mauricio Babilonia está lleno de segmentos naturales que desbordan majestuosidad. Las plantas aquí protegidas, así como árboles, son el hábitat de mariposas y otros animales que son estudiados, pero también pueden ser visitados por turistas o locales ante la libertad de los animales. Cabe destacar que este espacio se encuentra ubicado en el centro de La Mesa de los Santos.

Una de las características de este mariposario es que es el único que se encuentra a cielo abierto, por lo que, a diario, los visitantes se pueden encontrar con animales no vistos en días anteriores.