Colombiano deportado de Estados Unidos afirmó que fue tratado como si fuera el ‘Chapo’ Guzmán

El antioqueño, que atravesó la frontera entre Tijuana y San Diego, indicó que Donald Trump está enviando un mensaje xenofóbico al asegurar que todos los migrantes son delincuentes

Guardar
El antioqueño reveló detalles del
El antioqueño reveló detalles del trato que recibió junto a otros 18 colombianos por parte de las autoridades en Estados Unidos - crédito Reuters

Dos días después de que llegó a Colombia el primer vuelo de connacionales que fueron deportados de Estados Unidos, se siguen conociendo denuncias sobre los maltratos que habrían sufrido la mayoría de ellos por parte de las autoridades norteamericanas.

Uno de los ciudadanos que más ha hablado de cómo fue devuelto a Colombia es Daniel Oquendo, que tras salir del aeropuerto internacional de El Dorado, indicó en rueda de prensa que todo se trató de un “show mediático de Petro”, y después de volver a radicarse en el país, decidió revelar, en diálogo con BBC, cómo fue su experiencia después de que fue capturado.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.

En primer lugar, reveló que llegó a Estados Unidos el 16 de enero, después de que dejó Medellín, tomó el riesgo de atravesar la frontera entre Tijuana y San Diego y luego se entregó a las autoridades.

¿Ustedes saben quién es el nuevo presidente de EE. UU.? Es papá Trump. La fiesta aquí a ustedes los colombianos se les acabó. Van todos para su país deportados”, contó Oquendo que fueron las palabras del oficial que bajó de la patrulla que se detuvo cuando él y otros 18 colombianos lo detuvieron.

Oquendo afirmó que los trataron
Oquendo afirmó que los trataron de esa forma, en parte, por culpa del Gobierno colombiano - crédito Cancillería de Colombia

El paisa, de 33 años, afirmó que no entendían por qué el vuelo que despegó desde San Diego no llegó a Bogotá y 10 horas más tarde terminó subiendo a un avión colombiano en El Paso, Texas, puesto que ningún uniformado les informó sobre la crisis diplomática que se estaba registrando.

“Llegó una camioneta, nos quitaron los bolsos y nos llevaron a un centro de detención de migrantes. Estuve ahí desde el lunes hasta el sábado y en ningún momento nos dejaron bañar”, declaró el colombiano a la BBC.

Mientras él y otros colombianos permanecían encerrados en una celda, los oficiales hacían rondas cada cierto tiempo en las que los obligaban a pararse para evitar que durmieran; de la misma forma, indicó que varios de sus derechos fueron violados en los seis días que estuvo incomunicado.

“Nos decían que teníamos derecho a un abogado, pero nunca nos dejaron comunicarnos con ninguno. Es para que a uno se le quede en la mente y desista en un futuro de volver”.

Más de 200 colombianos fueron
Más de 200 colombianos fueron deportados después de la crisis diplomática - crédito AP

Durante el primer intento de regresar a Oquendo y los demás colombianos a su país, fueron esposados de manos y pies, por lo que el paisa indicó que sintió que los trataron como “los peores narcotraficantes, equiparables al “Chapo” Guzmán”, los subieron a un bus, mientras que en el avión tenían que ser acompañados por militares para entrar al baño.

En El Paso, la situación fue diferente, los agentes que los recibieron permitieron que se bañaran, les entregaron ropa para poder estar cubiertos mientras lavaban la que tuvieron durante seis días y después los llamaron para identificar sus pertenencias.

La tranquilidad de los colombianos no duró mucho, puesto que después de tomar los elementos más importantes de sus maletas, las demás cosas fueron arrojadas a la basura, lo que Oquendo tomó como una represalia por parte del Gobierno de los Estados Unidos, debido a que el Estado colombiano no permitió su ingreso al país latinoamericano.

“Me parece excelente que [el Gobierno colombiano] alce una voz de protesta en cuanto al trato y que digan que no les gusta que traigan a los conciudadanos esposados, pero al devolvernos nos revictimizaron. Nos hicieron pasar dos días más de calabozo y de maltrato, dos días en los que no pudimos estar con nuestras familias”, indicó Daniel Oquendo.

El colombiano afirmó que los
El colombiano afirmó que los menores de edad también fueron esposados durante el vuelo - crédito Reuters

Por último, el antioqueño indicó que Donald Trump está enviando mensajes de “xenofobia” al tratar a los migrantes como criminales, puesto que, desde su opinión, la mayoría son personas que no tienen oportunidades en su país y están intentando tener un mejor futuro.

“Sabemos que cometimos una falla por la forma como entramos, pero no estábamos traficando, tampoco fuimos a robar a nadie. Si fuéramos narcotraficantes, como él dice, no estaríamos en Colombia, sino esperando un juicio en Estados Unidos”.

Guardar