Niña reportada como secuestrada en Barranquilla fue entregada por su niñera y quedará bajo custodia del ICBF

Luego de que se reportara la desaparición de una niña de cinco años en Barranquilla, la Policía Metropolitana desplegó un operativo en coordinación con el Gaula para dar con su paradero.

La denuncia fue interpuesta por Anderson Quintero, padre de la menor, quien alertó a las autoridades sobre un presunto caso de secuestro.

En medio de la investigación, Liliana Ester Rojas Rincón, la niñera, se presentó voluntariamente ante la Policía con la menor, afirmando que tenía documentos que le otorgaban la custodia, de acuerdo con información de la Revista Semana.

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Sin embargo, el denunciante también mostró pruebas que lo acreditaban como responsable de la niña. Ante la contradicción, la Policía de Infancia y Adolescencia asumió el caso y está analizando la documentación presentada por ambas partes.

De acuerdo con fuentes oficiales, tras el proceso de restablecimiento de derechos, la niña quedará bajo la tutela del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), entidad que definirá con quién permanecerá de ahora en adelante.

El padre de la menor también aseguró que la madre de la niña se encuentra en Holanda y que no ha tenido contacto con ella en los últimos meses.

Según la denuncia presentada ante las autoridades judiciales, Quintero aseguró que su hija llevaba desaparecida aproximadamente 12 días y que todo habría ocurrido porque la niñera enfrentaba problemas económicos.

“Hace aproximadamente 12 días se me llevaron a mi hija. La niñera, la que tenía cuidándola, se la llevó de la casa de mi hermana, que es de mi propiedad, y no sé nada de ella. La llamé y me dijo que no me iba a entregar a la niña”, relató Quintero.

El denunciante también afirmó que intentó negociar con la mujer para recuperar a la menor. “Le manifesté que yo le pagaba, que le daba lo que fuera, pero ella me respondió que lo hacía por necesidad y que, por eso, no me iba a entregar a la niña. Fui donde prácticamente la contratamos, que era la casa de la mamá. Fuimos y ya no vivía allá, solo vivía la mamá. Ella me manifestó que su hija hizo eso por necesidad de dinero”, agregó.

La Policía Metropolitana de Barranquilla está preparando un comunicado oficial para ofrecer detalles sobre este caso y las acciones tomadas.

Asimismo, recordaron a la ciudadanía que cualquier denuncia o situación similar puede ser reportada a la línea de emergencias 123 para una atención inmediata.

Un ataque armado ocurrido en el barrio La Chinita, en la zona suroriente de Barranquilla, dejó como saldo la muerte de una menor de 14 años y cuatro personas heridas.

Según informaron las autoridades, el hecho se registró la noche del domingo 12 de enero, cuando un grupo de personas se encontraba reunido en una vivienda del sector. Fue en ese momento que sujetos desconocidos irrumpieron en el lugar y dispararon contra los presentes, generando pánico entre los vecinos.

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De acuerdo con el reporte oficial, el ataque ocurrió alrededor de las 9:00 p. m. en una casa donde se desarrollaba un encuentro social. Tras el atentado, los agresores huyeron del lugar, mientras que los residentes de la zona intentaron auxiliar a las víctimas.

Estas fueron trasladadas a diferentes centros asistenciales de la ciudad, entre ellos el Camino Simón Bolívar y el Hospital General de Barranquilla. En el primero de estos centros, los médicos confirmaron el fallecimiento de la adolescente, identificada como Sharon Nikoll Sánchez Narváez, debido a la gravedad de las heridas.

Las autoridades también identificaron a los heridos como Alexander Enrique Geraldino Argel, de 53 años; Keinner Smith Crespo Sarabia, de 18 años; Darío Rubén Peláez Guerrero, de 35 años; y Delia Mercedes Guerrero Pérez, de 33 años. Todos ellos permanecen bajo atención médica, mientras se evalúa la evolución de su estado de salud.

Entretanto, la Policía Metropolitana de Barranquilla inició las investigaciones correspondientes para esclarecer los hechos. Según las primeras versiones recopiladas por los agentes, el ataque podría haber estado dirigido contra un hombre que se encontraba en la reunión. Sin embargo, esta hipótesis aún está siendo analizada por los investigadores, quienes trabajan en la recolección de testimonios y evidencias.