La reciente crisis diplomática entre Colombia y Estados Unidos ha desatado una serie de reacciones dentro del Gobierno colombiano con el presidente Gustavo Petro en el centro de las tensiones.
La negativa del primer mandatario de aceptar vuelos con migrantes deportados desde el país norteamericano como respuesta a las políticas migratorias del gobierno de Donald Trump, ha generado un fuerte apoyo dentro del partido de gobierno, el Pacto Histórico.
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En ese sentido, diversos congresistas y funcionarios han salido en apoyo del mandatario, defendiendo su decisión de no ceder ante las presiones internacionales y reafirmando la soberanía de Colombia.
La dignidad y soberanía de Colombia en juego
Una de las voces más contundentes en este respaldo fue la de la representante a la Cámara María Fernanda Carrascal que en sus declaraciones instó a la solidaridad y sensatez, subrayando que no se debe permitir que los connacionales colombianos sean tratados como delincuentes.
“Disponer del avión presidencial para traerlos con la dignidad que merecen es lo mínimo que debe hacer un gobierno”, expresó Carrascal, destacando que la diplomacia no significa arrodillarse ante potencias extranjeras.
Por su parte, el senador Iván Cepeda, otro miembro prominente del Pacto Histórico, también se unió a las voces que defienden la postura de Petro.
Cepeda criticó las políticas de Trump calificándolas de supremacistas e imperialistas y señaló que el verdadero problema no es la respuesta de Estados Unidos, sino el modelo de dominación que intenta imponer sobre América Latina.
Según Cepeda, esta actitud busca someter a los gobiernos y sociedades latinoamericanas, tratando a los migrantes como seres inferiores y utilizando medidas como la cancelación de visas y la imposición de aranceles para reforzar ese poder.
La defensa de la soberanía latinoamericana
Por su parte, la senadora María José Pizarro fue enfática al recalcar que Colombia no es “Culumbia” y que América Latina debe ser respetada como un conjunto de repúblicas democráticas que promueven relaciones horizontales con las naciones más poderosas: “Colombia es una nación soberana, somos un pueblo grande y orgulloso”.
La senadora también hizo un llamado a la movilización social para rechazar las medidas unilaterales de Estados Unidos, pues se refirió a una política de subordinación que durante siglos caracterizó la relación entre Colombia y otras naciones del continente, una actitud que, según ella, no puede repetirse.
La senadora Sandra Ramírez también mostró su apoyo al presidente Petro, denunciando la actitud sumisa de la clase política tradicional que, según ella, entregó el país a las políticas represivas de Estados Unidos.
Ramírez destacó la importancia de actuar con unidad y firmeza frente a las amenazas externas y subrayó que lo que está en juego es la soberanía y la dignidad de Colombia.
La resistencia y la dignidad de América Latina
El respaldo a Petro también llegó de la mano de la superintendente de Industria y Comercio, Cielo Rusinque Urrego, que destacó la lección de dignidad que el presidente colombiano le está dando a toda la región.
Rusinque celebró la postura de Petro ante las amenazas de Trump, señalando que la política exterior del presidente estadounidense representa una amenaza al orden internacional que busca la expansión territorial mediante la fuerza y el maltrato hacia los migrantes.
Para Rusinque, el conflicto con Estados Unidos podría ser la chispa que impulse una política internacional más equilibrada y una alternativa de desarrollo para el Sur Global.
Martha Peralta Epieyú, también del Pacto Histórico, hizo un llamado claro y contundente a no aceptar los abusos y atropellos de Trump: “No estamos diciendo que no se reciban colombianos en Colombia. Se está exigiendo un protocolo”.
Peralta remarcó que lo mínimo que se debe exigir es garantizar la seguridad y la dignidad de los deportados, una solicitud que, según ella, no debería verse como un acto de confrontación, sino como un gesto de respeto hacia los colombianos.
El derecho a la dignidad y la paz
El respaldo a Petro también fue expresado por el representante a la Cámara Gabo Becerra que destacó que el presidente está ejerciendo su función constitucional de defender la soberanía nacional y las relaciones internacionales de Colombia.
Becerra subrayó que ningún Estado tiene el derecho de imponer sus políticas de xenofobia y maltrato hacia los migrantes, y que las sanciones económicas y los ataques a las naciones soberanas deben ser rechazados por la comunidad internacional.
Por último, Daniel Quintero, otro miembro del Pacto Histórico, lanzó una crítica contra los sectores que piden más sanciones a Colombia, recordando que aquellos que traicionan a su patria pueden traicionar a otros en el futuro, haciendo referencia al senador Bernie Moreno.