Al hablar de los sitios turísticos más destacados del mundo, el Parque Nacional Iguazú, que se ubica en la triple frontera entre Brasil, Argentina y Paraguay, es uno de los más nombrados, principalmente por sus cascadas, que son las de mayor caudal del mundo.
Las cataratas del Iguazú también son una de las siete maravillas del mundo natural y fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco (1984 el sector de Argentina y 1986 el de Brasil), por lo que más de un millón de turistas recorren este espacio turístico al año.
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Debido a que no se trata de un espacio turístico que pertenezca a una sola nación, durante años se ha generado un debate sobre cuál zona es más favorable para los visitantes, si la ubicada en Brasil o la que queda en la provincia de Misiones, en Argentina.
Buscando sumarse a la discusión, el creador de contenido colombiano Juan Díaz, más conocido como Planeta Juan, decidió visitar el Parque Nacional Iguazú y después entregó detalles de su experiencia.
Así le fue al colombiano en Iguazú
En primer lugar, debido a que estaba en territorio argentino, Díaz se movilizó en autobús hasta la zona fronteriza para comenzar su visita en territorio brasileño, en donde tenía grandes expectativas de estar en La garganta del diablo, que es el conjunto de saltos de agua de hasta 80 metros de altura, que se precipitan en un tramo angosto hasta concentrar el mayor caudal de las cataratas del Iguazú
Después de pagar 16 dólares y hacer una fila de varios minutos, el colombiano ingresó al parque, en el que afirmó que “nos espera una experiencia llena de gente”, debido a que visitó este lugar un domingo, jornada que recibe la mayor cantidad de visitantes durante la semana.
Tras una hora y media de caminata, Díaz llegó al punto más cercano de las cataratas, y aunque remarcó que es un plan para las personas a las que no les molesten las aglomeraciones, reconoció que es uno de los espacios más bonitos que ha visitado del mundo.
“Invertí 45 minutos entrando a La garganta del diablo, repleto de gente, pero se tiene la vista de una de las partes más impresionantes de las cataratas del Iguazú. Segundo a segundo se va sintiendo la incertidumbre, nos caía agua de todos lados”, mencionó el colombiano.
Antes de visitar el recorrido argentino, Díaz recordó que según las tribus indígenas de Paraguay, las cataratas nacieron luego de que un dios evidenciara que su amada estaba a punto de marcharse con su amante, por lo que decidió abrir la tierra y evitar que pudieran estar juntos.
En el costado argentino del Iguazú, Díaz recorrió senderos con menor cantidad de personas, además de la posibilidad de ahorrarse varios minutos de caminata al hacer un viaje en tren. Luego de pasar por varios puentes metálicos, el colombiano llegó hasta La garganta del diablo del costado argentino, en donde reconoció que las estructuras que pasan por encima del río le dan un aura más natural a la inmersión.
“Usted atraviesa los grandes canales de agua, y la naturaleza le va señalando a uno hasta llegar a la caída de agua, es bien loco porque usted camina sobre agua, no hay piso, un par de rocas y ya”.
Luego de estar durante varios minutos en la cúspide de las cataratas, el colombiano reconoció que prefirió el recorrido argentino, principalmente porque le permitió tener una experiencia más individual y tranquila de las cataratas.
“Si me pregunta a mí, cada lado tiene lo suyo, pero me parece que la infraestructura y la experiencia están por el lado argentino, no quiero decir que un lado sea mejor, pero me gustó más el lado argentino”, puntualizó.