Más de 40.000 personas desplazadas y al menos 80 asesinadas en tan solo ocho días son las cifras alarmantes que reflejan la grave crisis de violencia que afecta a la región del Catatumbo, en el departamento de Norte de Santander. Según el presidente Gustavo Petro, esta situación fue provocada por el accionar del Ejército de Liberación Nacional (ELN), bajo el liderazgo de alias Pablito, que habría orquestado el desplazamiento de guerrilleros desde Arauca hacia esta zona fronteriza.
El mandatario colombiano, tras una reunión con su equipo ministerial y la cúpula militar en la Casa de Nariño, señaló que los combatientes del ELN se movilizaron durante un mes, haciéndose pasar por civiles, con el objetivo de tomar el control de la frontera y fortalecer su influencia económica a través del narcotráfico. Petro afirmó que esta estrategia busca consolidar al grupo armado como un actor clave en negociaciones internacionales, mientras se beneficia de la producción y tráfico de cocaína en el Catatumbo.
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“La responsabilidad de esta acción recae principalmente en alias Pablito. Por soberanía nacional, el ELN debe ser derrotado, al igual que cualquier fuerza que comparta sus objetivos”, declaró el presidente Petro en su cuenta de X. A su vez, el mandatario nacional hizo un llamado al gobierno de Nicolás Maduro para que asuma un papel activo en la lucha contra la criminalidad en la frontera colombo-venezolana. De acuerdo con Petro, la colaboración militar entre ambos países es fundamental para enfrentar la crisis de seguridad en la región.
“El copamiento militar colombiano en el Catatumbo y Arauca, y la militar venezolana en la frontera, deben ser acompañados de lo fundamental: el triunfo no está solo en el fusil, está en una verdadera justicia social”, expresó Petro en su publicación. Además, enfatizó la necesidad de implementar un pacto social que permita erradicar las causas estructurales de la violencia en estas zonas históricamente excluidas.
El presidente también destacó que la ruta del narcotráfico que conecta al Catatumbo con Haití ha sido un factor determinante en la escalada de violencia desde 2017. Con base en sus declaraciones, esta ruta no solo ha causado la muerte de cientos de colombianos, también ha afectado a miles de haitianos y venezolanos, empoderando a bandas criminales y fomentando la migración hacia Estados Unidos.
Conmoción interior y medidas para la Paz Total
Ante la gravedad de la situación, el Gobierno nacional declaró el estado de conmoción interior en el Catatumbo, una medida que busca restablecer el orden público y garantizar la seguridad de los habitantes. Según Petro, esta decisión está acompañada de un compromiso para financiar proyectos que materialicen los pactos sociales previamente acordados con las comunidades de Arauca y el Catatumbo.
“La Paz Total no es ingenua, es un proceso político y militar. Es necesario abrir oportunidades de progreso en las regiones excluidas del país”, afirmó el mandatario, que también instó al pueblo del Catatumbo a trabajar de la mano con el gobierno para superar la crisis actual. “Le solicito al pueblo catatumbero ayudarnos mutuamente para sustituir la economía generadora de muerte por una próspera, generadora de vida”, concluyó el mandatario.
Cabe mencionar que, el Catatumbo, una de las principales zonas productoras de cocaína en Colombia, ha sido históricamente un territorio disputado por grupos armados ilegales debido a su ubicación estratégica en la frontera con Venezuela. Según las declaraciones de Petro, la disminución de tropas constitucionales en la región en años anteriores contribuyó al fortalecimiento de estas organizaciones criminales.
El presidente subrayó que la violencia en el Catatumbo tiene implicaciones locales y también internacionales, al alimentar redes de narcotráfico que afectan a países como Haití y Venezuela. En este contexto, reiteró la importancia de la cooperación binacional para enfrentar este problema de manera integral.