El 31 de diciembre de 2024, Kevin Bocanegra murió a más de 4.000 metros sobre el nivel del mar mientras intentaba alcanzar el nevado del Tolima acompañado por su novia, Jois Ramírez, y su suegra.
Según explicó Jois en entrevistas con medios de comunicación y publicaciones en sus redes sociales, el viaje fue contratado con la agencia Transpáramo Viva Vivir Vivo, liderado por un guía llamado Óscar, primo de Bocanegra.
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En conversación con el diario El Tiempo, Jois compartió los detalles del plan que habían contratado, el cual estaba programado del 28 de diciembre de 2024 al 1 de enero de 2025. El itinerario incluía:
- Equipo completo de glaciar (casco, arnés, crampones, piolet, cuerda y mosquetones).
- Logística de todo el viaje.
- Guías de alta montaña.
- Mulas de carga para el transporte de maletas.
- Seguro de asistencia médica.
La actividad programada para el 31 de diciembre
El plan detallaba que el 31 de diciembre los excursionistas explorarían el Parque Nacional Natural Los Nevados, recorriendo rutas ancestrales rodeadas de flora y fauna hasta intentar alcanzar la cima del nevado del Tolima.
En uno de los apartados del itinerario, se especificaba: ”Nos proponemos adentrarnos en la majestuosidad del Parque Nacional Natural Los Nevados. Nuestro recorrido nos llevará por caminos ancestrales, custodiados por la flora y fauna, intentando conquistar los techos del Paramillo del Quindío y el imponente nevado del Tolima, en una inolvidable odisea que nos unirá desde Salento, Quindío, hasta Juntas, Tolima”.
El documento también indicaba que las jornadas diarias de caminata serían de 10 a 20 kilómetros, equivalentes a entre cinco y 12 horas, dependiendo de las condiciones del terreno y la capacidad física de los participantes.
Recorrido para el ascenso
El tercer día del recorrido estaba destinado a iniciar el ascenso hacia el campamento base, mientras que en el cuarto día de camino se planeaba alcanzar los 4.950 metros sobre el nivel del mar para coronar el nevado. Según el itinerario, tras llegar a la cima del nevado del Tolima, los excursionistas retornarían al campamento para un rápido almuerzo, mientras los guías enviarían el equipo en mulas para facilitar el descenso.
Simón Moreno, jefe del Parque Nacional Natural Los Nevados, explicó a los medios de comunicación que, para realizar actividades en este tipo de trayectos, es indispensable contar con un guía especializado en alta montaña. Estos guías deben estar debidamente registrados en el parque para garantizar el cumplimiento de las normas de seguridad. Sin embargo, según Moreno, no se encontró registro alguno del guía contratado por la agencia Transpáramo Viva Vivir Vivo ni en las guías autorizadas por Parques Nacionales, lo que indica una posible irregularidad.
Moreno también destacó la importancia de que los guías profesionales estén capacitados para identificar complicaciones de salud entre los integrantes de sus grupos, como las que presentó Kevin Bocanegra. “Una persona con síntomas de enfermedades respiratorias no debe hacer el ascenso. Ni siquiera debe realizar una caminata por el páramo. Cuando ya hay síntomas, lo principal es devolverse y activar la póliza. El guía actúa como primer respondiente, debe activar la póliza para que se preste la atención en caso de que se convierta en una emergencia”, insistió el jefe del parque.
Estas declaraciones resaltan la enorme necesidad de reforzar la supervisión y regulación de las agencias que operan en zonas de alta montaña para prevenir tragedias como esta, pues en el afán de cerrar negocios descuidan aspectos que pueden hacer la diferencia entre la vida y la muerte de sus clientes. Además, este desafortunado hecho ha generado interrogantes sobre las condiciones de seguridad y las capacidades físicas requeridas para realizar este tipo de actividades en entornos extremos.