Conmoción interior en Colombia: las fuertes reacciones tras la decisión de Petro por la crisis en el Catatumbo

La declaratoria del Estado de conmoción interior por parte del presidente de la República, Gustavo Petro, el lunes 20 de enero de 2025, fundamentada en los graves enfrentamientos registrados entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias de las Farc en el Catatumbo, uno de los epicentros de conflicto más intensos del país, así como en otros brotes de desorden público a nivel nacional, encendió la polémica en las redes sociales.

La medida extraordinaria, que no se tomaba desde hace 17 años, y que entró en rigor la última ocasión en 2002, cuando estuvo vinculada directamente a eventos de orden público en el territorio patrio, desató una fuerte lluvia de críticas contra el jefe de Estado, ante lo que sería la incapacidad de su Gobierno de garantizar la seguridad en el territorio nacional con los mecanismos con los que cuenta a su disposición.

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El anuncio, como era previsible, fue recibido desde varios sectores políticos con rechazo y duras críticas a Petro. “Se declara el Estado de conmoción interior y el estado de emergencia económica. Espero del poder judicial su apoyo. El copamiento militar siempre se desarrollará con la transformación económica de las regiones bajo violencia”, dijo Petro, con un mensaje su perfil de X al término del Consejo de Ministros.

En un fuerte mensaje en contra del mandatario, el expresidente Iván Duque Márquez expresó su desacuerdo rotundo a la determinación y calificó la decisión como una forma de aprovechar en materia política la coyuntura derivada de la situación de orden público que se registra en la zona fronteriza con Venezuela.

“Utilizar la tragedia del Catatumbo para revivir un adefesio de reforma tributaria es la politización del dolor de las víctimas del terrorismo, un despropósito jurídico y un tenebroso acto de oportunismo político“, afirmó Duque en la red social X, en la que no ocultó su indignación por la postura del actual mandatario.

A su vez, otra de las voces que se alzaron en contra de la medida fue la de María Fernanda Cabal, senadora y eventual precandidata presidencial del partido Centro Democrático, de cara a los comicios de mayo del 2026, que con dos copias de viejos mensajes de Petro recordó la oposición del presidente al uso de esta herramienta en 2021, cuando Duque contempló la posibilidad de implementarla.

“Para Petro, la conmoción interior que debió decretar Iván Duque era dictatorial, pero la de él sí es necesaria. Aquí los Estados de emergencia parecen más un capricho para gobernar por decreto que una salida a la situación que el mismo Petro ha provocado“, indicó. Y señaló los escándalos recientes ocurridos en el gobierno de Petro, como los casos de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) durante la crisis en La Guajira.

Por su parte, Claudia López, que fue alcaldesa de Bogotá entre 2020 y 2023 y antigua aliada política de Petro en las elecciones de 2022, también criticó con dureza la declaración. Desde su cuenta en redes sociales, López calificó la gestión del presidente como un síntoma de un estado fallido. Y destacó que tanto la policía como las Fuerzas Militares y las comunidades, a diferencia de Petro, sí tienen la “voluntad y las capacidades” para superar la situación.

“El caos de la ‘paz total’ de Petro terminó en conmoción interior. Desde hace 23 años el país no había tenido que decretar conmoción interior por razones de orden público. Ni paz, ni seguridad, ni Gobierno. Solo caos“, sentenció la exmandataria distrital, que cambió de forma radical la forma de ver el Ejecutivo.

Al respecto, Miguel Polo Polo, representante a la Cámara, también señaló que la medida podría representar una excusa para centralizar el poder mediante decretos legislativos, dejando de lado al Congreso. “Petro... lo hizo para tener la excusa perfecta de decretar la conmoción interior y tener el poder de emitir decretos con fuerza de Ley y pasarse al Congreso por la faja“, acusó el congresista de las negritudes, pero que es afín a las ideas políticas del uribismo.

“Ni Duque, en medio del paro nacional, que en realidad fue una toma guerrillera financiada por el narcotráfico, decretó la comisión interior. Esperamos que la Corte Constitucional rechace esto y haga respetar la República”, destacó en su pronunciamiento el congresista.

En el mismo sentido, el expresidente del Congreso Ernesto Macías aseguró que con este instrumento el mandatario de los colombianos, al que le restan un año y siete meses en el poder, busca modificar el panorama electoral. ”La situación de orden público es grave, pero no amenaza la estabilidad del Estado. No hay justificación para la conmoción interior, ni ‘emergencia económica’“, agregó.

A su turno, el exministro de justicia Wilson Ruiz compartió su análisis técnico sobre los riesgos de esta declaración. Ruiz opinó que este tipo de medidas “podrían convertirse en un instrumento para fortalecer la agenda política del Gobierno en lugar de solucionar los problemas estructurales como el narcotráfico y la violencia”, por lo que advirtió sobre marcados intereses politiqueros en la decisión comunicada por Petro en su plataforma de interacción favorita.

Además, advirtió que podría haber un “riesgo significativo de abuso”, especialmente si la medida se amplía a otras regiones del país, lo que podría incluir implicaciones más allá del conflicto en el Catatumbo entre estas dos estructuras ilegales. “Confiamos en que la Corte Constitucional seguirá siendo garante del equilibrio de poderes y de la protección de los derechos fundamentales“, reseñó el extitular de la cartera de Justicia durante la administración Duque.

Desde otro enfoque, que aunque es más cercano al jefe de Estado, no dejó de ser vehemente, el expresidente Ernesto Samper se desmarcó de la medida y exhortó a priorizar las condiciones humanitarias sobre soluciones directamente coercitivas.

“Lo que requiere la situación del Catatumbo... NO es un Estado de conmoción de orden público, sino de emergencia humanitaria para garantizarle los Mínimos Humanitarios a la población“, afirmó el exmandatario, que puso como centro de su crítica la urgencia de atender necesidades fundamentales como la movilidad, integridad física y la prevención de daños adicionales en las comunidades vulnerables.

Por su parte, el concejal de Bogotá Daniel Briceño destacó el alcance negativo que esta medida de excepción, que operaría durante 90 días con facultades extraordinarias para el jefe de Estado, podría tener sobre los derechos fundamentales. El cabildante distrital expresó que el presidente ahora tiene la capacidad de “restringir el derecho de circulación y residencia, establecer restricciones a la radio y la prensa” y manejar los medios de comunicación de forma discrecional.

Entretanto, el director del Centro Democrático, Gabriel Vallejo Chujfi, resumió el sentimiento de incertidumbre que quedó instaurado tras esta decisión, que causó una tormenta política en el país. “La declaratoria del Estado de conmoción interior y emergencia económica... solo significa una cosa: Se avecinan tiempos difíciles para todos”, puntualizó el exrepresentante a la Cámara por Risaralda.