El secuestro de Antonio José Marín, exalcalde del municipio de San Cayetano, en el departamento de Norte de Santander, será liberado, según informó un vocero del Frente de Guerra Nororiental del ELN. El político, que había sido privado de su libertad el 27 de diciembre de 2024, fue rescatado de manos del Frente 33 de las disidencias de las Farc. El grupo armado aseguró que entregará al exmandatario a una comisión humanitaria y a sus familiares en los próximos días.
De acuerdo con la información conocida, el secuestro ocurrió en la zona de San Isidro, sobre la vía que conecta a Cúcuta con el municipio de Zulia, una ruta que conduce hacia la región del Catatumbo. El hecho se registró en horas de la mañana, mientras Marín visitaba unos predios en las inmediaciones del Anillo Vial Occidental de Cúcuta. En ese momento, seis hombres armados interceptaron al exalcalde y lo llevaron con rumbo desconocido, dejando atrás a su escolta, que posteriormente denunció el incidente ante las autoridades.
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El escolta de Marín, asignado por la Unidad Nacional de Protección (UNP), fue abandonado en una zona rural de Cúcuta tras el ataque. Según reportaron las autoridades, el agente logró llegar a una estación de policía cercana, donde informó sobre el secuestro, lo que permitió iniciar las labores de búsqueda e investigación. En el lugar de los hechos, se detectó un posible cruce de disparos entre los secuestradores y el esquema de seguridad del exalcalde, ya que el vehículo en el que se movilizaba presentaba un impacto de bala.
El ELN, que posteriormente intervino en este caso, afirmó que Marín estaba en poder de las disidencias de las Farc al momento de su rescate. Aunque no se han revelado mayores detalles sobre cómo se llevó a cabo la operación, el grupo insurgente aseguró que los hechos se dieron en medio de una ofensiva armada y que su intención es entregar al exalcalde a una comisión humanitaria, garantizando su retorno seguro a sus familiares.
Cabe mencionar que en días anteriores, ningún grupo armado se había atribuido el secuestro del exmandatario: “Por un requerimiento que hace la familia del exalcalde logramos hacer una reunión de verificación de las investigaciones, conocer qué avances se han tenido y realmente tenemos que decir que han sido muy pocos. En la información que tenemos, no hay alguna estructura armada que se atribuya el secuestro como tal. Se han hecho los avances por parte del Alto Comisionado para la Paz con los grupos y las mesas de negociación, pero ninguno de ellos han confirmado si lo tienen en su poder”, señaló en su momento el secretario de Seguridad de Norte de Santander, George Quintero.
De otro lado, las autoridades han iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias que rodearon el secuestro de Antonio José Marín. Uno de los puntos clave es determinar si el terreno donde se encontraba el exalcalde era de su propiedad o si estaba en proceso de adquirirlo. Además, se indaga si Marín había recibido amenazas previas por parte de grupos delincuenciales, lo que podría haber motivado su solicitud de protección por parte de la UNP. A pesar de contar con un esquema de seguridad, el secuestro evidenció que las medidas adoptadas no fueron suficientes para prevenir el ataque.
El secuestro de Marín se suma a una serie de incidentes violentos que han venido afectado a la región del Catatumbo, una zona estratégica para el narcotráfico y otros delitos debido a su ubicación fronteriza con Venezuela. En este territorio operan diversos grupos armados, incluidos el ELN y las disidencias de las Farc, que disputan el control de las rutas ilegales y los recursos naturales.