El conflicto en el Catatumbo, región ubicada en el departamento de Norte de Santander, ha alcanzado niveles alarmantes por el enfrentamiento entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias de las Farc.
El comunicado emitido el 16 de enero por el frente de guerra nororiental del ELN acusa a alias Richard, identificado como Richard Suárez, de ser un “paramilitar” y advierte que “seguirá corriendo sangre” hasta que este se entregue.
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Según informó El Tiempo, Suárez es uno de los comandantes del Bloque Magdalena Medio de las disidencias de las Farc y desempeña un papel clave en las finanzas del grupo. Aunque fue firmante del acuerdo de paz de 2016, retomó las armas y ahora está involucrado en la mesa de negociaciones con el gobierno.
El comunicado también incluye amenazas contra comerciantes y empresas de la región que brinden apoyo financiero a la estructura de Suárez. Entre las entidades mencionadas se encuentra Ecopetrol, generando incertidumbre entre la población civil y los sectores económicos.
El Catatumbo es un territorio estratégico para actividades como el narcotráfico y ha sido disputado históricamente por grupos armados. En una entrevista previa con medios regionales, alias Richard afirmó que las relaciones entre su grupo y el ELN habían sido respetuosas durante los últimos siete años. Sin embargo, el reciente comunicado del ELN contradice estas declaraciones, indicando una ruptura entre las dos guerrillas.
El alto comisionado para la paz, Otty Patiño, calificó como “inmisericordes” las acciones del ELN, que buscan consolidar su dominio en la región mediante el uso de la violencia. Según la Defensoría del Pueblo, los enfrentamientos han dejado hasta ahora 23 muertos, aunque cifras no oficiales hablan de 34 víctimas fatales y al menos 20 heridos.
El gobernador de Norte de Santander, William Villamizar, describió la situación en el Catatumbo como “angustiosa” y confirmó que las acciones de los grupos armados han provocado desplazamientos masivos hacia municipios como Ocaña y Cúcuta. Además, reportó el cierre de comercios y la interrupción de las actividades escolares.
Alias Richard había expresado compromiso con la Paz en 2024 y dijo que sentía respeto por el ELN
En agosto del 2024, durante nueve días, la ciudad de Cúcuta, en el departamento de Norte de Santander, se convirtió en el escenario de la V Jornada de Transformación Territorial para la Paz, un evento clave durante los diálogos entre el Gobierno Nacional y las disidencias de las Farc.
Según informó La Opinión, este encuentro reunió a representantes de los bloques Magdalena Medio, Gentil Duarte, Jorge Suárez Briceño y el frente Raúl Reyes, con el objetivo de avanzar en compromisos relacionados con la transformación de territorios históricamente afectados por el conflicto armado y el abandono estatal, como el Catatumbo.
“Cada quien tiene una forma de ver las cosas o los problemas. Entonces, nos queda muy difícil hablar por ellos. Nosotros le apostamos (a la mesa de dialogó con el gobierno Petro), porque escuchamos los problemas de la gente, sabemos qué es llegar a una comunidad donde no hay un pupitre, donde los niños carecen de un baño, de un aire acondicionado, de un piso de cemento”, afirmó alias Richard en su momento durante la entrevista con La Opinión.
El evento no solo buscó abordar los desafíos de desarrollo en esta región, sino también establecer acuerdos fundamentales para garantizar el funcionamiento del proceso de negociación. Entre los asistentes destacó la presencia de Richard Suárez, comandante del Bloque Magdalena Medio y responsable financiero del frente 33, una de las estructuras armadas que opera en el Catatumbo.
De acuerdo con La Opinión, Richard Suárez es una figura que ha mantenido un perfil reservado. Aunque se sabe que es oriundo de los Llanos y que fue uno de los firmantes del Acuerdo de Paz con el gobierno de Juan Manuel Santos, posteriormente decidió rebelarse y unirse a las disidencias.
En su primera entrevista formal con la prensa, Suárez expresó su compromiso con los problemas que afectan al departamento de Norte de Santander, así como con la paz y los ideales de las Farc.
“Con los compañeros del Eln somos muy respetuosos. Siempre hemos respetado para que nos respeten y respetamos la forma de ver las cosas de cada quien”, afirmó Suárez al medio.
Durante la jornada en Cúcuta, Suárez abordó temas como el impacto de la división interna entre las disidencias, las tensiones en el Catatumbo y la relación de estas estructuras con el narcotráfico.
Según consignó La Opinión, el comandante subrayó la importancia de la mesa de diálogos actual como un espacio para resolver las problemáticas que afectan a las comunidades de la región.