La cantante Marbelle ha vuelto a ser el centro de atención en redes sociales debido a sus declaraciones políticas.
En esta ocasión, utilizó su cuenta en la plataforma X para compartir un video de Tiktok de la usuaria @martinik0558, en el que se usan las imágenes de los murales hechos con inteligencia artificial que fueron creados con el fin de ridiculizar la eliminación del emblemático mural “Las cuchas tenían razón” de la avenida Paralela en Medellín.
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En su publicación, la artista acompañó el video con un comentario que ha generado controversia: “LAS MAMÁS CRÍAN CIUDADANOS... LA CUCHAS... PETRISTES! POBRES CUCHAS”. De acuerdo con el contenido compartido por Marbelle, el video original pertenece a la usuaria de TikTok @martinik0558, quien expone una comparación entre las madres que, según ella, “crían ciudadanos” y las “cuchas petristas”.
En el video, la creadora de contenido afirma: “Mejor explicado no se puede. Hola, póngale pues cuidado: las mamás crean ciudadanos y las cuchas petristas, definitivamente, definitivamente una mamá corrige a un chino cuando está rayando la pared, a las cuchas les faltó juete”.
El metraje también incluye una referencia directa al presidente Gustavo Petro, señalando que “en algo sí tienen la razón las cuchas y es que Petro definitivamente es la perra de Maduro”. Este comentario ha sido interpretado como una crítica al mandatario colombiano y su relación con el presidente venezolano, Nicolás Maduro.
El término “cuchas”, utilizado en Colombia como una forma coloquial para referirse a mujeres mayores o a las mamás, ha sido empleado en este caso con una connotación despectiva hacia las madres de las víctimas de desaparición forzada y familiares de los cuerpos que fueron encontrados en La Escombrera.
Reacciones en redes sociales
La publicación de Marbelle no pasó desapercibida entre sus seguidores y detractores. Mientras algunos usuarios respaldaron su postura, otros la criticaron por el tono de sus comentarios y por promover un discurso que consideran ofensivo hacia un grupo específico de personas.
“Así es mamacita. Deles mas suave que usted les hace sangrar el ojete y por eso se ponen así de agresivos”, fue uno de los comentarios de apoyo, pero en contraste otro usuario escribió: “Usted no critique porque su hija no saben si en realidad el expolicía narcotraficante era el papá o era a los Romaña porque bastante que se revolcó con él”.
El mural “Las cuchas tenían razón”
Un mural que busca honrar la lucha de las madres buscadoras y denunciar las desapariciones forzadas en Medellín ha desatado una intensa controversia en la ciudad. La obra fue creada por colectivos artísticos y familiares de víctimas como un acto de resistencia y memoria. Sin embargo, su eliminación por parte de la administración local generó críticas y reacciones que han puesto en el centro del debate la relación entre el arte, la justicia social y las normativas urbanas.
El mural, que originalmente incluía mensajes alusivos a las desapariciones forzadas, fue eliminado por decisión de las autoridades locales, quienes argumentaron que no contaba con los permisos requeridos y que promovía el desorden en el espacio público. Esta acción fue interpretada por muchos como un intento de silenciar una denuncia social legítima, lo que provocó una ola de indignación entre colectivos ciudadanos y figuras públicas. Entre ellas, destacó el presidente Gustavo Petro, quien calificó la eliminación del mural como un acto de “revictimización” hacia las madres que buscan a sus seres queridos desaparecidos.
Tras la polémica, el mural fue restaurado con una nueva frase central: “Las cuchas tienen razón”. Este mensaje se convirtió en un símbolo de resistencia y solidaridad. La restauración del mural contó con el apoyo de diversos colectivos artísticos y sociales, quienes esta vez se aseguraron de cumplir con los permisos exigidos por la normativa local.
El respaldo al mural no se limitó a los colectivos ciudadanos. La intervención artística recibió el apoyo de personalidades públicas, entre ellas el presidente Gustavo Petro, quien expresó su rechazo a la eliminación inicial de la obra. Petro señaló que borrar el mural no solo era un acto de censura, sino también una forma de agravar el dolor de las familias que buscan justicia y verdad en un contexto marcado por la violencia y la impunidad.
Por su parte, la administración local defendió su decisión de eliminar el mural inicial, argumentando que esta acción se basó en el Acuerdo 10 de 2020, una normativa que regula las intervenciones gráficas en el espacio público de Medellín. Según esta regulación, cualquier intervención artística en espacios públicos debe contar con permisos previos, algo que, según las autoridades, no se cumplió en el caso del mural original.