Expertos dan consejos para administrar correctamente el primer sueldo del año, que viene con los intereses de las cesantías

Tras los gastos propios de la temporada decembrina, para los expertos en finanzas personales es esencial planificar adecuadamente el manejo del primer ingreso del año para lograr un buen comienzo en una ruta a la estabilidad financiera.

De hecho, algunos han realizado emisiones en redes sociales y concedido entrevistas para divulgar un poco de conocimiento con respecto al manejo responsable de los ingresos.

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De acuerdo con un artículo del medio económico La República, la economía nacional se caracteriza por depender del consumo, especialmente en el último trimestre del año. Esta circunstancia, por supuesto, tiene efectos en la construcción de las finanzas de los ciudadanos.

Según Henry Amorocho, profesor de Hacienda y Presupuesto de la Universidad del Rosario, citado por el medio, “el nivel de gasto en el país es importante y a la economía la mueve el gasto. De hecho, eso es determinante en lo que fue el mes de diciembre y básicamente el último trimestre se movieron por el nivel de gasto de los hogares”.

Sin embargo, este consumo elevado, que es positivo para la economía del país, no lo es para el bolsillo personal, en especial, cuando viene acompañado de un aumento en el uso de tarjetas de crédito que pueden derivar en complicaciones financieras si no se manejan con prudencia.

Amorocho recomienda, entonces, que “la tarjeta de crédito básicamente hay que utilizarla para suplir situaciones de transitoria y liquidez y al próximo mes pagarla, para que usted no esté desde luego acumulando pagos con tasas de interés de usura fuertes, pese a que la tasa de interés de usura en Colombia va disminuyendo”.

Alfredo Barragán, economista especializado en banca y finanzas, puso en un lugar importante el desarrollo de una cultura del ahorro, como una medida de gran peso para la recuperación financiera.

En diálogo con el portal informativo dijo que “es clave desarrollar la cultura del ahorro y crear un hábito financiero sólido. Cada persona debe definir el monto de ahorro acorde con su perfil financiero y objetivos personales”, señaló.

Por eso, recomienda llevar un registro de ingresos y egresos es otro paso, ya que permite visualizar claramente el estado de las finanzas personales y proyectar decisiones que maximicen los recursos disponibles.

Andrés Moreno, asesor financiero, sugirió evaluar los gastos mensuales básicos y ajustar el presupuesto si es necesario. “Revisar durante enero y febrero, si se pueden dos meses mejor, cómo están los gastos de transporte, gastos de hogar, servicios, alimentación, personal doméstico, colegios, arriendo, cuarta hipotecaria. Por supuesto los gastos personales, si subió el gimnasio, cómo está el tema de la salud y gastos de diversión”, explicó más detalladamente.

Este análisis es particularmente relevante en un contexto económico marcado por la inflación, que cerró en 5,20% el año 2024, según el Dane.

Moreno advirtió que destinar más del 30% de los ingresos al pago de deudas indica un nivel de sobreendeudamiento, situación que puede complicarse si las tasas de interés permanecen altas.

Para hacer producir el dinero, y no depender exclusivamente del ingreso de la nómina, es pertinente invertir, según los consultados.

Pero también es menester entender que este es un proceso a largo plazo. Moreno, por tanto, enfatizó que “las inversiones son una consecuencia de unas correctas finanzas personales, pero las inversiones no van a solucionar problemas de finanzas personales”.

Una opción segura son los Certificados de Depósito a Término (CDT), que actualmente ofrecen tasas atractivas debido a las políticas del Banco de la República.

“Indiscutiblemente me iría con un CDT que tiene un mínimo grado de riesgo de inversión y por lo que todavía las tasas del Banco de la República siguen estando altas, una tasa del 9.5% es una tasa alta antes de que en el transcurso del año disminuya”, concluyó Amorocho.

Comenzar el año con un manejo responsable del primer sueldo no solo ayudará a recuperarse de los gastos recientes, sino que sentará las bases para una economía personal más sólida.